Padre Emily
Ya es mediodía, me encuentro cansado y camino a casa, soy consciente de que aún tengo trabajo pendiente pero el cansancio puede más – haré todo en una hora y dormiré un rato –digo para mí mismo.
Al llegar a la casa me invade la preocupación, en estrés del trabajo - pienso-, bajo del auto, abro la puerta y antes de siquiera llegar a la sala ya estoy quitándome los zapatos, la chaqueta y aflojando mi corbata; dejo el portafolios en la mesa y me dirijo a mi habitación a cambiarme de ropa. Ahora con ropa más cómoda y menos elegante me dispongo a buscar a mi pequeña Emily, la niña de mis ojos, siempre estudiosa, responsable, ordenada, alegre y con un gusto particular por el color negro. Hoy es viernes, y ya es la una, lo que significa que mi pequeña ya ha terminado sus clases de la semana se encuentra en casa.
– Cariño, Emily ¿dónde estás?, después de almorzar podríamos salir a cine ¿qué te parece? – me dispongo a buscarla por la casa, seguramente se quedó dormida. Llegó a su cuarto, la puerta está cerrada, toco pero no obtengo respuesta. – Emily, cuantas veces te he dicho que... ¡Dios mío, Emily! – abro la puerta; mi pequeña se encuentra tirada en el piso, y un charco de sangre sale de su espalda. Me arrodillo a un lado de ella. – ¡niña de mis ojos responde, responde! – busco su pulso pero no lo encuentro – esto no puede estar pasando, por favor mi vida no me dejes – generalmente no soy sentimental, no soy de los hombres que lloran, pero al ver y tener a mi pequeña sin vida me destroza el corazón, sollozo – reacciona ... por favor –mi voz se quiebra– no soportaré otra pérdida más, primero tu mamá y ahora tú... – y es ahí cuando lloro, lloro como nunca, lloro por mi difunta esposa, lloro por mi pequeña Emy y abrazo su cuerpo inerte.
Me aparto, salgo del lugar y veo mi ropa, brazos y piernas llenas de manchas de sangre, sangre de mi hija; voy a toda prisa a la sala y busco mi celular en el portafolio, y llamo a Andrea, mi hija mayor, uno, dos, tres timbres, aún no hay respuesta, un par de timbres más y contesta.
–Hola, ¿papá, qué sucede? estoy en clase lo sabes.
–Andrea, tu... tu... tu hermana –sollozo.
– ¿Qué pasa con mi hermana?, no me asustes, ¿por qué estas así?
– Emily... Emily está muerta. –mi voz se corta y rompo nuevamente en llanto.
– ¡¿Qué?! – Su voz se escucha alterada y temblorosa–, esto no puede ser –solloza – voy en camino – cuelga.
Veinte minutos más tarde Andrea ya se encuentra en casa, frente al cuarto de su hermana, mirando con horror aquella escena, viendo como la policía examinaba la casa y los forenses tomaban fotos del cuerpo sin vida de su hermana menor.
--------
¿Y tú quien crees que asesino a Emily?No olviden visitar nuestras redes sociales y enviarnos tus ideas para continuar esta historia o escribirnos al correo medeclaroinocente. Emily@gmail.com
www.twitter.com/mdiemilyoficial
www.facebook.com/medeclaroinocenteoficial
www.instagram.com/medeclaroinocente/#medeclaroinocente
ESTÁS LEYENDO
Me declaro inocente
Mistério / SuspenseLa gente suele decir que a las personas buenas les suceden cosas malas y podría decirse que este es mi caso. Recientemente una chica fue asesinada, Emily, mi ex. Y tal pareciera que la última persona que estuvo con ella en vida fui yo. Ahora la poli...