Volverte a ver ♥ [ Liam & tu ]

♪ cαρíтυlo 9

_____ toco la puerta de la habitación de su madre, después abrió y se encontró a su madre recostada leyendo un libro. Inmediatamente al ver a su hija dejo el libro y se sentó en la cama

-   Mamá –dijo ella tímidamente-

-   ¿Qué paso hija? ¿Estás bien?

-   Sí, si no te preocupes, todo bien, quería pedirte permiso para salir mañana

-   Claro, ¿Iras con tu hermana? –pregunto su madre-

-   No, iré con un... con un... con un chico

Su madre la miro con el ceño fruncido. "¿Había dicho un chico?" nunca había querido salir con un chico ni nada parecido

-   ¿Con un chico? Nunca habías querido salir con uno, desde lo que paso

-   Ya sé, pero este chico es diferente a los demás, quiero salir con él, él es bueno, es amable, nunca haría algo como lo que hizo ese... imbécil

-   ¿Quién es? ¿Cómo se llama? Y ¿De dónde lo conoces?

-   Se llama Liam, lo conocí en el colegio, tenemos varias clases juntos –dijo la chica- por favor dame permiso, él no es como ese tipo

-   Está bien, no recordemos eso, si te doy permiso pero por favor cuídate mucho

-   Lo haré

Dicho eso ____ salió de la habitación de su madre. Feliz. Nunca se había sentido así, por primera vez un chico no le daba asco, al contrario. A pesar de lo que paso hace años y que recién lo conoce se siente muy segura con él.

..-..

Liam estaba dentro de su auto a las afueras del colegio, a pesar de ser sábado, no era porque iba a tener clases, era porque hay se quedó de ver con ____. Estaba nervioso, había salido con muchas chicas antes, pero ninguna lo había hecho sentir tan nervioso como ella. Debía admitirlo, esa chica le gustaba más de lo que creía, había algo en ella que llamaba mucho su atención, además de que era la chica más dulce que había conocido.

Entonces la vio venir, ella venía caminando en dirección al auto de Liam, ella estaba aún más nerviosa que él, pues no había salido con nadie después de lo que le paso ese día, no entendía lo que estaba sintiendo. Ni porque Liam no le daba asco o temor como los demás chicos. Él salió de su auto, y se acercó a ella

-   Hola –dijo el chico tímidamente-

-   Hola –saludo ella-

Liam abrió la puerta del copiloto para que ella entrara, se sentó y miro el interior del auto, era muy bonito, tenía su propio radio, e incluso en la parte trasera del auto descansaba una guitarra. Liam se sentó y empezó a conducir

-   ¿A dónde iremos? –pregunto ella animadamente-

-   Es sorpresa, no te diré... sé que te gustará mucho

-   Odio las sorpresas –la chica frunció el ceño, lo cual hizo sonreír a Liam- en verdad las odio, dime a donde por favor

-   No te diré –dijo el chico riendo- te va a encantar, ya lo veras

Ella se rindió, no iba a seguir insistiendo. Él siguió conduciendo mientras ponía la radio, empezó a sonar una canción, sin pensarlo ____ comenzó a cantarla en voz baja, lo cual sorprendió a Liam, cantaba bien y además daba una expresión de ternura al cantar, esta chica lo estaba volviendo loco cada vez más.

Liam dio vuelta en el auto, mientras se estacionaba en un lugar. Ella lo escucho, era el mar. Quedó totalmente sorprendida, no visitaba el mar tal vez desde que tenía 5 años. Liam saco una canasta de la cajuela de su auto, lo cual hizo mucha gracia en ____. Los dos caminaron en dirección a dónde provenía el ruido del agua de mar. Él día estaba soleado, y casi no había nada de gente. Él chico puso una manta en la arena y se sentaron en ella

-   Playa con jeans no creo que sea buena combinación –dijo ella riendo y mirando sus jeans-

-   No quería decirte que te traería a una playa, quería que fuera sorpresa, además yo vengo de mezclilla igual

-   Es perfecto, hace años que no vengo a una playa –ella estaba tan feliz de ver de nuevo el mar- gracias por traerme aquí

-   Pensé que te gustaría, no agradezcas –dijo él con una sonrisa-

Los dos platicaban de cosas sencillas como la escuela, las tareas, los maestros. También comían un poco de la comida que Liam había llevado.

-   Entonces ¿te acabas de mudar a Londres? –pregunto él-

-   Sí, bueno, yo vivía aquí pero nos tuvimos que ir por cinco años, más bien acabamos de regresar a Londres

-   ¿Por qué te fuiste por cinco años?

-   Por... problemas –contesto ella nerviosa- no es nada importante –ella miro a otro lado-

Liam frunció el ceño, quería preguntarle, ¿qué problemas? Pero no quería invadir su privacidad, al parecer ella no quería hablar de esos problemas

-   Y... ¿te gustan las playas? –pregunto Liam cambiando de tema-

-   ¿Estás hablando en serio? Las amo, amo el mar, amo el sol

-   Entonces ven –él se levantó y le tendió la mano a ella-

-   ¿A dónde? –dijo ella dándole su mano-

-   Al mar –respondió él- vamos al mar

-   ¿Con esta ropa? Además no traemos más ropa para cambiarnos, no quiero mojarme

-   Oh vamos –dijo Liam-

-   Uhmm –pensó ella- está bien

Ella corrió hacia el mar y Liam corrió tras ella, entonces los dos llegaron a la orilla del mar. Liam la alcanzó y los dos cayeron al agua mientras una pequeña ola llego a ellos mojándolos. Ella escupió un poco de agua salada que se metió en su boca, mientras él se tallaba los ojos. De repente ____ agarro un poco de agua entre sus manos y se la hecho a Liam en la cara, él río mientras hacía lo mismo que ella.

Empezaron a jugar con el agua de mar, se la echaban el uno al otro. Entonces de nuevo vino otra ola más grande y los mojo más de lo que ya estaban. Los dos reían mientras jugaban. Él la cargo, al principio se sintió incomoda pero después recordó que era Liam quien lo hacía y él era el único chico con el que se sentía segura.

Después de un rato empezó a hacer frío, así que salieron del agua y se sentaron de nuevo en la manta mientras comían un poco más

-   Espera, iré a mi auto por una chamarra –dijo él-

-   Sí aquí espero

Ella miraba el cielo, que se pintaba de un color naranja, mientras veía como el sol se escondía tras el mar. Hace tanto que no veía el mar, y ver el mar con Liam fue de lo mejor que le ha pasado, se sentía feliz de estar ahí, de conocer a un chico tan diferente como él.

Entonces de repente sintió algo sobre sus hombros, se giró rápidamente, era Liam que ponía encima de ella una chamarra

-   Gracias –dijo ella-

-   De nada, hace algo de frío, y estamos mojados no quiero que te enfermes

Ella noto que Liam traía algo en su mano, era la guitarra que ella había visto en la parte trasera de su auto. Aún recordaba la canción que él le había regalado

-   ¿Tocaras una canción? –pregunto ella-

-   Sí, si quieres claro

-   Me encantaría escucharte –admitió ella mirándolo a los ojos-

Él sonrío y comenzó a tocar su guitarra mientras cantaba un poco. Los dos se miraban a los ojos, y le poca gente que pasaba delante de ellos, los miraban y sonreían por la linda escena que veían. Ella no podía dejar de verlo, y él tampoco podía dejar de verla. Hacía frío y estaban mojados pero ni lo sentían, solo sentían su presencia el uno al otro, como si solo existieran ellos dos.