Me llamo Jack Frost, ¿Y tu?

¿Quien es real para mi?

SIA

Cuando fui completamente consciente otra vez de lo que pasaba a mi alrededor, estaba encerrada en una jaula para pájaros extra-grande. Todavía estaba mareada y asustada, lo último que recordaba era estar en el pasillo de la casa de mis abuelos, cuando de pronto una sombra se apareció por la ventana, me sujetó y me lanzó fuera. Creo que en algún momento escuché a Hadita chillar pero no estoy segura. Me incorporé lentamente y me acerqué al borde para ver donde estaba. Frente a mi había una habitación excavada en roca, oscura y siniestra. Una extraña luz que no sé de donde venia iluminaba la estancia de forma tétrica. Por debajo de mi se extendía una serie de extraños puentes y escaleras, parecía un cuadro abstracto de color gris. En el centro se veía un globo terráqueo igual al que Norte tenía en el polo, solo que este era de metal negro. A la izquierda del mismo, mirando en su dirección había dos tronos, uno grande y muy suntuoso de color negro brillante y otro un poco más modesto y rústico, en realidad si lo miraba detenidamente parecía una cama puesta vertical. Entre ambos quedaba lugar justo para un tercer asiento, pero no había nada salvo una pequeña mesa de patas torneadas.  

¿Dónde rayos estaba? A mi alrededor había muchísimas jaulas iguales a la mía, todas debían estar al menos a seis metros de altura del suelo, saltar sería un suicidio. Tomé la puerta y busqué un cerrojo, pero no había nada parecido, quizá se abría por fuera.

- ¿Hola? - murmuré suavemente. Nadie respondió, el silencio sepulcral era escalofriante.  

Intenté forzar puerta, tal vez si lograba abrirla podría usar las otras jaulas para bajar.

- ¿No es un encanto? Ya está intentando escapar.

En cuanto escuché esa voz solté los barrotes y di un paso hacia atrás, quedando en el medio de la jaula. Vira se materializó de una nube de vapor negro frente a mí, mientras que Pitch apareció de una sombra  en uno de los puentes cercanos. Esta vez estaba diferente, ya no usaba más aquel vestido ridículo, sino que estaba de traje, incluso me atrevería a decir que se veía elegante.  Vira se acercó a mí flotando sobre una nube de humo negro, usé toda mi fuerza de voluntad para parecer tranquila.         

- ¿Qué quieren? - pregunté manteniéndome firme.

- ¿De ti? - preguntó Vira con diversión - Absolutamente nada, ¿Qué nos puede ofrecer una mocosa como tú? Eres simplemente una carnada, tu adorado chico helado no debe tardar.

- ¿Qué es lo que quieres de Jack? ¿Por qué quieres eliminarlo?

- ¿Eliminarlo? - dijo esta vez con cierta sorpresa - No querida, en absoluto, lo último que quiero es que el invierno vuelva a ser algo incontrolable. Lo quiero aquí para aclarar algunas cosas contigo.

No me gustaba el tono en que lo decía, como si supiese algo de mi bastante interesante.

- ¿Cosas? - murmuré. Ella sonrió ¡Basta! Estaba jugando conmigo, tenía que ser eso. Pitch se apareció junto a ella montado en uno de sus caballos, traté de distraer mi mente de Vira y me enfoqué en él - ¿Qué pasó Pitch, por fin te diste cuenta de que parecías un afeminado con el vestido?