1.-La abuela fue un secreto
Cuando me despierto la primera imagen que mis ojos contemplan en un techo blanco, cierro los párpados de nuevo con la intención de volver a dormir tan solo unos breves minutos, se que no puedo permitirmelo, necesito estar lista a primera hora.
Me estiro en la lujosa cama del hotel que no ayudó mucho a obligar al cansancio salir de mi cuerpo.
Bostezo y una lágrima recorre mi mejilla adolorida. Ayer mamá golpeó mi rostro cuando le dije que no quería estar en el funeral de la abuela.Se que suena cruel decir que no siento nada al verla en un ataúd, pero no es nada más que la verdad. No convivi con ella más que en sus últimas horas de vida, lo mismo hizo mi hermano Devon con la única intención de suavizar el remordimiento de nuestra madre que nunca nos permitió conocerla, aún cuando ella se lo pedía.
Triste su situación, no conocer a sus únicos nietos que pudieron tener recuerdos junto a ella.
Yo no sabia que tenia una abuela materna hasta hace tres días. Mis padres nunca hablaron de ella por una razón extraña y desconocida para mi. Tampoco Devon y yo nos molestamos por preguntar por ella, siempre estuvimos bien al lado de mi abuela paterna.
Suspiró, no quiero indagar sobre el tema.
Apoyo el codo en el colchón y me intento levantar con el dolor de huesos, una buena ducha lo arreglara, supongo.
Me dirijo hasta la ducha y pongo el agua caliente, mientras la bañera está lista rebusco entre la maleta el atuendo que llevaré.
Dentro encuentro una fotografía que me dío la abuela antes de irse, era muy parecida a mi a excepción de que ella tenía unos hermosos y alegres ojos azules, mientras los míos son miel, como los de papá. En ella esta con un hombre que no conozco, tampoco estoy segura del porqué me dio la fotografía, solo la tome porque era su voluntad, seguro que ya deliraba la pobre mujer.
—La necesitarás— dijo antes de extendermela y regalarme una débil sonrisa desgastada. La tomé sin más solo para darle el gusto.
Me pregunto que hubiese sido si mamá nunca la hubiese mantenido en secreto, si nos presentarán antes de su lecho de muerte.
Guardo la foto de nuevo entre el montón de ropa y tomó la que usaré.
Me meto a la ducha con el deseo de que todo termine de una buena vez y volver a casa con mis amistades; perder clases no es lo mio, y tampoco quiero escuchar a mis profesores preguntar el porqué de mis faltas, no quiero explicar y tampoco recordar el mal sabor de boca que esto me está dejando, tampoco quiero odiar a mi madre por negar a la suya, me siento engañada y decepcionada de alguna manera, de mi padre no puedo decir nada, él apoyó todo esto.
Salgo de la ducha envuelta en la toalla blanca que tomé de un cajón, tomó el vestido negro de manga larga que nuca he usado a pesar del amor que le tengo al color negro y a los vestidos.
Uso unos zapatos altos negros también, y espero a que alguien toque la puerta en mi busca, lista para irme y ver como el cuerpo de la abuela es abandonado en el fondo cubierto por tierra.Miro la ventana, hay un paisaje bonito, el jardín grande del hotel, la soledad lo deja ver en todo su esplendor. Unos golpesitos en la puerta me hacen desviar la atención del paisaje.
Abro y me encuentro con Devon igual o más cansado que yo.
Parece agobiado, trae consigo una charola con desayuno elegante justo para ambos, no tengo mucho apetito y supongo que él tampoco.—Buenos días— saluda pasando a mi lado y cerrando la puerta detrás de si.
Tiene puesto un traje negro que lo hace ver guapo, lástima que no es para alguna cena importante de papá o para algo que nos haga felices.
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Almas Olvidadas
Misteri / ThrillerA Astrid nunca le llamo la atención hablar sobre los seres del más allá. Pero existe una fina línea que separa a los muertos de los vivos. Tras la muerte de su abuela, Astrid podrá traspasar esa línea; Un dón o una maldición que le fue entregada, q...