Un milagro en el fin del mundo

Capitulo 12

Capítulo 12

Enfrentando el pasado

    Los dixon había y serán siempre un par de hombres antisociales que carecían de las habilidades sociales para entablar una verdadera relación. Merle Dixon había tenido tantas novias como novios y ninguno había pisado su casa. Y la duración del "Noviazgo" no llegaba a una semana, todos habían estado en moteles, jamás había sido él pasivo, él decía que nunca entregará su culo a un borracho.... La violencia que había en cada una de sus citas o constante serán una característica que veía el menor dixon desde que era un crío. Su hermanos salió ileso y regresaba con más de una costilla rota, el labio roto y varios moretones a simple vista. Cualquier padre normal, se alarmaron al ver a su hijo mayor hecho una mierda, pero teniendo en cuenta que Will Dixon era de todo, menos un padre normal. 

   Pero la realidad era otra, muchos de los moretones que su hijo de 20 años presentaba eran a causa de las golpizas que el viejo les daba por cualquier razón qué les pasará por la cabeza. Ninguno pensó que sería posible él tener una relación normal, como las que veían por las ciudades actuando todas rosas. Y realmente él menor de los dixon más de una vez los veía con repulsión, mientras se encontraba sentado en su motora, pensando si realmente podría existir una persona que lo aceptara con toda la mierda con al que había cargado desde los pocos años de edad. No era normal sus anormalidad, y no era de algo con lo que podía hablar. No quería terminar en un laboratorio, por qué desde cuando un hombre, que nació hombre, podía gestar un bebé como si fuera una mujer.

Definitivamente al cumplir la mayoría de edad, se unió a su hermano en sus fechorías, no le importaba golpear a alguien, ni robar, ni mucho menos usar drogas. Pero si le incomodaba que las chicas con al que su hermano andaba, se le acercaran y quisieran llegar a más con él. No le interesaban las mujeres, jamás lo hicieron. Y cuando al fin, vio un atisbo de algo en su hermano fue cuando conoció a aquel hombre que por accidente arrolló a su hermano. Si una forma extraña de conocerse, pero, en seguida se formó un vínculo fuerte entre ambos hombres. Uno con una posición estable y un carácter tranquilo y paciente, mientras que el otro era un violento y drogadicto. Y se puede decir que gracias a él Merle había salido del agujero en el que se encontraba. Aunque ahora que lo piensa, seguramente este hubiera tomado decisiones diferentes si hubiera sabido que terminaría de esa sombría manera.

Después de la muerte del niño como del padre, su Hermano se sumió en la bebida nuevamente, descargando en cualquiera que deseara su furia y angustia. Se sentía culpable, por no haber podido proteger a quien le había dado todo. Ahora tenía que cargar con esa carga en lo más profundo. Por lo que, cuando la noticia de que algún tipo de epidemia comenzaba a correr por las noticias de todo el mundo, los hermanos dixon no estaban cerca de ninguna fuente de noticia. Tanto Daryl como Merle, se encontraban en el bosque cazando en una reunión forzosamente obligada por su padre. que tuvo el descaro de exigir algo luego de lo que hizo. Ambos no movieron ni un músculo, cuando ese hombre de la nada le saltó encima y clavó sus dientes en su cuello. Pero si huyeron cuando varios más salieron de la nada y corrieron hacia ambos.

Ninguno derramó ni una lágrima él caminó hacía la ciudad, en silencio permanecieron rehusándose a romper el tranquilo silencio. Claro que ambos daban por muerto al viejo, pero hierba mala nunca muere desgraciadamente. y aunque deberían de sentirse culpables por la sensación de alivio qué se adueñó de sus corazones. Pero no lo iban a negar. Agradecieron a lo que fuera que había sacado a la pesadilla andante que era su padre.

Así que para Daryl haberle visto después de tanto tiempo, en él qué pensaba que quizás podría olvidar el pasado había sido un shock que sin duda le hizo entrar en pánico. SU hermano tuvo más compostura, pero jamás iba a permitir que su idiota padre arruinara la poca seguridad que había logrado formar en su pequeña familia. Su nonato hijo, no iba a ser arrancado de nuevo de su lado, como la última vez. Esta vez lo mataría, bueno lo remataría por segunda vez, y esta vez se aseguraría de que se quedara donde debía estar hasta el tiempo correcto. Lo protegería...

La prisión que había sido su refugio, se había vuelto un lugar muy ruidoso en algunas ocasiones, todos estaban en sus diferentes trabajos, buscando cosas que sin duda podrían ayudar a preparar la cena. Mientras que unos buscaban los cultivos que pudieran utilizar, otros estaban buscando a uno de los dixon qué nadie había visto desde esta mañana. Rick Grimes tenía una cierta idea de dónde hallarlo. Por eso, le pidió a Glenn que le dijera a Carol que seguía buscando al cazador, que los alcanzan en el comedor. Mientras que él daba vuelta hacia la parte trasera de la prisión. El extenso patio les había permitido tener espacio para que fuera difícil él hallarlos y realmente no ayudaba cuando tenían a dos que drásticamente se hacían fantasmas. Bufo, rascándose la nuca, mientras observaba hacía la escalera con vaya que daba una de las torres de vigilancia. Este se acercó y descubrir que al mover la misma esta se deslizó sin problema, él seguro estaba fuera de lugar, no roto, si lo suelto. Comenzó a subir las escaleras, con una mano en su arma.

Mil y un pensamiento le pasaron por la cabeza. Sabía qué podía ser alguna pareja, pero no estaba seguro tampoco que no fuera un caminante que había logrado burlar su seguridad. Aunque era absurdo debido a que había quitado el agarre que había en la valla que habían creado. Al abrir la puerta, este se encontró con una imagen que no esperaba. Este guardó su arma, suspirando con una sonrisa en su rostro. El sureño permanecía apoyado contra el muro más alejado de la puerta, su ballesta apoyada junto a él con una mano sobre ella, mientras sus ojos cerrados y una respiración pausada, le hacía saber que el hombre dormía quién sabe por cuánto tiempo llevaba allí dormido.

      - Daryl (Le llamó rick aproximándose) Daryl (Se inclinó moviendo lo un poco)

      -¿Qué quieres? (Se quejó este sin abrir los ojos)

       -Carol insiste en que vayas a comer (dijo este sin moverse)

       -... (Bufo abriendo los ojos) Para eso me despiertas (Se quejó este)

        -Debes comer (Repitió este tranquilamente) No debes seguir saltándose la cena (Se quejó este)

      -... (Lo miró molesto) Está bien, Mamá (Protestó este sentándose en el suelo) para de mirarme (le dijo cortante)

       -... (Sonríe desviando la mirada)

Ambos hombres abandonaron el lugar, Rick al descender las escaleras, cerró la valla, era un medio de seguridad, para que los niños no subieran y se lastimaran. Carol no estaba feliz, golpeaba el suelo con su pierna, mientras veían a los dos hombres aproximándose. Su expresión era extraña, para ambos era difícil adivinar qué era lo que pensaba la mujer que lo estudiaba con la mirada. Pero ella únicamente pasó su mirada de uno al otro hasta perderse en los ojos del cazador que rápidamente la desvió nervioso. Sabía que a ella no le podía ocultar nada y le atormentaba que ella descubriera lo que sentía por él sheriff. Sentía que no estaba bien, él no debería sentir eso qué le atosigaba continuamente, eso qué lo hacía dudar y rogar que su vida se fuera al demonio. Que no pudiera sentir eso más, nunca más. Está tranquilamente les da un cuenco con comida a ambos, dándole un apretón al cazador en el brazo antes de pasar de largo. 

      Así de alarmante era lo intuitiva que era ella, sabía que se había percatado antes que él mismo. O eso deseaba creer, muy profundamente tenia una certeza que ese sheriff, le gustaba mas de lo debido. Pero, acaso ese sentimiento era correcto. Tenia Varios puntos en su contra, ciertamente, en primer lugar, los dos eran hombres, en segundo lugar, Rick Grimes, tenia una lunática por esposa o según los rumores, ex-esposa y dos hijos que sin duda eran todo su mundo...

-  Como podría destruir esa familia tan perfecta (pensó observando a rick regañando a su hijo)