pactos

Capitulo 4

Zafiro se apoyó con las manos en el suelo para levantarse de donde la habían tirado, se puso todo lo recta que pudo y levanto la barbilla para afrontar a este ser asqueroso que no dejaba de mirarlas con una sonrisa diabólica en el rostro.

Estaba intentando mostrarse fuerte y hacer acopio de valor pues los sonidos que le llegaban del exterior eran horribles gritos de mujeres y niños llorando desconsolados .
Cada vez que oía un grito sentía un escalofrío que le subía por la espalda y le hacía temblar de miedo, pero para no demostrarle nada a lhander cerró los puños con suficiente fuerza como para clavárse las uñas en la piel.

Estaban quietos mirándose sin apartar la mirada, de vez en cuando ese ser ladeaba la cabeza como intentando escuchar algo que nosotras no oíamos y era espeluznante, no quería volver la mirada hacia su madre porque lo perdería de vista y no sabía que haría a continuación.

Como no decía ni una palabra zafiro hablo:

¡Que le habéis hecho a mi madre Perro del demonio!

-vaya vaya que hospitalidad tan mala pequeña
-que te ha enseñado Eritrea hasta ahora? Respeto no, eso es seguro

Lhander levanto la mano donde zafiro le había cortado con el cuchillo y lentamente se llevó la mano a la boca y muy muy lentamente chupo el corte con la lengua
En ningún momento dejo de mirarla a ojos y casi parecía que no parpadeaba

-pero eso se puede arreglar...

Eritrea se movía intentando quitarse las ligaduras mientras lanzaba miradas amenazadora al gigante

Zafiro se dio la vuelta todo lo rápido que pudo y llego hasta su madre para quitarle la mordaza que le habían metido en la boca.

Su madre era una gran hechicera conocida por las aldeas por la bondad de su corazón pero no quitaba del gran conocimiento que ella poseía pues cuando nació ya tenía EL don
Con unas pocas palabras y una mirada controlaba la voluntad de personas y animales
El don se heredaba de madre a hija y se sabía desde el nacimiento pero en el caso de zafiro no fue así.

No tuvo ningún poder de nacimiento y hasta hace poco no había podido nada más que hablar con los animales y el bosque, su madre se negaba a enseñárle nada pues decía que no estaba preparada para aprender y qué sino no lo tenía era el destino el que lo había elegido así.

Ahora zafiro no pensaba en eso pero sabía que sí lograba quitarle el trozo de piel en la boca Eritrea podría decir las palabras y controlar al gigante.

Llego tropezando donde estaba atada su madre y cogió la mordaza, estaba casi fuera de la boca cuando sintió una mano que la agarraba de la pierna y tiraba con fuerza hacia atrás,
cayo al suelo, intento agarrase a lo que podía, sentía un dolor horrible en su tobillo como sí se lo hubieran aplastado con una piedra

Lhander le dio la vuelta boca arriba y con la otra mano la agarro del cuello

- chst chst no no pequeña mala

Le apretó más las presión en el cuello y casi no podía respirar

-todavía no hemos acabado de hablar Eritrea y yo así que se una buena pequeña y quédate quieta mientras seguimos nuestra conversación.

La levanto por el cuello tan alto que no tocaba con los pies en el suelo y en un movimiento la golpeo contra el poste de madera que sujetaba la tienda,
en su otra mano aparecieron unas cadenas de color verde musgo y la ato al poste con ellas
En cuanto estuvo atada sintió temblar todo su cuerpo como sí esas cadenas no pertenecieran a este lugar, estaban echas con ninguna cosa que ella conociera pero era una sensación de suciedad como sí te manchasen el alma.

Lhander dio un paso atrás ladeo la cabeza admirando su trabajo y dijo:

- quédate quieta y callada y tendrás mejor destino que otras

Se dio la vuelta y hacercandose a Eritrea le dijo:

- veo que aún tienes fuerzas para protestar pero con audiencia creo que querrás colaborar un poquito más, ¿verdad hechicera?

Lhander chasqueo los dedos y al momento un hombre apareció por la entrada de la tienda

Zafiro miro con horror como se dirigía hacia su madre sin poder hacer nada por detenerlos
Si sólo supiera las palabras...

Lhander chasqueo la lengua y le susurró a Eritrea:

- ¿cuanto aguantarás hechicera?