Eras una de las personas más importantes de mi vida y al darte ese privilegio, fuiste una de las que más me dañó, una de las que más hizo sentir...
Eres de quien menos quiero escribir, pero si lo hago ahora, es para olvidarte, para sacar todo lo que tenía guardado dentro de mi corazón y mente.
Me enseñaste a ser una persona fría, seca. Me enseñaste a no abrir mi corazón a las personas nuevas, porque ya sé lo que sucede cuando las dejas entrar rápido.
Te encariñas, te enamoras, te lastiman, te mienten, te desilusionan.
No pediré que te quedes porque tal vez ya estés lejos y como dijiste, no volverás por nadie, mucho menos por mi.
Así que lo único que me queda es decirte que seas feliz, pero feliz de verdad, no esa felicidad temporal que conoces. Sino esa felicidad que no depende de nadie ni de nada. solo de tu interior! Solo de ti!