Durmiendo con mi hermano [TERMINADO]

Cuando todo se acerca y tienes claustrofobia.

Capítulo 42

》Dyana《

Estaba fuera del hospital, viendo la entrada de cristal que dejaba ver la recepción, estaba dudando si entrar o no, mordiendo la uña de mi dedo pulgar, apretando mi celular con la mano libre, decidida a arreglar este asunto, no dejaré que Karla gane, no lo permitiré.
Mi telefono sonó por cuarta vez en la mañana, Zeke, negue la llamada.

- no quiero hablar contigo Zeke...- susurre a la pantalla mientras pulsaba el boton rojo en la pantalla.

Respire hondo y camine hacia las puertas, estas se abrieron automáticamente y el olor a alcohol y enfermedad me invadió, camine hacia la recepcionista y ella sonrió a verme.

-buenos días, ¿a quién viene a visitar?- sonreí al escuchar la pregunta.

- se llama James Jacob Mitchels- ella tecleo en la compjtadora, diciendo nada me extendió un gafete, levante una ceja al tomarlo, viéndolo a detalle.

- tome el elevador y ve al segundo piso, lo transfirieron a observación, esta en la habitación 213...- me daba instrucciones con las manos mientras yo asentía con la boca semi abierta.

- gracias...-

Mis pies se movían en dirección al elevador, rogando a Dios qie Scarlett no estuviera; toque el botón y espere hasta escuchar el "pin" característico cuando llega al piso, las puertas se abrieron haciendo ruido y vi a varias enfermeras en este, entre dedicándoles una sonrisa a cada una. Pulse el botón que decía 2 ellas continuaban platicando, de asuntos medicos, hablando de los disturbios de anoche, disturbios que yo cause.

- ¿escuchaste los gritos?- dijo una de ellas, la castaña.

- sí, la señora estaba inconsolable, fui a cambiar el suero anoche, y estaba llorando como viuda.- dijo la güera mientras veía sus uñas.

- ha de haber perdido a un buen hombre.- susurro la castaña viendo su carpeta de paciente.- y hablando del diablo, me asignaron chequeo de marca pasos en la 213.- le toco Jacob.

- suerte, que la señora no te envuelva en el drama.- dijo dándole animos con golpes en el hombro.- que hasta a ti te darán ganas de llorar.

El elevador sonó, vi la pequeña pantalla con el dos en rojo, salí de este detrás de la enfermera, caminando con miedo de toparme a Scarlett e iniciar otro problema. Me acerque lento al cuarto que la emfermera entró, asome mi cabeza en el cuarto, viendo a Jacob acostado con los ojos cerrados, en la misma posición que cuando lo deje ayer en la noche, la enfermera acomodo su cabello hacia atrás, acomodo creo el suero, yo soy tan cobarde que no me atrevo a entrar, parece que la enfermera no le habla a nadie, solo hace su trabajo; mueve, acomoda, mueve la cama, abre el suero, la aguja de su brazo la revisa, se gira y regresa a la puerta, salio de la habitación cerrando la puerta detrás de si.

- disculpa....- susurre extendiendo la mano hacia su hombro.

- ¿si?- se giro un tanto confundida.

- quería....-aclare la garganta.- quería saber si hay alguien en la habitación.- señale con la mano la habitación.

- no, el joven esta solo.- me dedica una sonrisa amable pero confundida; agarro la carpeta que había dejado en la puerta y se marcho al centro de enfermeras de ese piso.

Tome el pomo un poco cálido de la puerta, lo gire dando el primer paso hacia la habitación, camine por el azulejo tan familiar, escuchando el marca pasos con mas intensidad, levante la mirada para ver a Jacob en la misma posición que hace dos segundos, cerre detrás de mi la puerta, camine el resto del camino hacia Jacob, tome la mano que estaba fuera de las sábanas, la que tenia las agujas del suero, estaba fría aunque el clima es algo cálido aun siendo las once de la mañana.
La tome con fuerza, con esperanza de calentarla un poco.