Guerreros Elementales: El Renacer Del Bosque.

Jake Collins: La Infiltración.

Media noche, es hora de comenzar nuestra misión. Salgo de mi escondite entre dos edificios y observo a mi alrededor por los guardias que vigilan la zona -no hay nadie-. Me apresuro a usar mi poder de Teletransportación para colocarme en el techo del edificio principal. Espero a que mis compañeros me informen su posición para comenzar con nuestro objetivo de hoy. Pasan varios minutos hasta que escucho la voz de Frank -es el encargado de distraer a los guardias en caso de que algo salga mal-.

-Jake, debo insistir, tengo un mal presentimiento; creo que no lo lograremos esta vez, el "Anciano" aumentó la seguridad de las instalaciones desde el último trabajo. ¡Sabrá que fuimos nosotros!

-Cállate, Frank, deja de decir eso. Te juro que si lo vuelves a repetir me teletransportaré detrás de ti y te pateare el trasero.

-Quiero ver que lo intentes, idiota. No pasarán ni tres segundos y tendrás ambas piernas atravesadas por mis Lasers -básicamente su poder es lo que el nombre indica, Frank lanza lasers muy destructivos con sus manos-.

-Sueñas amigo. Me darás con tus Lasers el día que Bugg falle en algo.

-Niños, podrían por favor callarse. Estoy tratando de hackear la computadora principal.

-Bugg, ¿por qué no informaste tu posición?

-Si lo hice, pero tú y Frank estaban tan concentrados expresando su amor que no me escucharon. Ahora por favor, guarden silencio, el firewall es más sofisticado ésta vez, el viejo en verdad reforzó la seguridad.

-Te lo dije, Jake, nos atraparán. Abortemos ahora que tenemos tiempo.

-Nada de eso, no nos iremos hasta hackear esa computadora. Oye Bugg, ¿tardarás mucho en pasar el firewall?

-No mucho, si hice todo correctamente, debería funcionar luego de dar click aquí.

En este momento todo se va al carajo. Bugg no ha logrado hackear correctamente la computadora principal y se encendieron las alarmas de las instalaciones. Los guardias vendrán a ver qué sucede, por suerte tardarán unos minutos en llegar, lo que le dará tiempo suficiente a Bugg para escapar.

-Jake, extracción de emergencia. Rápido -el susurro de Bugg es apenas audible en los comunicadores-.

-Tranquilo amigo, los guardias tardarán en llegar, date prisa y sal de allí.

-Los guardias ya están aquí. Entraron por la puerta trasera. Date prisa y sácame de aquí -demonios, no imaginé que fuera a pasar esto. Frank tenía razón, nos atraparán-.

-De acuerdo Bugg, quédate donde estás, ya voy por ti. Frank tu corre hacia la puerta trasera y llama la atención de los guardias, no deben llegar hasta Bugg. Corre hasta allí e interceptalos.

-Amigo, estás loco. Si me ven será el final para mí.

-Frank, por una maldita vez haz lo que te digo sin rechistar. Bugg es quien está en peligro.

Frank no responde nada más, sólo hace el ademán de un insulto y se marcha hacia la puerta trasera del edificio. Entro por la puerta de la azotea, debería encontrar a Bugg antes que los guardias.

-Jake, ¿dónde rayos estas, amigo? Puedo escuchar las voces de los guardias. Teletransportate de una vez.

-Bugg, sabes bien que mi poder no funciona así. No puedo teletransportarme a través de tantas paredes. ¿En qué piso estás?

-Estoy en el cuarto de control del quinto piso. Y será mejor que aprendas a atravesar todas las paredes porque de no ser así nos atraparán. ¡Apresúrate! -genial, debo bajar cinco pisos para llegar hasta Bugg-.

Comienzo a bajar a toda velocidad y al descender por el octavo piso escucho la voz de Frank en el comunicador. Apenas puedo entender lo que dice -se escucha muy alterado-, la comunicación falla y se corta.

-Jake, ¿Por qué tardas tanto?

-Tranquilo, Bugg, ya estoy llegando.

Bajo el último escalón y puedo ver la puerta de la sala de control, Bugg está adentro. Hubiese sido más fácil escapar si él hubiera subido al tejado -supongo que el pánico lo detuvo-. La sala de control está al final del pasillo, voy a medio camino cuando veo a los guardias subir las escaleras; ellos me miran y comienzan a correr hacia mí. ¡Maldición! Corro el resto del pasillo y veo a Bugg a través de la ventana que está en la puerta. Intento entrar, pero la aseguró antes de comenzar a hackear la computadora.

-Demonios, Bugg, no puedo entrar. ¡Quita el seguro!

Veo a Bugg correr hacia la puerta e intentar quitar el seguro fallidamente ya que sus manos no dejan de temblar. Volteo y la mano de uno de los guardias está por atraparme del hombro, sin pensarlo dos veces me teletransporto a través de la puerta. Estoy del otro lado con Bugg viéndome sorprendido. El guardia entró conmigo y está a punto de darme un puñetazo, pero veo el puño de Bugg pasar rápidamente por mi costado y asestarle un fuerte golpe en el rostro -tan fuerte que noquea al guardia-. Los demás están a punto de derribar la puerta, así que tomo a Bugg por los hombros y giro hacia la ventana.

-Amigo, gran golpe. Ahora no vayas a gritar.

-¿Qué vas a hacer?

-Algo estúpido.