Estranged

Clases

Las clases han transcurrido sin ningun contratiempo. He ido a incribirme al equipo de futbol y elimino unos cuantos nombres para asegurarme de que me quedare en el equipo. No me importa a quien haya dejado fuera, quiero jugar para matar el tiempo y hacer placentera mi estancia aqui. Ademas, soy bueno jugando al futbol; nadie mete gol nunca en mi porteria porque siempre adivino hacia donde enviaran el balon. Solo necesito concentrarme un poco y es todo.

La ultima clase es Literatura y me dirijo al aula 515. Zacarias me ha apartado un lugar y en cuanto entro por la puerta quita la mochila del pupitre y me hace señas para que vaya a sentarme a su lado. No quiero decepcionarlo, asi que tomo el asiento.

Miro a mi alrededor. Benjamin esta sentado exactamente detras de mi y juega con su flequillo. Alessandra esta sentada dos sillas adelanta; dibuja algo sobre su libreta y parece ausente. Me quedo mirandola y de pronto se vuelve hacia la derecha; siente mi mirada sobre ella y se vuelve otro poco, talvez esperando encontrarse con algun amigo del semestre anterior, pero solo se encuentra con el chico guapo de la chaqueta marron. Nuevamente devia la mirada y la miy tacaña no me regala ni siquiera una sonrisa, pero se vuelve nerviosa hacia su libreta. Zac me mira curioso.

-Es bonita, ¿verdad?
-No, no lo creo.
-¿Y por que estabas mirandola?
-Curiosidad, supongo.
-Tome una clase optativa con ella el semestre pasado.
-¿Mecanografia?- pregunto volviendome completamente hacia el.
Hacer una broma terminara por romper el hielo.

-Muy gracioso. Redaccion.
-¿Redaccion?
-Si.
-¿Para que querria alguien estudiar redaccion?
-Todos los que queremos dedicarnos a escribir tomamos redaccion.
-¿Quieres escribir?
-Voy a estudiar Ciencias de la comunicacion, quiero escribir en algun dirio de circulacion nacional o algo asi...
-¡Ah!- respondo sin mucho animo. -Crei que tenias espectativas mas altas.
-¿Como cuales?
-No se, talvez gobernador o diplomatico.
-¿Para que querria yo ser gobernador o diplomatico?
-El poder... El ansia de poder de los humanos.
-No, hermano, el poder me importa un bledo, quiero contar la verdad de lo que pasa en el mundo. Los diarios estan llenos de mentiras.
-Vaya que si- aseguro-. ¿Y ella?, ¿que quieres escribir?
-Libros -Zac levanta los hombros y hace una mueca graciosa.
-Yo tambien tome esa clase- dice Benjamin inclinandose hacia nosotros.
-¿Y tu que quieres escribir?- le pregunto volviendome hacia el disimuladamente porque el profesor Ambrosio acaba de entrar por la puerta.
-Poesia...

Bonitos adeptos me he conseguido; todos tienen ambiciones de porqueria. Disculpen, mi lenguaje coloquial no es el adecuado; soy un demonio. ¿Que mas podian esperar?