Halloween: Psicología Homicida

[Fuera Plagas]

—Nota uno de “La Psiquiatra” —dijo Alison al encender una pequeña grabadora que encontró en la maleta—. El camino a sido de lo mas mierda posible. Me encontré con dos adolescentes realmente molestos. Intentaron propasarse, menos mal que estaban ebrios y eran menores que yo, eso sin contar que la que poseía un arma era yo. Que lastima, no me gustan los lienzos hechos con armas de fuego, sus muertes no sirvieron para nada —corto la grabación y presto atención al camino, las calles habían cambiado un poco en los últimos dos años que no estuvo paseando por ellas. Miro a sus alrededores, aun recordaba algunas casas, las casas de sus víctimas, el solo recordar el como logro manipularlos la hacia ruborizarse.

—Bienvenida a casa, Alison Miller —dijo para si al estacionar frente a una casa blanca, la cual estaba decorada para la noche de brujas—. Al parecer tengo plagas en mi hogar... Bueno, prepararé todo para exterminarlas.

Volvió su mirada al frente, presiono el acelerador y siguió avanzando por las calles. Buscando un lugar en el cual esperar a que anocheciera para ir a sacar a las ratas.
El camino continuó tranquilo, al temer un auto de policía nadie se preocupaba por verle vigilando las casas, todo tranquilo hasta que creyó encontrar el escondite perfecto. La casa de los Myers “La casa maldita” Alison bajo del auto y se dirigió a la casa. “Recuerdo cuando era una niña, la noticia de que un mocoso, Michael Myers asesino a su hermana mayor, luego fue encerrado en un loquero” La puerta estaba atrancada, pero con un firme empujón logro abrir la gastada puerta “Me alegra que en el psiquiátrico me dejaran leer los periódicos, Myers volvió, a acabar con su familia, otra hermana. Fallo. Y años mas tarde su sobrina. Otro fallo” Dentro aprecio la gastada composición de la casa, para comenzar a inspeccionar cada rincón “Siempre me interesó su historia. Un asesino desde niño, y años más tarde si yo hubiera sido su psicóloga” Comenzó a reír para dejarse caer al suelo de rodillas  frente donde se supone era la chimenea—. Hubiera sido un espectáculo descomunal, Una tenue luz daría vida a la sangre en todo mi cuerpo, cadáveres para mis lienzos, y Myers... ¡Oh Myers! —se acaricio la mejilla y — ¡Hubieras sido mi mejor trabajo! —grito para acostarse en el suelo boca arriba sin parar de reír descontroladamente, como una psicópata—. Estoy obsesionada, obsesionada contigo ¡Myers!

La luna había proclamado el cielo, y Alison volvió a montar el auto de policía e ir a su vieja casa. Durante el camino mantenía la cabeza gacha, ya que había muchos autos de policía debido a la fecha próxima.

—¡Buenas noches! —llamo al timbre y le abrió un niño de tal vez unos seis años, era rubio y de piel clara.

—Que se le ofrece, oficial —le hablo el niño

—¿Están tus padres?

—Solo papá, esta en la cochera ¿Quiere que le llame?

Alison se puso a la altura del pequeño—. Claro, yo espero.

—Bien —el niño dio la vuelta para ir a buscar a su padre.

“Odio a los niños”

—¿Sucede algo oficial? —preguntó el hombre, era joven y estaba sobrio, seria difícil, así que tenia que empezar el plan B

—Necesitó hablar con usted —Alison miro al niño—. A solas.

El hombre dudo por un segundo—. Frank, ve a tu habitación, papá atiende a la señorita.

Tras la petición el niño asintió para irse a su habitación.

—Pase —le invito el hombre, a lo cual ella no se negó y entro, Alison fue directo a la sala y sus ojos se abrieron en signo de sorpresa al ver las fotos en la meda de centro. “¿Ericka Quinn?”

—¿Pasa algo? —le pregunto el hombre de sorpresa

—E-es su esposa? —pregunto al tonar la fotografía
—Si, se llamaba Ericka, se suicido hace tres años.
—Víctima numero 23, se suicidó frente a su esposo, causa de su muerte: “La psiquiatra”
—¡¿Usted esta en el caso?!
—Oh cariño —Alison se giro a ver al hombre para dirigirle su mejor mirada seductora y poner su mano en el pecho del hombre—. Ericka era, una linda mujer, pero sabes, ella buscaba otra vida, ser libre, su esquizofrenia le daba este paso, fue una lástima de esa forma, pero de igual manera —Alison se acerco al oído de a que hombre para susurrarle—. Todo pasa por una razón, eres un hombre sano, alto y fuerte... Mereces algo mas, si me explico —al terminar mordió la oreja del hombre y este se estremeció.
—Que esta insinuando, oficial —dijo al sujetarla de la cintura.
—No seas tonto, sabes perfectamente de lo que hablo —Alison comenzó a desabrochar el uniforme dejando ver su pecho, luego empujó un poco al hombre para que este se sentara en el sofá y Alison sobre el—. He estado tres años sin tener sexo —comento Alison al comenzar a mover un poco las caderas y el hombre puso su cara en los pechos y los lamió.
—¿Por que? —pregunto para proseguir con el acto.
—Nada importante —Alison comenzó a buscar un cojín hasta que tomo uno pequeño y con su otra mano tomo el arma—. Solo ser la causa de muerte de tu esposa.
—¡¿Que!? —Exclamo elevando la vista, esto ayudo para que Alison rápidamente pusiera el cojín en la cara del hombre y con el arma, le disparara en la cabeza.

—Necesito acción, pero no sera contigo —se puso de pie y acomodo su ropa—. Para la otra cariño. Ahora, a por el niño.

Alison subió las escaleras, el pasillo estaba oscuro a excepción de una pequeña linea de luz que emanaba del penúltimo cuarto. Alison toco a la puerta.
—Pequeño ¿puedo pasar?
—¿Papá sabe?
—El fue el que me mando a hablar contigo, es un asunto de policías, súper importante —Alison tomo firmemente el arma y abrió la puerta.
—Tu mataste a mamá —el niño le lanzo piedras.
—¡Estúpido mocoso, pensaba ser mas comprensiva contigo! —se abalanzó contra el niño y lo tiro al suelo, este tiraba paradas y manotadas pero por suerte para Alison, él era un niño. Lo llevo a la cama y al igual que con el padre, le disparo atravez de una almohada.

—Odio las pagas—

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Perdón si hay errores me dio flojera revisar
Aparte las películas de slaher's tienen tienen que tener sexo o no son películas de slaher's