Hola... Oye me hago muchas preguntas respecto a ti, sé que solo ha pasado un día o tal vez menos, pero te extraño, quiero saber si estás bien o tienes algunas dudas de lo que discutimos hace poco con respecto a tus estudios, pero quisiera ayudarte en caso sea lo segundo.
Sé que no me quieres hablar, ni respondiste los últimos mensajes que te envié en la tarde, tampoco me dejaste en claro si podíamos ser amigos o bueno... Sé que ya es de madrugada, tengo una gran necesidad de llamarte pero no quisiera interrumpir tu sueño, sé que debería también estar durmiendo porque mañana hay clases a primera hora y si soy impuntual tal vez no me deje entrar, pero no sé, hay algo en mi pecho y sobre todo en mi mente, es algo más que obvio, sé que tengo insomnio, insomnio que es sinónimo de ti, sinónimo de un abrazo tuyo que me hace mucha falta, sonará un poco tonto pero en estas pocas horas he sentido que he caído en soledad y no cualquier soledad, sino de esas que no se superan si no recibo un beso que venga de ti.
Necesito esas palabra de aliento y sumamente sentimentales que leía a estas horas cuando me llegaba un mensaje tuyo, sin ti puedo trastabillar en el camino y tú has de saberlo, dime una cosa ¿hay un misterio entre ambos? nada que ver, ¿misterio para qué? solo tú sabes todo lo que hemos pasado y espero que los recuerdos en ti se mantengan presentes.
Creo que intentaré dormir, no quiero molestarte más cuando despiertes, no sé si estés de acuerdo pero espero poder salir contigo, un día no tan lejano sería mejor y claro sin repercutir en tus responsabilidades, no te obligo a responderme esto, eso depende de ti, solo quiero que sepas que estoy para apoyarte en todo (aunque no me quieras ver), estoy a tu lado (aunque no físicamente), estoy extrañándote y no puedo negarlo, ten presente que te tengo presente.
Atte. Aquella persona que te ama y no en secreto.