Capitulo 6: Él día del viaje

19 2 0
                                    

Al escuchar él despertador mi cuerpo brinco, tenía un sueño profundo no me di cuenta cuando me quede dormida. Me quede en la cama como quince minutos más, me senté y esta ves primero busque mis zapatos fui al baño, llene la ducha y esperé un buen rato, me metí... No se ni cuánto tiempo estuve, salí y me vestí, está ves con un vestido color verde agua pero estilo deportivo, con unos Vans negros y una pulsera del mismo color.

Baje y mi madre no estaba, en su lugar una nota que decía:

"Hija salí, vuelvo tarde tal ves ni llegue a despedirme. En la despensa hay cereal y en la nevera un poco de leche. Te veo pronto y que te valla bien en él viaje.

Te ama tu madre"

Se aguaron mis ojos al pensar que no puede despedirme de mi mamá, pero por una parte mejor no lloraré cuando aborde él avión.

Desayune fui y busque él equipaje. La hora paso muy rápido ya eran las doce del medio día, ya que no tenía nada que hacer encendí la televisión y coloqué un programa de pasteles.

Lo vi un rato cuando llego un mensaje a mi celular, "Amiga ya estoy lista", me asombro y veo la hora, no puede ser eran las 2:30 corrí y tome un taxi.

Pase por mi amiga e íbamos camino al aeropuerto, tardamos como 15 minutos en llegar. Presentamos los pasajes y entregamos las maletas, nos dijeron que «esperen a ser llamadas» esa fueron exactamente las palabras de la chica que nos atendió, reviso mi reloj y eran las 3:15

-¿Quieres ir a comer? - dije, al ver que Isabela asintiendo me dirigí hacia una pizzería -

- Una pizza grande, por favor  - le dije a la mesera, quien al instante fue hacia la cocina de la tienda. Nos trajeron la pizza la cual devoramos o decir debido al hambre que tenía.

"Vuelo 315 con destino a Nueva York, por favor abordar por la puerta número 3"

Al escuchar él aviso, Isabela me tomó del brazo y básicamente me arrastró hasta llegar a la puerta número 3.

- Bienvenida a tu nueva vida - dijo Isabela extendiendo sus brazos que señalan él avión.

Nos dieron las instrucciones y abordamos él avión nos sentamos en los puestos A3 y A4. Isa y yo empezamos hablar se tonterías hasta un punto en que me quede dormida.

Un poco más adelante las aeromozas pasaron por él puesto dando bocadillos y bebidas, siento cuatro golpesitos en mi pierna que lograron despertarme era Isabela.

- No tengo hambre gracias - le dije a Isa para volver a quedarme dormida.

Él Camino Hacia Mi DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora