Inside.

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___:

El frío rozaba mis mejillas enrojecidas por la temperatura que poco a poco descendía más y más.
Me puse los audífonos y puse «Desire» de Years and Years.
No hay mejor manera de comenzar el día con buena música. Caminaba mirando al alrededor, en verdad la ciudad nunca duerme.
Abrazo fuertemente mis brazos, soy el único apoyo que tengo en este mundo. Considerando que mi madre esta inestable y no tengo tantos amigos. No creo que la amistad realmente exista.
Para mi un unicornio es mas real que la amistad sin engaños.

Cruzo las calles impaciente, necesito llegar temprano para poder agarrar mi lugar de la clase que me gusta.
Prefiero quedarme al rincón a sentir las penetrantes miradas en mi cuello. La última vez que me senté por un lugar que queda más o menos en medio salí corriendo de la clase.
Por eso supongo que me llamaban en ese entonces la escapista.
Ja, ja ja.
Pero no pienso dejar que me molesten más. Ellos no saben cuánta rabia he acumulado todos estos difíciles pero reales años.
Es muy feo tener que soportar todos los días miradas. No quiero sonar paranoica pero suelo pensar que las personas no son de fiar. Quién sabe cuando te apuñalen por la espalda, y he vivido con terror toda mi corta vida gracias a muchos eventos traumáticos de mi pasado. No pretendo ser la típica chica suicida que quiere llamar la atención de los demás, por qué no lo soy. Soy un ser humano ordinario.

Gire en una esquina y vi a tan solo 1 alumno parado con estrés caminando de un lado a otro y luego regresar. Es normal, supongo, todos tienen parciales, ¿no?

«O tan solo un día malo, quién sabe»

No pude evitar mirarlo con curiosidad, estaba de espaldas y tomando sus cabellos con fuerzas mientras parecía que llorara, o riera, no se.
Me acerqué lentamente y puse mi mano en su hombro. El rápidamente se giró y pude ver un rostro pintado de calavera. Otro maldito desquiciado en esta escuela.
No lo reconocí al instante, pero luego lo remire y noté sus ojos. Esos ojos profundos en los que notaba odio e ira.
Al igual que yo él estaba desconcertado, e incluso más.

Hola.
Dijo sin quitar su mirada extrañada de mi.
..

Yo sólo trataba de recordar quién era exactamente, pero lamentablemente no lo logre y el guardia de la escuela abrió la puerta.

Yo.. Creo..
Dijo el sin quitar su mirada de mi mientras señalaba la puerta principal y yo solo asentí.
El entro y detrás de él seguía yo. Fuimos por el momento los únicos que entraron. Todo seguía oscuro.

Tate:
Subí a mi auto y no negué poner algo de música, House, claro.
Conducía con algo de estrés, no sabía que me estaba pasando. Mire el espejo y noté mis ojos.

Dios Tate, que estas apunto de hacer.
Dije riendo. Recordando que mi risa era adorable delante de las niñas. Boom, primera debilidad en ellas.
Solté una sonrisa sin dejar de verme
Oh si, soy todo un ángel.
Dije alagándome a mi mismo. Tranquilos no consumo drogas.

Conducía a toda velocidad mientras cantaba una canción que me encantaba. No mencionaré nombres, me dirán marica.
No, no es de Justin Bieber.
Malditos.

Unas damas estaban dentro de una belleza de auto, una de ellas se quitó la blusa y quedo en ropa interior considerando que no traía nada de pantalón debajo. Yo solo mire mordiendo mi labio inferior. Ella me guiñó un ojoy las demás parecían.. Agonizar?

«Cantar»
Si, si. Cantar.
Ellas giraron a la derecha y yo seguí de frente, qué mala suerte.

Perraaaaas..
Dije girando a la izquierda, no había nada, y todo estaba más oscuro que mi alma rotunda de fantasma.
Que ridículo suena, pero pues así nací, que le hago.
Estacione mi auto, mi belleza, mi vida.
Descanse mis bellos ojos un rato, y apague las luces del auto, pero deje la música.
Los volví a abrir y salí del auto sin antes ponerle llave, baje mi mochila y camine hacia la entrada.
¿Cómo haría para hacer que mi plan funcione?¿Y si algo sale mal? Dios, no pensé en detalles.
Caminaba algo estresado frente a la entrada que por el momento se encontraba cerrada, llegue a mi límite y me estrese.
Veía al ciudad pensando en cómo escaparía de toda esta mierda, cuando sentí una mano en mi hombro.
Escuchaba su respiración y al instante me voltee y vi a una chica. La miraba extrañado, ¿qué mierda quería?
Ella miraba cada detalle de mi rostro, me sentí feo por ese momento.

«Vaya, que idiota

Hola.
Dije sin quitar la mirada de su rostro, se veía muy concentrada en mi. Ella no soltó nada de nada, solo seguía viéndome, aunque su mirada no molestaba.

«Qué miedo.»

Yo.. Creo..
Que mal, soné muy estúpido.
Entre con incomodidad. Qué raro.

El aroma del brillo en las tinieblas || Tate Langdon y Tú 🌙Where stories live. Discover now