llamadas.

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Recuerdo que la primera vez que hablamos por teléfono acá era de tarde y había una pésima señal. Literalmente se perdía la llamada cada dos minutos, pero eso no impidió que habláramos durante ocho horas.
Me enamoré de tu voz en el momento que la escuché, juro que no podía creer que fuera real. Demasiado perfecta.
A diferencia de la mía que es la burla.

Debo agregar que mi familia está obsesionada con tus "alo", ay. Y no puedo mentir, también se han reído un poco, al igual que yo.

La llamada más larga que hemos tenido fue de once horas, ¿sabías, sabías, sabías? Ese día falté a la escuela sólo para continuar hablando, así que eres mala influencia para mí.

De cómo un pequeño monstruo me hizo tan feliz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora