The Walking Diaries [SPN x TWD]

2. Todo el mundo odia a Negan.

29 de Enero de 2015.

Me quitan la capucha y siento la cabeza entumecida y la boca seca. Este tío me está mirando como si yo fuera una maldita psicópata que acaba de matar a todo su pueblo. Escupo la sangre que hay en mi boca y le miro ceñuda. Poco más puedo hacer estando atada de pies y manos. Agarra una silla que hay cerca y se sienta mirándome a la cara. Tiene los ojos de alguien a quien le importa muy poco volver a matar. Estoy segura de que ya ha matado. De hecho, no creo que este tipo sea mucho mejor que él.

– Así que conoces a Negan...
– Ese cabrón de Daryl... -Farfullo.
– Ese cabrón de Daryl es prácticamente mi hermano. ¿Qué esperabas que pasase al llegar a nuestra casa? ¿Que vivirías aquí con nosotros una vida feliz? Despierta, no hay vida feliz.
– Llevo despierta 5 años, gilipollas. He sobrevivido sola a cientos de ellos, y a él.
– Así que le conoces.
– Le conozco. Como lo conocéis tú y tus amigos.
– No, no le conoces así... te lo puedo asegurar.
– ¿Cuánto tiempo llevas lidiando con él? ¿Unas semanas? Yo llevo años. Pero dejad de flipar, Negan no es mi mejor amigo ni nada parecido...
– No esperaba que lo fuera. Necesito que me cuentes todo lo que sepas sobre él, sobre su famil

– Negan no tiene familia. -Le corto.
– ¿Y amigos? -Niego con la cabeza. –¿Simpatizantes?
– Solo tiene a gente que le hace la pelota porque no quieren morir. Y gente como yo que ha aprendido a las malas que no se le puede negar nada.

– Te llamas Jude ¿Verdad? Jude Winchester, hemos echado un vistazo a tus pertenencias.
– Todo el mundo me llama J.
– Yo soy Rick, y soy el jefe de mi grupo. Si Daryl me dice que cree que sabes algo, es que sabes algo. No me lo contarás hoy, ni mañana... puede que pasado tampoco, pero cuando lleves una semana encerrada con hambre y frío... abrirás la boca y me contarás todo lo que necesito saber.

Se pone de pie, retira la silla y camina hacia la salida del garaje. No puede ser que yo haya acabado presa aquí. No puede ser que haya gente aún peor que Negan. No puede ser que yo haya dejado mi vida más-o-menos-perfecta para terminar atada en mitad de un garaje.

– Os daré información sobre él. Pero si quieres que hable, tráeme a Daryl. Sólo se lo contaré a él.

Rick sonríe porque ha conseguido la victoria, y baja la puerta del garaje. Solo espero que me saquen pronto de aquí... ya siento los estragos de la deshidratación y el desvanecimiento por la falta de comida. Se me cierran los ojos solos, no sé si por extenuación o sueño.

Me sujeta mis manos pequeñas mientras mantengo la pistola bien agarrada. Papá me dice que tengo que entrecerrar los ojos y aguantar la respiración mientras apunto al objetivo y soltar el aire una vez haya disparado. Pero solo tengo diez años y me cuesta retener tanta información. Fallo el disparo, ni siquiera he rozado la lata. Papá se arrodilla y se ríe.

– Con tu edad yo ni siquiera llegaba al estante de las galletas. No pasa nada Judy, lo lograrás algún día.
– Pero Sam ya sabe hacerlo...
– Bueeeeeeno. -Me coge en brazos. –Creo que aún tienes algunos años para alcanzarle. Además... mientras papá esté en casa nadie te pondrá un dedo encima.

– Pero yo quiero aprender a ser como tú.

– Cuando crezcas serás mejor que yo, ya lo verás.

La puerta del garaje chirría y la claridad me deja completamente ciega. Ojalá pudiera decir que parece arrepentido. Me mira con los brazos cruzados a la altura del pecho.

– Así que querías hablar conmigo. Pues habla.
– Traidor. Te ayudé, te di comida y una cama. Traidor.

– Eh. -Se agacha. –Aquí nadie quiere hacerte daño. Pero estamos desesperados y tú conoces a Negan mejor que nosotros. Necesitamos tu ayuda.
– ¿Para qué? ¿Tú estúpido grupito y tú creéis que podéis vencerle? Despertad ya antes de que Lucille os haga abrir los ojos.
– Lucille. -Sonríe, camina hacia mi y sostiene mi cara con su mano obligándome a mirarle. –Negan aplastó el cráneo de mis amigos, de mi familia, con Lucille... así que conoces a Lucille. ¿En qué clase de situación de mierda has estado tú para saber qué es Lucille?
– Una vez me retrasé con un pago.
– Vives sola, con tus hermanos, ¿por qué iba Negan a pediros nada?
– Negan lo quiere todo. No hace falta formar parte de un gran grupo. Cuando me retrasé aquella vez, me preguntó que si quería conocer a Lucille, y me puso el bate en la cara.
– Y no te hizo nada, así que es compasivo...
– Lo es si no te cree una amenaza. ¿Qué clase de amenaza puedo suponer yo?