Baby don't cry | Yoonmin/Jimsu

•Capítulo 1•

✿*ﾟ

[NOTA: siento las faltas ortográficas :"( lo escribí en 2016 y no he tenido tiempo de editarlo.]

Nota2: lo estoy re-subiendo :'u me acompleja este fic pero weno <3 a leer♡

Suspiro tras suspiro, llanto tras llanto. Yoongi sufría, Yoongi lloraba. La persona hecha de cristal necesitaba a alguien, a alguien que le dijese que todo estaría bien, a alguien que le dijese que no estaría solo, que lo apoyaría en todo y, por si fuera poco, que lo amaría eternamente.

Yoongi temía salir a la calle, se sentía desprotegido y amenazado cada vez que pisaba un suelo que no fuera el de su hogar, su frío hogar. Llevaba ocho meses sin salir de casa, la severa depresión había consumido al alegre Yoongi, la depresión había hundido sus sueños y enterrado sus alegrías. Ni psicólogos ni médicos, ni amigos ni familiares sabían su situación. Se había aislado del mundo, había desconectado de la vida y había renunciado a la felicidad por completo.

Yoongi seguía acurrucado en el sofá con su manta favorita, con las luces apagadas y los ojos abiertos mirando hacia la oscuridad. Era de noche, las negras persianas no dejaban entrar la luz de las farolas ni el aire puro de la madrugada.

De repente, suena el timbre de casa. Se levantó y encendió las luces. Su rutina era la misma, pedía comida a domicilio para no enfrentarse al mundo ni a la vida.

Abrió la puerta y se encontró con el pizzero, con su gorra y con la caja de la pizza caliente.

ㅡHola, le traigo su pizza ㅡdijo el pizzero con la caja en la mano.

No obtuvo respuesta.

ㅡ¿Hola, vas a hablar? ㅡdijo intentando ver su rostro.

Después de unos eternos segundos, Yoongi suspiró. Por alguna razón no quería hablar.

ㅡ¿Cuánto es? ㅡpreguntó al fin agachando la cabeza, tapando su mirada con una gorra.

ㅡCuatro mil Wons ㅡcontestó el pizzero intentando ver los ojos contrarios.

ㅡE-Espera, ahora te traigo lo que falta ㅡle dijo haciéndole una reverencia y yendo a por el dinero que le faltaba.

La voz de Yoongi se quebraba cada vez que hablaba, era normal, después de pasar solo tanto tiempo sin trato humano, era normal que se le fuese la voz. 

El pizzero esperó en la puerta diez minutos, sin saber por qué el chico tardaba tanto.

ㅡ¿Hola? ㅡdijo en voz alta para que lo pudiera oír.

Un incómodo silencio yació, nadie contestaba al pizzero.

ㅡ¿Estás bien? ㅡpreguntó adentrándose en la casa.

Seguía adentrándose en busca de una respuesta, hasta que encontró al chico buscando desesperadamente en un cajón.

ㅡL-Lo siento, como no contestabas... pensaba que te había pasado algo...

Yoongi se giró hacía él, dejándole ver la pálida piel desnutrida de su rostro y sus profundas ojeras.

ㅡ¿E-Estás bien? ㅡpreguntó el contrario acercándose más a él.

ㅡN-No tengo dinero ㅡanunció Yoongi con una voz sin vida.

ㅡ¿Qué hago con la pizza? ㅡpreguntó el pelinegro preocupado.

De llevó una mano en el estómago y mordió su labio inferior con rabia.

ㅡLo siento, no me llega. Llévatela ㅡdijo por fin volviendo a ocultar su triste mirada bajo la solapa de su gorra.