•Capítulo 2•

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Después de estar veinte minutos torturándose por dentro, decidió acabar con todo aquello.

Se levantó y fue hasta el espejo del baño, se miró y nuevas lágrimas brotaron por su pálida piel, las saladas lágrimas de Yoongi irritaban su piel, colorándola a un tono rojizo.

ㅡNo pasa nada, no soy nadie, nadie me va a echar de menos ㅡdijo intentando sonreír, una sonrisa falsa, se veía lamentable en aquel espejo, tanto, que le pegó un puñetazo, abriendo nuevas heridas en sus nudillos.

ㅡ¡Mierda, mierda, mierda! ㅡrepetía una y otra vez. Destrozó todo el baño, continuos puñetazos recibían las paredes del baño, llenando las baldosas de sangre.

ㅡ¡Quiero acabar con esto! ㅡgritó casi desgarrándose la garganta, su afónica voz le daba asco, el nudo que se le instaló en la garganta era insoportablemente molesto. No había nada que apreciara Yoongi, nada. Quería acabar con todo aquello pero, en el fondo, él era un cobarde.

Salió del baño y se sentó en la mesa, el suelo aún estaba húmedo por el agua que le lanzó a Jimin.

ㅡSe lo tiene merecido ㅡdijo posando sus heridas manos sobre sus ojos, empezando a llorar de nuevo, sintiendo arder nuevamente su piel a causa de las lágrimas.

ㅡMaldito Jimin, ni se te ocurra volver por aquí ㅡsusurró mientras posaba nuevamente sus nudillos en su rostro.

De repente, suena el timbre.

Los ojos de Yoongi recorrieron la puerta, no era normal que a esas horas de la madrugada viniera alguien, no existía tal alguien que pudiera venir a verlo.

Se acercó sigilosamente hasta posar su empapado ojo de lágrimas en la mirilla. Estaba todo oscuro, alguien había tapado el agujero.

ㅡ¿Será Jimin? ㅡpensó. Algo dentro suyo se alegró, quizá quería buscar ayuda en otra persona, quizá no se sentiría solo de nuevo. 

"¿De verdad se preocupó?"

Después de secarse las lágrimas, abrió poco a poco la puerta.

"Tiene que volver, necesito que lo haga."

Un hombre de negro con unas gafas oscuras se encontraba ahí, un hombre corpulento y mal afeitado.

El golpe que recibió Yoongi ni lo vio venir, el pobre cuerpo del chico cayó al suelo y su nariz empezó a sangrar. Inmovilizado en el suelo, llevó su mano a su nariz, apreciando su vivaz sangre en la palma de su mano.

El hombre de negro adelantó dos pasos mientras que Yoongi se arrastraba desesperadamente por el suelo, intentando huir de aquel desconocido, intentando alejarse de él con todas sus fuerzas.

Arañaba el suelo de parqué con las uñas, intentando mover su cuerpo hacia adelante, intentando salvarse de un futuro golpe.

El hombre pisó su débil tobillo, haciendo gritar a Yoongi del dolor. Una patada en las costillas recibió su cuerpo, patadas y más patadas dañaban su cuerpo, puñetazos y más puñetazos coloraban su rostro y piel, sintiendo como su cuerpo perdía fuerza, sintiendo cómo su boca se llenaba de sangre, apreciando cómo sus pulmones reclamaban más aire, notando un confuso mareo que no lo dejaba ver con claridad.

Aquel hombre le agarró del pelo con una sola mano, y finalizó la agresión con un último puñetazo, dejando a Yoongi inconsciente y tendido en el suelo.

Seguidamente el hombre fue a llenar un cubo de agua, para luego echar y empapar completamente a Yoongi.

El hombre no tardó en desalojar el hogar, ni se molestó en cerrar la puerta ¿Para qué? Si su intención era matarlo de hipotermia.

Baby don't cry | Yoonmin/JimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora