"- Enseñame a vivir el presente -pide en un susuro. "
Lo único que pide Cassandra después de caer rendida ante Hansel y Hansel le dará una experiencia que ni él ni ella se esperaban.
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Cassandra Hugh de pequeña se pasaba horas enfrente del televisor viendo películas de Disney y desde que vio su primer película —antes había visto Bella y la bestia, la bella durmiente, blanca nieves y todas— fue Cenicienta o al menos así la eligió ella. Pero como cualquier niña de seis años, ella soñaba con ser todas las princesas al mismo tiempo.
Al crecer creyó que ella encontraría el amor al igual que en las películas pero así no sucedió. Su esperanza comienza mientras la idea del presente sé hace su prioridad.
Mientras tanto, Hansel Willheim lo tiene resuelto. Él vive la vida loca, justo como a él le gusta y siempre ha querido. No quiere una relación, no le gustan las chicas empalagosas y pegajosas como él chicle en su zapato, él solo quiere amigas que se quieran divertir como él, por un momento.
¿Qué pasa cuando a Hansel le llame su atención una frágil y bella rubia?, ¿qué sucede cuando él es quién se comporta como el empalagoso?
