Te tomaré una foto. [Grant Gustin]

Capítulo #9.

Riley y yo terminamos de limpiar su patio, la piscina ya estaba descontaminada de todas las porquerías que habían hecho dentro de ella. Ugh.

—¿No quieres pasar?, podemos ir a tomar un poco de jugo y, ver una peli, no sé...

—Oh, claro, pero primero... Voy a ir a cambiarme.

—Vale, aquí te espero.

A pesar de que no llevo mucho tiempo de conocer a Riley, puedo decir que es una buena persona. Y me inspira un poco de confianza.

Me dirigí hacia mi casa. Y como dije, iba a cambiarme, pero primero me iba a dar un buen baño. Le mandé un mensaje a Riley diciéndole que me tardaría un poco.

Me metí a la regadera rapidísimo, 15 minutos y ya había salido. Me puse ropa limpia y cómoda, un pantalón chandal negro, unos Adidas básicos (negros y líneas blancas), y una blusa de tirantes blanca, y nuevamente una coleta desprolija, solo dejé caer un poco de fleco y ya estaba lista.

Me coloqué un poco de perfume, como es de costumbre, tomé las llaves de la casa y mi cel, y me dirigí hacia la casa de Riley.

Toqué el timbre y nadie atendía.

Toqué otra vez y esperé unos segundos, cuando finalmente salió un chico de ojos verdes, que al parecer acababa de despertar, porque traía el cabello muy desarreglado.

Era alto y para ser honesta, bastante guapo...

Al parecer me equivoqué de casa.

—Ah...

—¿Buscas a Riley? -me dijo con los ojos entrecerrados, la voz ronca y me sonrió levemente.

—Eh... Sí. -dije lo más normal que pude.

—Pasa, bo debe tardar, subió a su habitación... Toma asiento.

—Vale...

El chico traía unas bermudas e iba sin camisa, Dios... Debería ser un delito que ande por ahí en esas condiciones.

El chico de ojos verdes me miró durante mi recorrido hacia la sala. Me senté en el sofá frente a la televisión. Y este se retiró.

Esperé cerca de 2 minutos y Riley ya estaba abajo. Corrió hasta donde yo estaba y me miró confusa.

—¿Todo en orden, Carter?

—Ah... Eh... Sí.

Una vez más, el chico de ojos verdes apareció. Riley hizo una mueca de disgusto y se levanto para ir hacia él.

—¿Qué haces aquí?, te dije que no molestaras.

—¿Qué?, ¿no me vas a presentar?, yo le abrí la puerta.

Riley volteó los ojos y se rindió.

—Carter, él es mi hermano... -dijo haciendo una pausa. —Grant.

Él me miró, me sonrió levemente y levantó su mano en señal de un "Hola".

—Grant, ella es Carter... La vecina nueva.

—Oh... Cierto, cierto... La nueva... Pues un placer, Carter. -me guiñó un ojo y seguido de eso, se retiró.

—Imbécil. -dijo Riley rodando los ojos divertida.