A Natural Woman (Harry y Hermione)

EPILOGO

Disclaimer: los personajes aqui mencionados no me pertencen, de lo contrario Harry y Hermione se quedarian juntos

Epilogo Una mujer natural

Oh, nene,
que me has hecho
Me haces sentir tan bien por dentro
Y solo quiero estar cerca de ti
Me haces sentir tan viva

Porque tu me haces sentir,
me haces sentir,
Me haces sentir como
Una mujer natural

Natural Woman—Adele

Se encontraba en las nubes, caminaba con tranquilidad sobre la larga alfombra, en sus manos tenía un hermoso ramo de flores. Lirios, sus flores favoritas, desprendía un suave olor inundando el lugar bellamente decorado.

Apretaba el brazo de su padre, sosteniéndose de él, temía caerse, quedar en vergüenza, los nervios hacían que sus piernas se convirtieran en gelatina, la tela blanca que cubría su rostro, le daba confianza.

Así nadie vería sus nervios, respiro profundo aspirando el aroma de las flores que adornaban la estancia, veía al frente.

Delante de ella un nuevo futuro se comenzaba a forjar, sus ojos se empañaron a causa de las lágrimas, pero decidió alzar ligeramente la vista para evitar que su maquillaje se corriera.

Al hacerlo, todo destello de tristeza desapareció como por arte de magia

Allí parado, bellamente vestido y elegante se encontraba "el" esperándola a su encuentro

Su marido

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Tenía la sensación del sudor recorriendo su espalda, estaba nervioso, desesperado ansioso, quería restregar su mano izquierda en su cabello frenético por la espera.

Mas la bella música anuncio la entrada de "ella"

Hermosa como siempre, vestida como un delicado ángel.

Ella nació para ser de él

Ella su esposa, su mujer.

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Todo transcurrió con verdadera alegría, los nervios desaparecieron, al igual que el velo de novia que ocultaba su rostro

Al alzarlo el público jadeo impresionado ante lo bella que ella se veía.

Era la mujer más hermosa que habían visto, tan radiante, tan feliz, tan bella.

Tenía una luz única, pero a Hermione Potter no le importo.

Ella era hermosa por dentro, ya no buscaba ni anhelaba la simpatía, la admiración, el asombro, ante lo linda que era.

No, Hermione Granger al fin había destruido sus demonios personales.

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El la veía maravillado, era aun más hermosa de lo que recordaba, su esposa era la mujer perfecta ante sus ojos y era lo único que valía.

La única opinión que a ella le importaba y el no se cansaba de repetírselo cada mañana.

-Lo siento...lo siento tanto. Te amo Harry... de verdad te quiero... pero yo soy fea...aléjate de mi...por favor...aléjate de mi

El la estrecho con fuerza, pero ella se soltó de sus fuertes brazos

Salió de aquel lugar en que se conocieron.

Ese fue la última noche que la vio.

La chica que conoció en aquel gimnasio nunca más la volvió a ver.

Su mujer recupero su autoestima, su confianza, pero lo más importante: su amor propio.

Aprendió a amarse tal cual era, con sus defectos y sus virtudes. Con su cuerpo rellenito y su gusto por la comida.

Su mujer era única, su chica era la razón más importante por la cual él se torcía el cuello con tal de verla feliz.

Sonrió lleno de felicidad, ahora ellos eran uno solo, ante la ley de los hombres y ahora ante la ley de Dios.

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Esa sonrisa marca Colgate la derretiría, sus piernas flaquearon de nuevo, sin escuchar las palabras del sacerdote, solo viéndolo a él, a sus ojos llenos de amor, a su sonrisa y sus labios pronunciando "Te amo"

Ella, como cada vez que le decía esa mágica palabra se derretía cual mantequilla, las lagrimas asomaban en sus bellos ojos, demostrando así a su marido cual feliz, maravillosa y contenta estaba de tenerlo a su lado.

Mas ella no se quedaba atrás, ella en silencio le dijo "Te amo"

Desde que Harry le conto su temor, ella se desvivía para que el no fuera otra vez ese hombre destrozado que dejo ocho años atrás en las fueras del ían dos años casados, dos años de un matrimonio que la hacía sumamente feliz y ahora la reforzaban ante todo el público, ante esa sociedad que una vez la margino por ser defectuosa

Mas ahora ella se valía por sí misma, no necesitaba nada más que su propia opinión, su propia percepción.

Su confianza, su autoestima, su vida...esta completa.

Se centro en el sonido de los aplausos, se centro en el momento que el inclinaba su cabeza para besarla apasionadamente, pero ello desapareció.

La iglesia, las personas, el aroma a flores, la música.

Pues aquel beso anunciaba un nuevo futuro.

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Como cada vez que la besaba, la sensación le hacía recordar su primer beso. Ese beso que él le robo, ese beso que inicio la recuperación de ella.

Fueron meses de sufrimiento, meses de dolor, ella tenía pesadillas noche tras noche. Escuchando esas crueles voces que la atormentaban. Mas él estaba a su lado, apoyándola, queriéndola, dándole ánimos, superando los obstáculos que se imponían.

Recurrió a su madre en busca de ayuda, Minerva había hecho un gran trabajo con ella, ya que Hermione aprendió que sus demonios era ella misma.

Ella que se auto despreciaba.

Ella que rememoraba una y otra vez recuerdos del pasado.

Ella que desde su infancia y adolescencia venia arrastrándolos.

Ella que se encerraba en su dolor.

Ella era su propio Demonio de Odio.

Harry sacudió ligeramente la cabeza, terminando así el beso. Junto su frente con el de Hermione

-Eres Hermosa—susurro maravillado

Ella sonrió, beso ligeramente sus labios, entrelazaron sus manos que portaban las alianzas del matrimonio y juntos salieron de aquella iglesia

Juntos comenzaron una vida plena...

GRACIAS POR LEER

Hasta la próxima :D

Posdata: les invito a leer mis otros fics que pronto publicare