Minseok IV

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Literalmente el infierno se había desatado, a pesar del temor que invadió su ser casi por completo, volvió la vista para ver si alguno de sus hermanos estaba a la vista, a lo cual simplemente encontró como todo el caos caía sobre él. No había pista de donde pudieran estar sus hermanos, solamente estaba él y las balas que casi aseguraba, le pasaban rozando por una de sus mejillas. El shock no lo dejaba moverse, sentía la adrenalina correr por su sangre, pero no podía hacer nada, el corazón latía fuertemente dentro de su pecho, Minseok simplemente no sabía para donde moverse o ir.

En ese momento, sintió un tirón en uno de sus brazos, algo lo jaló repentinamente hacía abajo, sus ojos aún más agrandados, los volvió hacía aquella figura que movía sus labios apresuradamente, quizá diciéndole algo, pero no sabía que el pobre de Minseok se encontraba casi imposibilitado a escuchar debido a todo lo que pasaba a su alrededor. Notó la molestia y desesperación del chico que le había salvado al notar que Minseok no reaccionaba, y sin dudarlo, se lo llevó de la mano con rapidez hacía algún lugar donde pudieran estar a salvo.

Sus pasos eran mecánicos, casi como si lo siguiera por pura inercia, ¿Que era lo que pasaría ahora con él? ¿De verdad no volvería a ver a sus hermanos?. Sin embargo, todo se fue aclarando lentamente en su cabeza cuando no notó una pequeña inclinación en el suelo y casi se va de bruces al suelo, a lo que se aferró a la mano de el chico que le hacía correr hacía alguna parte ¿Por qué confiaba en ese extraño? No lo comprendía, pero sabía que si lo seguía estaría seguro, y quizá podría preguntarle después por sus hermanos, seguramente Lulu estaría muerto de miedo al igual que Tao.

―¡Vamos chico, necesito que corras más rápido! ―Le dijo el joven que lo hacía correr, virar, saltar e incluso en una ocasión arrastrarse, al parecer el recinto donde los tenía, se estaba viniendo abajo.. Una urgente necesidad de averiguar donde estaban sus hermanos le invadió, como si quisiera correr de lado contrario, pero a la vez continuar corriendo con ese chico, todo lo abrumó de repente.

No le dieron tiempo para poder si quiera detenerse, lo empujó hacía alguna van completamente negra donde podía ver a más de los niños que habían estado junto a él, la puerta se cerró de golpe y arrancó a alta velocidad. Sus ojos a pesar de la oscuridad, comenzaron a buscar entre los rostros asustados y llorosos, los de sus hermanos, pero no veía nada familiar, ni si quiera a su mellizo. Haciéndose bolita en una de las esquinas, se dispuso a esperar, necesitaba mantenerse concentrado para poder hacer las preguntas pertinentes cuando llegaran al lugar donde les llevaban.

Casi podía jurar que el conductor pensaba que llevaba ganado o algún tiempo de fierro vejo, pues el viaje había sido todo, menos tranquilo. Le dolían las costillas, ahí donde en uno de los baches había golpeado contra el seguro de la puerta, pero era lo de menos. La camioneta por fin se detuvo, habían pasado cuando menos 30 minutos de camino, y afuera no se escuchaba nada más que las puertas de las camionetas abriendo y cerrando, segundos pasaron, donde su corazón latía aún más rápido, antes de que las puertas traseras se abrieran, dejando entrar una brillante luz, sin embargo, la sonrisa brillante de un chico les recibió, un hoyuelo coqueto se marcaba en una de sus mejillas y les veía con una mezcla de entre alivio y preocupación.

―Ya estábamos preocupándonos por ustedes, pensamos que no habían logrado sacarlos. ― Dijo el mismo joven frente a él mirándolos a todos ellos. ―Mi nombre es Zhang YiXing, soy agente secreto y el especialista en información. Pero vamos, debemos darles otra ropa y alimentarlos, a parte, casi puedo apostar a que tienen sueño algunos, las preguntas pueden esperar para después.. ― Dejó que otros chicos abrieran la puerta restante para poder ayudarles a salir poco a poco.

Les habían dejado justo frente a un enorme edificio negro, sí, era completamente negro, incluso las ventanas parecían polarizadas, lo cual no dudaba ni por un momento. Seguía el camino junto a los demás niños y jóvenes, todos tenían una expresión entre asustada y curiosa. Había dos guardias de cada lado vigilando que ninguno se quedara atrás. Se sentía asustado, curioso, abrumado, feliz.. Todo se arremolinaba en su estómago para pasar a su pecho, causándose nauseas, teniendo que respirar profundamente para poder tranquilizarse, no le servía de nada el estarse asustándose de esa manera, era el mayor de todos sus hermanos, necesitaba ser fuerte para ellos y por ellos.

【 ❤ 】

Después de lo que parecieron bastantes minutos, los introdujeron a un vestíbulo gigante donde múltiples puertas se alzaban a los lados, uno de los que lideraba el camino se detuvo para poder voltearse a poder hablarles.

―Bueno, aquí hay algunas habitaciones, debe hacer ropa suficiente para cada uno, si no es así, va a haber varios guardias aquí para que puedan llevarles a la oficina de YiXin o JungMyeong a poder resolverles ese problema. Las habitaciones serán de 8 integrantes cada una, se darán cuenta que en algunas ya hay miembros, ustedes fueron el último equipo en regresar. Como dije, cualquier cosa, los guardias estarán aquí. ― Finalizó con una tranquilizadora sonrisa antes de poder extender sus brazos. ―Ahora, van a pasar al fondo, donde escribirán su nombre, apellido, especie y edad por favor. ― Se hizo a un lado dejando ver un pequeño escritorio, donde varias chicas tenían algunas plumas y hojas en espera de apuntar con mayor rapidez a cada uno de ellos.

La fila había sido rápida, eran datos sencillos, menos para los más chicos, los cuales iban a unas habitaciones especiales, donde tendrían mayores cuidados, los que estaban heridos eran transportados directamente hacía la enfermería y los demás al poner sus datos, los asignaban a alguna habitación.

Al llegar su turno, la joven sentada le dedicó una sonrisa aliviada y preguntó por sus datos.
― Do Minseok, leopardo, 17 años. ― Murmuró suavemente, la chica lo miró con sorpresa antes de poder anotar en su hoja, su sonrisa se hizo más cálida y brillante al momento de darle el número de una habitación. ―04 ― 'Repitió en busca de la puerta que tuviera aquellos números. Los demás chicos entraban a distintas puertas para ya no salir, teniendo una enorme curiosidad al ver que ya no salían.

Siguió recorriendo el pasillo, hasta por fin, dar con los números pintados en blanco sobre la puerta de madera, relamió sus labios de pronto resecos, y abrió la puerta con lentitud. ―¿Hola? ― Sin embargo, antes de obtener alguna respuesta, unos pequeños brazos se aferraron a su cintura con un chillón "¡Minseok!", su corazón se tranquilizó al momento de envolver el frágil cuerpo de LuHan entre sus brazos. ―Lulu.. Estaba tan preocupado.. ―

Tal vez tuviera mucho por delante, pero eso no era lo que le preocupaba en esos momentos, aún debía buscar a sus tres hermanos restantes.



《 ▬ 》


¡Hola!.. Sí, he tardado demasiado en actualizar, pero.. En fin, lo siento, las explicaciones siento que sobran aquí cuando de plano no he podido y las he dejado con ganas de más.

Este capitulo, ás que nada, fue para ver más o menos como va la historia, no crean que las parejas se crearán y se aceptaran así como así, en las aclaraciones había "Shota" y bueno, LuHan tiene 14 años, mientras que SeHun A caba de cumplir sus 20 primaveras(?), el nalgón tendrá sus peleas por no querer recalamarlo, es muy pequeño el Lulu :c. Igual, habrá de todo aquí, espero que se queden a leer, y les prometo no tardar de nuevo así en actualizar. 

Gracias por sus lecturas y estrellas, al igual que sus comentarios, son los que me animan a seguir subiéndola ❤

Las espero en el próximo cápitulo, depende de como me sienta y cuanto les guste este. El siguiente es JongDae~.


Pd: Tengo mis horribles horrores de ortografía, pero es por que no he pasado la hisotria por edición y no tengo Beta. LOL. Si alguien está interesada, por favor pongamelo en los comentarios, se los agradecería enormemente❤

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⏰ Última actualización: Nov 28, 2016 ⏰

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