Lucky One »J.JK«

0.05 «Odio Quemados»

La profesora tocó el silbato -ese sonido del demonio estaba haciendo tortura en mis oídos- llamando la atención de toda la clase, caminamos al centro de la cancha donde se encontraba.

-Bueno alumnos,-comenzo a hablar, no
por favor...-para comenzar bien la clase, vamos a partir con un juego. ¿Adivinen cuál?-Dijo mientras jugaba con el balón rojo en sus manos.

-¡Quemados!-Grito la mayoría, ¿Acaso estaban acostumbrados a esto? No sobreviviré aquí dios.

Mire para todos lados con atención para buscar una manera de salir corriendo sin ser pillada, pero por lo que se podía ver era muy difícil. Mientras miraba pude ver entre la clase al chico conejo que miraba con atención a los profesores, ¿qué diablos? De hace cuanto que estaba aquí.

-Sera en equipos, yo los haré.-Habló el otro profesor por primera vez en todos los minutos que llevábamos aquí.

Le llevó solo un par de minutos en armar dos equipos, ¿porqué no me cae un rayo ahora? Mi equipó no se veía muy bueno el el deporté, no es que yo sea la mas movida pero era lo que se aparentaba, el otro equipó nos va a destrozar el culo...lo aseguro.

-¡Ya chicos! Lanzaré el balón, ¡suerte!-El profesor levanto los pulgares dándonos ánimos, lanzó el balón al aire y...lo atraparon los del otro equipó, bye world.

-¡AH!-Se escuchaban los gritos de nuestro equipo corriendo de lado a lado con pánico.

Okey, esta sera mi táctica:
Caminar con cuidado sin dejar de mirar el balón, si me colocó a correr como idiota me tiraran el balón y besaré el jodido suelo.

El balón paso volando a mi lado con suerte de pillar a otro alumno, gruñó, tomó el balón y salió corriendo hacia el otro lado rogando por tener suerte.

Y así fue como se comenzaron a lanzar el balón de lado a lado pillando gente de ambos equipos, mi táctica hasta el momento funciona a la perfección. Ya quedamos solo seis en este y ocho en el otro, aunque no me interesa pillar solo quiero salir de aquí con vida.

Por reflejos pude ver como el balón iba derecho a mi, lo tomé con fuerza y corrí mas adelanté, era como la quinta vez que un chico trataba de matarme con la bola a toda fuerza. ¡Ahora si que lo fusiló!

La tire con todas mis fuerzas que pareció sorprender a los demás, algo se hacer ¿okey? El chico se escondió detrás del chico conejo, este la agarró y se comenzó a acercar con rapidez mientras tomaba vuelo con su brazo para lanzar la bola.
Corrí hacia atrás y me escondí detrás de una chica, la chica se agachó y lo único que pude ver antes de terminar sentada de golpe en el suelo fue como la pelota se dirigía rápido había mi rostro y después impactaba horriblemente con éste.