Bad boy [NamGi]

Vagabundo.

*POV Hoseok.

Días después de que el estúpido de Namjoon se llevó a Yoongi, y de que uno de mis cómplices principales, Jin la puta, me vendió a la policía entregando las grabaciones de todos los días en los que tuve con mi chico pálido en casa haciéndole todas las cosas que yo quería, me fui de mi casa. ¿Cómo es que terminé yéndome de ahí? Recibí una notificación que llegó por parte de la policía, y no tuve más opción que huir.

Salí con una mochila que tenía algo de ropa, y lo más necesario para sobrevivir: Dinero. El celular lo tuve que dejar porque me podían rastrear, y la verdad tampoco me serviría de mucho. El primer día tuve que andar por la calle, me dediqué a caminar por callejones, (¡Ja!, qué ironía caminar por callejones ¿no?) evitando los sitios concurridos lo más posible. No quería encontrarme con un policía.

Un vago de la calle se apiadó asquerosamente de mí, y me dijo que si quería, podía dormir con él en el piso. Al principio tuve todas las intenciones de negarme pero después de pensarlo un poco, decidí aceptar y quedarme con el vago del cual no sabía el nombre, pero a pesar de todo, no era tan feo como los vagos que ya había visto durante las horas y horas de caminar.

Pelo castaño, algo sucio a decir verdad, ropa normal, supongo que alguien se la había dado pero parecía estar muriéndose del frío, cosa que en realidad no me importo.

-¿No eres de por acá no?- Preguntó en un susurro, pero pude notar lo grave y suave que era su voz.

-Qué te importa.- Quería evitar cualquier tipo de interrogatorio.

-¿Tienes frío? Tenés la nariz roja.- Me sonrió y con su dedo índice tocó mi nariz como si de un juego se tratase.

-Mantené distancia personal, vago de la calle.- No quise mirar la reacción que tuvo, pero me encontré haciéndolo igual. Hizo un pequeño puchero con sus labios, como si de un niño se tratase, y eso me hizo pensar, que probablemente yo era mucho mayor que él.

-No estás en mejores condiciones que yo.- Se burló sacando la lengua.

-¿Disculpa?- Estaba por levantarme, me estaba cansando de tener que aguantarlo y sólo habían pasado minutos, pero sentí el agarre de su mano fría sobre mi muñeca y detuve mi partida.

-Lo siento... No quise...- Agachó la cabeza y murmuró -No me deje, por favor.- Solté un notorio suspiro, tal vez un poco exagerado, pero volví a sentarme junto a él, me había dado algo de lastima.

-Gracias...

-Lo hago porque no tengo otro lugar a donde ir, mocoso.- Me percaté que todavía seguía el agarre de su mano, pero esta vez, ya no era sobre mi muñeca, si no que sostenía mi mano. Y no la aleje por el único motivo de que me ayudaba a que no me congelara en gran parte.

-¿Cómo se llama?

-Qué te importa.

-Pero...- Chisté e hizo silencio automáticamente, el cual duró solamente unos minutos.

-Yo soy Kim Taehyung... Bueno, en verdad no soy Kim porque no tengo familia alguna. Mi papá era alcohólico y según me dijeron, se suicido después de matar a mi mamá. Supuestamente fue un accidente ya que lo hizo estando borracho.- Me sonrió, supongo que era una de esas sonrisas de las que te dan para que no le tuviera más lastima, de la ya en verdad le tenía.

-El "Kim" es del orfanato al que pertenecí cuando era más chico. Es lindo ¿no?

-¿Qué cosa?

-Mi nombre, ¿qué más?- Rió a carcajadas, pero cuando vio que lo estaba mirando sin reírme, paró en seco.

No dijo nada más, permaneció callado el resto del tiempo, así que supuse que después de media hora, se había quedado completamente dormido.