Se miró al espejo, se subió a la báscula. Justo después se fue a su habitación, cogió su libreta y anotó el peso de hoy.
Abby llevaba dos meses haciendo dieta, era la primera vez que aguantaba tanto tiempo sin saltarse una sola de las pautas que se había hecho. Estaba orgullosa de su progreso y estaba motivada en seguir con su proceso.
En tan solo dos meses había conseguido bajar 4 kilos, ¡la dieta funcionaba!
Su situación en el instituto había mejorado, las chicas ya no se metían con ella, simplemente la ignoraban y Abby creía todo era gracias a los 4 kilos que había perdido, aunque era consciente de que aún le quedaba un largo camino para llegar a estar delgada y ser como las demás.
Ya tenía un par de amigas, Susana y Patricia. Poco a poco se fue integrando en el grupo de clase, aunque nunca consiguió acercarse a las chicas que le hicieron la vida imposible durante tantos años.
La seguridad de Abby en si misma mejoró y se relacionaba más con el resto. Y todo gracias al peso perdido, cuando llegara a ser delgada todo sería perfecto, tendría muchos amigos, los chicos se fijarían en ella, estaría feliz, todo sería perfecto.
Abby siguió adelgazando y las chicas cada vez se acercaban más a ella, ya no se sentía una marginada y aunque no fuera la popular de la clase ya no era el centro de todas las burlas y humillaciones.
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Sentimientos muertos
Novela Juvenil¿Quién no ha pensado alguna vez en mandarlo todo a la mierda? ¿Quién no ha dicho nunca 'me rindo, hasta aquí hemos llegado'? Esta es la historia de una chica que lleva toda su corta vida sufriendo, una chica que lo ha dado siempre todo a los demás y...
