Safiro

Parte I El inicio

Entre unas montañas escondidas y una laguna transparente se encontraba un pequeño pueblo llamado Uplan lleno de flores, animales silvestres, magia y misterio. En el cual existía un reino procedente de un culto de personas integradas a la hechicería. Dicho reino se llamaba Uplan. Aca empieza toda la historia.

Eran las 7:45 pm y Uplan se mantenía activo y muy pendiente de lo que sucedía en el castillo, pues la reina Ana estaba apunto de dar a luz a su pequeña Safiro, la reina Ana era procedente de una generación de hechiceros que utilizaban su magia para el bien del reino al igual que su esposo el rey Troye, pues ambos se habían conocido en una travesía que se emprendió por la búsqueda de la paz en la guerra de los reinos perdidos para obtener Uplan, la victoria fue latente y no solo se protegió al reino y su paz perduró sino que también dos almas fueron encarnadas en un solo cuerpo.

Mientras mas tiempo pasaba mas nervioso estaba el rey troye el cual estaba harto de escuchar los gritos de su mujer, algunos sirvientes y curanderos tuvieron que acudir al momento del parto para así mantener al rey calmado, la partera estaba algo cansada pues habían sido 7 horas de parto y aún no habían cambios, las cosas se complicaron y ya todo estaba tomando otro rumbo.

Partera: sin duda alguna esta bebe no nacerá por si sola, necesito hablar con el rey troye, necesito que ustedes se hagan cargo mientras yo voy por algunas cosas que necesito (enuncia la partera a las sirvientas)

Partera: rey troye es imposible que la reina Ana pueda tener a su niña de forma natural y si eso sucede es muy probable que ambas mueran.

Rey troye: tiene que haber alguna forma de tener a mi pequeña viva al igual que su madre.

Partera: la hay pero tiene muchas consecuencias y es un poco riesgoso.

Rey troye: cual es? Dímelo te lo ordeno!! No me importa las quiero a ambas conmigo.

Partera: hechicería como sabe soy partera pero mis padres eran hechiceros y mi magia es muy efectiva solo que ambiguamente la aplico a necesidades médicas y este caso necesita de mis manos lo único que me preocupa es que puede dejar algunos efectos colaterales y el mas probable es que parte de mi magia sea transferida a la niña.

Rey troye: no te preocupes sabremos lidiar con eso, además su madre y yo también somos hechiceros y es inevitable que la niña nazca con algunos poderes.

Partera: rey troye con todo respeto pero ya he sabido con anterioridad que la reina es hechicera y que sus poderes serán transferidos a la niña, eso no es lo que me preocupa.

Rey troye: entonces que sucede?

Partera: lo que pasa es que al mezclar mis poderes con los de las reina el efecto del parto será precisó y ambos poderes se unirán creando así un poder grandioso y majestuoso que permanecerá en su hija por siempre, el poder puede ser inincontrolable y le puede traer algunas colisiones ya que no podrá ser una niña normal nunca lo sera y menos con este poder.

Rey troye: entiendo me haré cargo de mantenerla sana y salva pero aplica tus hechizos para así salvar su vida.

"La partera procede a la habitación de la reina y le pide a todas las sirvientas que se retiren".

Reina Ana: que pasa dime ya no puedo mas con este dolor, se que algo esta mal.

Partera: Debo aplicar mi magia sobre usted para salvar ambas vidas solo así se podra tener a las dos sanas y salvas.

Reyna Ana: no te preocupes has lo que haga falta.

(La partera procede a hacer sus hechizo)

Partera: dentro de tu corazón estará tu felicidad, buenos y malos recuerdos siempre tendrás, el amor será un maleficio al igual que tu majestuosidad ven aurora mía salva sal ahora ya.

Emitiendo algunas luces mágicas y auroras boreales la reina da a luz a una pequeña niña de ojos violeta y cabello sedoso a la cual deciden llamar Safiro.