Antes, a las afueras del polígono este de la ciudad había una fábrica abandonada que no había sido demolida. Al principio sólo iban ocupas, pero enseguida decidieron transformar la antigua fábrica en algo mejor. Lo llamaron el Onyx. Era un lugar (por lo que contaban, yo no fui nunca) en el que la gente iba a bailar y a beber. Una discoteca en una fábrica medio derruida.
Pero en cuanto adquirió cierta fama, decidieron dar un paso más. El Onyx pasó de ser una simple discoteca a convertirse en un lugar de duelos. Dos tocaban, el resto bailaban, y luego se elegía a uno de ellos. Y al final, la gente votaba y uno de ellos se quedaba y el otro se eliminaba. Se hacían octavos, cuartos, semis y la final. Y quién ganaba... dios eso debía ser alucinante. Pero al cabo de unos años, una empresa quiso construir ahí y aprovechar la vieja fábrica, y el Onyx desapareció.
Obviamente eran todo mitos, no había ninguna certeza de que el Onyx hubiera existido, pero decían que el premio era algo inédito. Y uno de los supuestos premios eran dos baquetas doradas.
Por eso mismo me quedé tan sumamente traspuesta cuando vi que aquel chico tenía esas baquetas.

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Limerencia
Romansa-estado mental involuntario el cual es resultado de una atracción romántica por parte de una persona hacia otra- Eso es lo que significa limerencia. Y supongo que es lo que he vivido. Fría, seria y centrada; así era yo. Misterioso, duro y perdido;...