Feliz Navidad!! - ¡¡Hasta aqui llegastes Marina!!

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Dulce: ¿como me veo?
Anahi: - con ternura – estas hermosa
Dulce: ¿segura? ¿No es muy casual?
Anahi: no mi amor estas perfecta, Christian llamo para ver si podía pasar un rato después de la cena... ¿te molesta?
Dulce: - sonriendo – No – la abraza – estoy feliz, es la primera navidad que pasamos juntas
Anahi: y estoy segura que habrán muchas mas – la besa – bajemos que nos están esperando para cenar
Franco: - viéndolas bajar por las escaleras - Se ven preciosas
Dulce: Gracias Franco
Anahi: ¿Y mi mama?
Franco: salio hace un momento dijo que volvería luego
Anahi: - encogiéndose – ¿no va a cenar con nosotros?
Franco: creo que no hija
Dulce: - para cambiar el tema, que sin duda veía que afectaba mucho a Anahi – Mm huele rico
Franco: Lupe lo hizo todo, y se ve exquisito
Anahi: pues comamos
Franco: - escuchando el sonido de la puerta - no podemos empezar sin los invitados – Dulce y Anahi se vieron –
Dulce: - Franco abrió la puerta y esta respondió asombrada – ¿papas?
Alma: iban a empezar sin nosotros ¿eh?
Dulce: - corre a abrazarla – ¿que hacen aquí, cuando llegaron? – Ve a Franco – ¿porque no nos dijiste nada?
Martín: no le eches la culpa, le rogamos que no te dijera nada
Dulce: - abraza a su padre – los extrañe mucho... OH por Dios, Mai!
Mai: gusanita – se abrazan –
Dulce: estas hermosa, mira tu barriguita, ya se te nota
Anahi: como están tíos, que sorpresa
Ucker: hermana – le da un calido abrazo – te adoro
Dulce: y yo a ti bebe
Franco: bueno ahora si podemos empezar la cena
Lupe: que lo disfruten mucho señores, con permiso
Franco: ¿Ey Lupe adonde vas?
Lupe: comeré en la cocina señor
Franco: ni se te ocurra, siéntate con nosotros
Lupe: pero señor
Franco: no acepto peros, hoy cenamos todos juntos
Empezaron a cenar, Franco y Martín estaban en la cabecera, Alma, Christopher y Maite se encontraban de un lado y Lupe, Dulce y Anahi del otro, quienes tenían las manos unidas mientras conversaban, La alegría era notoria en ambas, y el resto de la familia, estaban recordando muchas cosas que habían pasado entre ellos, la venida de un nuevo integrante a la familia, varón para su gusto, planes de boda, y la notoria ausencia de Marina...
Martín: ¿Y tu esposa Franco?
Franco: les pido disculpa por parte de ella, no pudo estar esta noche aquí
De nuevo Anahi volvió a quebrarse por dentro, sabia que lo que su padre decía era falso, solo era una mentira para tapar cualquier desfachatez que ella estuviera haciendo...
*************
Mauro: ¿de que me estas hablando?
Marina: el imbecil de tu hermano ya no quiere boda, tuvo las santas agallas de presentarse en mi casa y decírmelo
Mauro: ¿ya Anahi lo sabe?
Marina: No sabe absolutamente nada, yo se lo explicaría con más calma cuando llegara el momento
Mauro: ¿y ahora que vamos a hacer?
Marina: no podemos arriesgarnos a que mi hija se entere, habrá que anular ese plan, es mejor que el mocoso ese le diga a tu madre que no va a ver boda, ella se encargara de el... nosotros tenemos que idear un plan B
Mauro: ya no hay plan B Marina, las cosas se no están saliendo de las manos
Marina: mi marido aun no se ha dado cuenta de nada...
Mauro: pero no faltara mucho para que vaya sospechando, lo que el te da no es suficiente para comprar todo lo que tienes, no es que no lo note es que tal vez esta haciéndose el desentendido – con una sonrisa maliciosa – para agarrarte con las manos en la masa
Marina: ni te atrevas a decir eso de nuevo, porque si caigo... tu caes conmigo Maurito.
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Dulce: ¿porque tienes esa carita?
Anahi: - observando al horizonte, desde el balcón principal de la casa – no me cuesta mucho trabajo imaginar donde esta mi mama
Dulce: se que es doloroso para ti, pero daría lo que fuera por no verte así
Maite: Ey, ¿interrumpo algo?
Anahi: No Mai pásale, oye que linda que estas
Maite: empiezo a creer que será futbolista, o es que se desquita conmigo
Dulce: - ríe – ¿y como piensas ponerle?
Maite: pues ya que su tía loca estaba ansiosa por decidirlo dejare que lo escoja ella... o mejor lo deciden ambas
Anahi: - sonriendo – ¿en serio?
Maite: ya eres como una hermanita más Any
Anahi: jajja gracias Mai, consultaremos con Ucker a ver que dice
Ucker: ¿reunión de chicas?
Dulce: miren quien llego... Mr. Músculo, ¿estas hiendo al gimnasio hermanito?
Ucker: OH, es mi físico natural – ríen –
Christian: buenas noches
Anahi: Chris – abrazándolo – feliz navidad
Christian: igual para ti wera
Anahi: te presento a mi primo Christopher – le da la mano – y su novia Maite
Maite: prometida eh – mientras estrechaba su mano
Christian: un gusto
Maite: - susurrándole al oído a Dulce – ya entiendo el porque de los celos, esta guapo el niño
Dulce: - con mirada asesina – ya había olvidado ese tema
Anahi: les parece si salimos mañana, así conocen la ciudad
Ucker: claro, ¿tú quieres Mai?
Maite: me encantaría
Ucker: bien pues nosotros nos vamos a dormir, nos vemos mañana
Dulce: - con mirada picara hacia ellos- pásenla bien
Luego que quedaron ellos tres solos, el silencio se hizo presente, ninguno decía nada, no sabían que expresar en una ocasión como esa, Chris se sentía incomodo pero al mismo tiempo no quería irse, y Anahi solo veía a Dulce a ver si esta tenia algún tipo de reacción... Dulce, aunque no quisiera, decidió irse y dejarlos solos, confiaba en Anahi y prefería dejar esa situación incomoda, así que fue ella quien decidió marcharse
Dulce: voy a conversar con mis papas, nos vemos ahora – Any solo asintió –
Anahi: no te esperaba tan temprano
Christian: mis papas ya se durmieron y mi hermano, que por casualidad se le ocurrió venir para la cena de Navidad... no estaba justo en ella
Anahi: ¿Mauro no estaba en tu casa?
Christian: No, llame a su teléfono pero no contesto, no sabemos a donde fue – Anahi si lo sabia
Anahi: bueno Chris ya voy a dormir, ¿a que hora salimos mañana?
Christian: a la hora que puedan, me avisan y pasó por acá
Anahi: este bien, nos vemos, gracias por venir
Ya todos estaban en sus cuartos durmiendo, la casa era grande y tenia suficientes habitaciones para que se instalaran, solo Franco permanecía aun en la sala
Marina consiguió las luces apagadas, entro de cuclillas y cerro la puerta de tal manera que no hubiera ningún ruido, pero al voltear se encontró con la fría cara de su marido, sus ojos expresaban odio y apuntaban directamente hacia ella.

Franco: ¿porque lo hiciste?
Marina: no iba a quedarme aquí haciendo de la familia feliz para cuando tus invitados llegaran, ni siquiera tengo ganas de dormir en esta casa
Franco: no va a ser falta ni que lo digas, puedes subir agarrar tus maletas y largarte de aquí
Marina: ¿me estas corriendo de mi propia casa?
Franco: me lo facilitas si te vas tu sola
Marina: no te va a hacer tan fácil deshacerte de mi Franco
Franco: con una llamada telefónica puedo arruinarte la vida Marina, no me fuerces
Marina: - retándola - ¿y porque no lo has hecho en todo este tiempo?
Franco: la única razón por la que sigues bajo este techo es por respeto a mi hija, si no ya estuvieras pudriéndote en una cárcel
Marina: ¿de que estas hablando?
Franco: ¿crees que soy imbecil Marina? Tengo contactos en todas las empresas del país, - - sarcástico - no sabia que tenias amigos también en ellas
Marina: - asustada - no se que dices
Franco: - alzando la voz – no me veas la cara de idiota... no pusiste ningún inconveniente en que Anahi fuera a Tlacotalpan porque así te encargarías de arreglar la maldita boda con ese muchacho, ¿porque el? Porque es el hermano de tu amante o socio da lo mismo, querías quedarte con el dinero de la empresa y no solo con el nuestro sino también el de su familia, deberías ser mas prudente cuando hablas por teléfono ¿sabes? O guardar las cosas mucho mejor que debajo de la cama
Marina: no puedes probar nada de lo que estas diciendo
Franco: - con una carcajada – tengo registros de teléfonos, estados de cuenta, nombre de todo el personal de dichas empresas, personas con las que has hablado, te vendieron Marina y sabes porque... por dinero
Marina: no puedes hacerme eso Franco, piensa en Anahi
Franco: no seas descarada, justamente porque pienso en ella lo mejor es que sepa la clase de persona que eres
Marina: no lo harás, no eres capaz – dicho esto salio de la casa en un intento de correr, pero no sabia exactamente a donde iría, ya Franco lo sabia todo y como le había informado minutos atrás, con una simple llamada podría hundirla... ahora tendría que ir a donde Mauro y informarle de todo, no era la mejor opción pero era la única que tenia, miro hacia atrás, Franco no había ido tras ella
Franco: no tienes escapatoria Marina – tomo un sorbo de su trago y volvió a sentarse, sin saber que alguien ya habría escuchado todo -

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