Epílogo.

766 140 53
                                    

{ ¿Cuántas curitas son necesarias para curar un corazón roto? }


—No debes jugar con esas cosas, Kwan —JiHoon se cruza de brazos y mueve la cabeza negativamente. Le conté lo que pasó ayer con el amor de mi vida.

—No lo hago, Hoonie hyung. En serio me besó.

— ¿Qué te he dicho sobre el exceso de doramas?

—Que es malo, pero... —ahogo un grito. — ¡Hyung, ese no es el punto!

—No grites, que no estoy sordo.

—Hyuuuuuung~

—Gobiérnate, niño, ya.

—Es cierto, hyung. Ahora me sonríe.

Se sorprende y se balancea para quedar cerca de mí. Sonríe maquiavélicamente. Pongo cara de pocos amigos.

El grupo de SeokMin aparece en la cancha. Con hyung miramos hacia su dirección y mi bello moreno Min me sonríe y-y hasta suelta una risa ante la asombrada y atónita cara de mi mayor.

¡SONRÍO Y SOLTÓ UNA RISA! ¿Acaso se puede ser más bello? Obviamente no.

¡MUNDO PREPARATE QUE YA TENGO A MI HOMBRE!

—SeungKwan.

— ¿Qué?

—Acabas de levantarte de pronto y golpear la mesa.

—Ah —eso explica por qué nos están mirando todos en patio de la escuela, pero me da igual porque mi moreno sonríe y ríe otra vez.


~*~


Decido algo y durante el otro receso me acerco a mamá y papá, nuestro JiHan; JiHoon hyung me dio un abrazo hace rato porque estaba feliz por mí, me felicitó por no habérmelo inventado (aunque no sé por qué lo dijo, todo lo que yo digo ha pasado, algo tergiversado, pero pasó, eh) y luego se fue refunfuñando cosas sobre unas tareas, un trabajo, nombres y la hora del almuerzo, así que no le pregunté nada para dejarlo todo en mano de los mayores.

Hago un pequeño baile de felicidad porque el JiHan aparece rápidamente.

—Hyuuuungs~

— ¿Qué pasa, Kwannie? —me dice Josh mostrando esa linda sonrisa de ojos que tiene.

— ¿Puedo decirle a mi moreno que coma con nosotros hoy?

— ¿Quién es tu moreno? —pregunta mi padre.

—Obviamente que SeokMin, ¿quién esperabas? —responde mamá Han. —Kim no porque tiene su lapa Jeon y Chwe está blancuchote.

Esa es mi madre, me emocioné.

—Ahora entiendo —papá tarda en procesar, a veces.

— ¿Les molesta?

—Claro que no, los esperamos.

—Graaaaaaciassssssss~

Al girarme, para mi suerte, SeokMin camina a su sala. Con paso rápido lo detengo.

—Hola, Kwannie —mi corazón late, late y late.

—Hola, Minnie.

— ¿Qué ocurre?

booritas ≡ seokwanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora