Domingo, 19 de octubre, 6:00
Un día cualquiera en una ciudad cualquiera.
Hace 3 semanas y media que decidí ir a la boda.
Hacía más de 8 años que no veía a Mirt, y no sabía casi nada de él.
¿Cómo le estará yendo? ¿Habrá crecido mucho? ¿Aún me recordará como yo lo hago?
¿Habrá superado esa enfermedad?
Dentro de dos horas lo veré en la iglesia. En el altar, emocionado, puede que llorando. Dirá que sí al oír las últimas palabras del cura, besará a Ángela con dulzura y será el chico más feliz del mundo.
Qué digo. Mirt ya es un hombre. Se va a casar a una edad temprana, pero se casan esa parejita, estoy segura de que les irá bien.
Me miro al espejo.
"¡Carls! ¿Puedes venir un momento?"
Él se asoma por la puerta de mi habitación.
"Claro, dime."
"¿Podrías engancharme este colgante?"
"Sí."
Carls es un Sol. Me dijo que me iba a llevar a la iglesia en su auto.
"Te ves hermosa."
Dijo como si estuviera orgulloso.
"Gracias. Fue con tu ayuda que elegí el vestido."
Era un vestido bastante simple, humilde pero no vulgar. Era negro, de mangas largas y con falda de sirena. Tiene encajes de flores, dejando ver la espalda y los brazos. Solamente perfecto.
"De nada ,linda."
Después me llevó a la iglesia, pude ver que habían compañeros del conservatorio, en la época cuando concursé en Europa.
Saludo a algunas personas que conozco y me pongo a conversar .
La iglesia es hermosa. Muy grande, con unos techos altísimos decorados con arte rupestre de la época barroca.
El lugar está decorado con blanco y dorado.
"Hola, Arlet."
Oigo una voz suave y grave detrás mío. Me giro a ver a la persona que hay .
Es un hombre alto, con un esmoquin negro y una corbata azul. Su pelo es corto, peinado hacia un lado, dejando algunos cabellos caer de manera seductiva pero elegante.
Sus labios son finos, formando así una sonrisa ladina pero sincera.
Con él hay una mujer un poco más baja que él. Está vestida de blanco, un vestido sin complicaciones, simple, hermoso y elegante. Es la novia.
Les sonrío amablemente.
"Hola. Felicidades por la boda, Mirt y Ángela."
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Winner
PoetryGané. Gané lo que pensaba que era mi razón de mi vida. Gané lo que todo el mundo deseaba. Pero ¿Por qué pierdo lo más importante?