One Shots Chris Evans y tu

Amor a cambio de un helado

Llevo varios meses aqui en Boston, voy en el cuarto semetestre de administración de empresa, vine a Estados Unidos para poder mejorar mi nivel de ingles y para incrementar mis estudios.
Vivo actualmente en un departamento cerca de la escuela *Harvard Business School* .
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Son las 6 de la mañana de un miercoles, he decidido ir a correr mas temprano, ya que hoy tengo una exposición y tengo que vaciar mi mente y relajarme, llevo puesto unas mallas deportivas negras, bra-deportivo rosa, sudadera azul y tenis deportivos.

Desayuno un smothie y salgo de casa preparando mi playlist para entrenar.

Al mejorar mi tiempo corriendo ya algo agitada decido regresar corriendo a casa para preparar un desayuno fuerte, ducharme e ir a la escuela. Al salir del supermercado, por mala suerte, choco con un hombre mucho mas alto que yo haciendo que se me cayera una bolsa, un poco avergonzada me disculpo al mismo tiempo agachandome para recogerla pero el ya me habia ganado.

Para poder agradecerle lo volteo a ver directamente a los ojos... al cruzar nuestros ojos veo una preciosa combinación entre azul y verde, Dios!! Sus ojos son tan profundos... una imagen que nunca queria borrar de mi cabeza

-uh... perdón soy una tonta por no ver por donde camino... enserio perdón.- le digo sintiendo como mi cara se sonrojaba

-yo soy el que tiene que disculparse, no era un lugar apropiado para pararme. - me dice con una hermosa sonrisa.

Sin ninguna idea para poder iniciar una conversación pero con unas enormes ganas de que nunca se fuera decido armarme de valor. -.... mi nombre es ____ - le digo sacando mi mano de la sudadera para saludarlo.

-soy Chris Evans, gusto en conocerte- dice con una dulce sonrisa mientras estrechamos las manos, Dios su mano es muy grande y fuerte.

-...bueno, fue un gusto conocerte ___ espero un dia volver a verte-

-el gusto fue mio Chris- le digo mientras veo como se va.

Al verlo un poco mas lejos decido recoger las demas cosas del suelo
-eres una tonta___ como no le pediste su número!- me maldigo.

-no debes de ser muy dura contigo misma- dice una voz conocida en frente de mi.

-perdón... te gusta asustar a la gente- le pregunto con una sonrisa mientras poso mi mano en mi pecho.

-suelo hacerlo aunque no quiera-

-¿Qué te trae de nuevo por aquí?- le pregunto con una sonrisa de oreja a oreja

-bueno... yo queria... preguntarte si quisieras... bueno... comer un helado en la tarde- pregunta rascando su cabeza.

-claro me encantaría- le digo clavada a sus ojos.

-este es mi número por si alcaso- le doy un papelito con mi número anotado.

-bien yo te llamo, entonces... ¿te apetece a las 5:00?

-perfecto!... entonces te veo al rato-

-si...-

-adiós Chris- me despido de el con un beso en la mejilla, esta muy alto que tuve que pararme de puntillas, con ayuda de el agachándose para alcanzarlo.