II

2.8K 337 98
                                    

Han pasado un mes desde que vi a mi amigo, los policías me interrogaron mientras estuve internada en el hospital por mi fractura, debo suponer que nadie sabe nada...

Hoy por fin volveré al instituto, faltan nueve meses para la prueba de selección en la preparatoria U.A, Izuku debe estarse preparando.

Entro con normalidad al salón y veo que los patéticos me observan impresionado y vuelven con sus susurros, veo a Izuku sentado al fondo y en mi asiento esta como siempre. Coloco una mano en su cabello y comienzo a revolverlo como siempre lo hago cuando algo me inquieta. Su mirada se encuentra con la mía y siento que su abrazo me tira al piso. Sorprendida le acaricio la cabeza y susurro que todo está bien.

"Tenemos que hablar"

Sonrio y lo despego de mi juntando nuestras frentes

"Después de clases te contare todo, sin mentiras ni omitir ningún hecho"

Las clases transcurren con normalidad y llega la hora de salir. Toma mi mano y sale rápidamente, me sorprendo pero sonrío y le sigo, llegamos a una especie de vertedero y una persona se encuentra abajo, mira preocupado a Izuku pero el solo sonríe negando.

"Midoriya, creo que deje bien claro de que esto es un secreto y nadie se debe enterar"

Le miro un poco preocupada y trato de decirle que me iré pero sostiene fuertemente mi mano y niega con su cabeza.

"All might, ella es Izumi Katya mi mejor amiga desde los 4 años, creo que es en la única persona que podría dar mi vida sin siquiera pensarlo dos veces y por eso mismo la única que confió que no le dirá a nadie"

Miro al hombre examinándolo fijamente, no se ve como ese héroe pero si sus rasgos faciales se parecen, su mirada me observa y opto por tomar su mano y saludarlo.

"Por casualidad... ¿no eres la chica que mató a sus padres?"

Me congelo y mi mano suelta automáticamente la suya, miro a Izuku que me mira buscando explicaciones.

"Izuku, eso era una de las cosas que tenía que contarte"

Mi voz era apenas audible, me siento en la lisa arena y agarro mis piernas, los dos toman asiento al frente mío y ajusto mi voz para comenzar.

"No deje que fueras a mi casa porque mi padre había cambiado... dejó de ser aquel hombre bueno siendo uno que maltrataba psicológicamente a mi madre y a mí físicamente ya que con lo psicológico no habían cambios. Cada día que llegaba tarde él se colocaba en la puerta esperando mi llegada. Fue así durante estos dos años, hasta que hace un mes fue mi colapso... veía cada vez más mal a mi madre y creí que ya era el momento de actuar, los héroes nunca ayudaron y no encontré otra salida. Ocupe mi particularidad... perfore su cabeza. Subí rápidamente para sacar a mi madre de la casa pero ya era demasiado tarde, ella había dejado este mundo por sí misma. Cuando me dirigí a la entrada para llamar a alguien se encontraba la policía y tres héroes por el gran estruendo que hubo. Estuve en el hospital 1 mes por el rompimiento de mi hombro izquierdo provocado por mi padre... creo que ya no podré ser un héroe, no podré estar contigo Izuku... ya no podremos luchar juntos"

Mis lágrimas caían sin control, estoy desesperada y solo quiero desaparecer, tener una oportunidad nueva y ser alguien normal con una familia normal... ser querida y no defraudar a mi único amigo.

"¿Por qué no me contaste nada?"

"No quería preocuparte, sé que estabas preocupado por ser un héroe y al no tener particularidad tu ánimo ya no era el mejor"

"¡Pude haberte ayudado!"

Su grito hace que le mire fijamente, su rostro es una mezcla de furia, desesperación y tristeza, me abraza y solo lloro en su hombro, All migh opta por quedarse sentado observando la escena. Luego de unos minutos nos separamos y le sonrío, el procede a contarme el secreto de All migh y quedo realmente sorprendida pero luego le agradezco por haber escogido a Izuku.

"Creo que debería de irme ya, mañana hay clases y tienes que practicar, nos vemos mañana"

Me despido de los dos hombres y camino a mi casa, un hombre o mejor dicho oficial me detiene.

"Izumi, ¿tienes unos minutos?"

Asiento con mi cabeza y lo invito a entrar a mi casa, se sienta en la sala de estar y llego con unos cafés preparados. Me siento frente a él y espero a que comience a hablar.

"Izumi, hemos estado viendo el caso de tus padres y vas a quedar impune de cualquier cargo porque nos dimos cuenta de que todo fue en defensa propia. Como eres menor de edad tienes que encontrar un tutor, no hayamos a ningún pariente ni nada por el estilo así que te daremos dos opciones"

Tomo un sorbo de mi café y comienzo a ponerme nerviosa, no quiero abandonar esta casa pero tampoco puedo mantenerla. Saca unos documentos y los comienza a leer.

"Bueno, básicamente la casa es tuya gracias a las grandes reserva de dinero que tenían tus padres, no tendrás que pagar nada por toda tu vida respecto a la casa pero... eres menor de edad y por un periodo de tiempo te vas donde un familiar o amigo, o tendrás que vivir sola y el estado te da una mensualidad hasta que cumplas mayoría de edad"

Suspiro aliviada tomando los papeles leyendo todo lo que me han dicho y opto por la segunda opción, firmo los papeles que respaldaran mi decisión, el oficial me sonríe y se va no sin antes decirme que una vez al mes el vendrá a ver cómo voy.

Cuando la puerta es cerrada un enorme silencio se forma y miro a mi alrededor sin encontrar nada específico, camino hasta mi habitación y me recuesto en esta boca arriba. No puedo creer que ya haya pasado solo un mes desde lo acontecido, todo está limpio y no hay ningún rastro de sangre más que en mi memoria.

"Una nueva vida a comenzado"

Así pasó durante nueve meses en los que apenas pude ver a Izuku, me entrené un poco y mejore mis especialidad, estudie durante todos estos meses y por fin llegó el momento de dar la prueba práctica para entrar, Izuku vino a buscarme a mi casa para irnos juntos, me contó sobre su entrenamiento y cuanto poder había logrado adquirir.

"Veo que has entrenado demasiado, por casualidad... ¿Te has marcado?"

Este ríe nervioso y yo le levanto la polera viendo su abdomen notablemente marcado, le toco las líneas y el me pide que pare a lo que me burlo.

"Vamos, no seas tímido Deku"

"Pero Katya, no puedes hacer esto en público, es vergonzoso"

Sonrio y me coloco frente a él poniendo mi mano en su pecho.

"Izuku, nos conocemos desde niños, hemos dormido juntos y hasta me has visto desnuda... ¿y me dices que ahora te da vergüenza?"

El niega con la cabeza y reímos juntos, sé que fue un malentendido pero me vio. Aunque yo no tuve problemas ya que nuestra confianza es grande y nadie la podrá romper.

Estábamos al frente de la gran preparatoria y justo cuando yo me adelanto veo como mi idiota amigo tropieza, está por caer cuando una chica le toca el hombro y comienza a flotar. Me acerco donde están estos dos y veo que ríen y se dan ánimos el uno al otro. Cuando la chica se va veo que Izuku comienza a susurrar que ha hablado con una chica linda.

"Entonces yo soy una chica fea, si es que soy una chica"

"No Katya, es un malentendido. Lo que quise decir es que me ha ayudado y no he hablado con otra chica que no seas tú, entonces..."

"Deku, te has puesto rojo"

Entre risas y sonrojos por parte de Izuku llegamos al gran salón donde tuvimos que sentarnos a un lado de Bakugo.

"Ahora daremos comienzo con la prueba, por favor den su mejor esfuerzo" 

Me gustas-BNHA #BNHAwards18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora