Para Enamorarte |CNCO|

Capítulo 9

-¿Qué haces?- Azul le cuestiona un tanto confundida, no había entendido el porqué Richard la había besado.

-¿No te gustó?- Richard la vuelve a besar.

- Si claro, pero...

-Sin peros, volvamos antes de que piensen que estamos haciendo otra cosa- Richard ayuda a Azul a bajar del peñal-. Me encantó besarte.

Richard se inclinó hacia ella y la besó con suavidad. Azul cerró los ojos y se dejó llevar, y sintió que algo estallaba en su pecho y que un extraño hormigueo recorría todo su cuerpo. Los labios de Richard acariciaron los suyos, con ternura, y por un momento sintió que besarla era su refugio aunque no estaba seguro de lo que hacía.

-Ya vámonos- Richard la sostuvo de la mano pero Azul inmediatamente la soltó.

-A ver quien llega primero- Azul corre a toda velocidad y Richard la persigue pero Azul llega primero, antes de llegar Richard la visualiza y no puede dejar de mirarla.

-Richard despierta- Christopher lo golpea amistosamente en la cabeza.

-No, dejame- Richard le devuelve el golpe.

-Dime Richard, ¿Cómo les fue?- Le pregunta Zabdiel en un tono burlón.

-Bien, vamos a ser padres....

-¿En serio?- Christopher empieza a saltar como loco.

-No loco- Le responde Richard-. Ocupate de Lía, que hoy no le has prestado mucha atención.

-Tienes razón- Christopher se dirige a dónde está Lía junto a Azul-. Lía, ¿Podemos hablar?

-Ahora no puedo, hablamos más tarde ¿Sí? -Lía se marcha al baño con Azul para cambiarse.

-Si, está bien- Christopher se sintió impotente y se fue a dónde estaban los demás chicos.

Azul y Lía fueron a cambiarse al baño y Lía nota la felicidad que traía Azul.

-¿Y a tí que pasa?- Lía le da un empujón amistoso-. ¿Qué paso con Richard por ahí?

-Nos besamos- Azul comenzó a bailar por todo el baño.

-¿QUÉ? ¿Cómo pasó? Cuéntame.

-Nos vamos de luna de miel- Lía cambia la cara de felicidad a enojo.

-¿Cómo que ya se van de luna de miel? ¿Y qué vas a hacer conmigo?

-Pues te llevaré conmigo y si quieres nos llevamos a Chris.

Lía se pone los brazos en la cintura, esperando una explicación de su amiga.

-No mentira, no nos vamos a ningún lado.

-¿Entonces qué pasó?- Se sienta junto a ella.

Azul le cuenta todo a Lía con puntos y comas. Lía abraza fuertemente a su amiga y se alegra por ella, pero sabía que aún faltaba algo por contarle.

-Emmm, yo también te tengo que contar algo- Lía se pone un poco nerviosa.

-Dime, ¿Qué pasa?- Pregunta Azul y de repente tocan la puerta del baño.

-Chicas, ya salgan por favor- La voz de Joel retumba todo el lugar.

-Ya vamos- Grita Lía aún vistiendose.

Luego de una hora de camino, los chicos se detienen en un restaurante marítimo, ya para la hora de la cena.

-Azul, ven siéntate conmigo- Lía la sostiene del brazo.

-No, tú te vas a sentar conmigo.- Christopher sonríe y se la lleva de mano en tanto Lía y Azul hacen señas burlonas.

-¿Me permite sentarme con usted bella dama?- Richard besa la mano de Azul y le Guiña el ojo.

-Claro que sí mi caballero- Azul le responde.

Los camareros le ofrecen la carta del menú. Los chicos piden cada uno platos diferentes. Christopher pidió cangrejos, Richard pulpo a la leña, Joel mariscos, Erick sardinas a la leña de la lonja de la barceloneta y Zabdiel almejas. Las chicas, las más simples,pidieron  pescados, cada uno con arroz negro con sepia.

Más tarde, cada quien con su plato en la mesa. Christopher le da a probar de su plato a Lía y Richard hace lo mismo con Azul. Las chicas se hacen unas clases de gestos indicándose que debían salir de ahí, no les había gustado nada la comida pero intentaban disimularlo.

-Permiso.- Lía se levanta de la mesa.- Voy al baño. ¿Me acompañas Azul?

-Sí...-Azul también se levanta con rapidez.- Volvemos enseguida.

Lía y Azul se van corriendo al baño, una con más rapidez que la otra.

-Te juro que sí no me paraba de la mesa le hubiese vomitado en la misma cara- Azul pone cara de asco.

-No entiendo como hay gente que les guste este tipo de cosas- Lía aún llevaba ratos dentro del baño.

-Ya sabes los ricos, nosotras como nunca en nuestra vida comimos algo así, nos debe saber mal pero a ellos, es lo mismo que comer pollo todos los días- Le comenta Azul.

-Sí, tienes razón...

-Mejor salgamos de aquí.

Salieron cuanto antes, pero ya los chicos se estaban preparando para salir. El camino a casa fue más corto de lo que se lo esperaban.

Las chicas se dieron una ducha para relajarse. Lía, un poco cansada va a la habitación de Azul quienes aún tenían una conversión pendiente.

-¿Y ahora si me vas a decir que pasó?- Azul le pregunta en lo que se secaba el pelo con una toalla. Lía abrió la boca para responder pero volvió a cerrarla cuando escuchó cómo tocaban la puerta.- ¿En serio?- Pregunta Azul irritada y Lía ríe.

-Azul, ¿Sabes dónde está...?- Habla Christopher pero se detiene al ver a Lía.- Te estaba buscando.- Dice con una sonrisa.-¿Me la prestas?

-Sí, pero tienes que devolvermela.

-¿Se acuerdan de que sigo aquí?- Pregunta Lía y Azul y Christopher solo ríen.

Christopher toma a Lía de la mano y juntos se encaminan hasta la habitación de Lía. Una vez allí se sentaron en la cama y Christopher pasó su brazo sobre los hombros de la chica.

-¿Por qué no estuviste conmigo hoy?

-Estuviste jugando con los chicos.- Lía ríe.

-Pero luego quería hablar contigo y no viniste.- Dice Christopher haciendo un puchero.

-Tenía que cambiarme, perdón.- Se disculpa Lía y lo abraza.

Christopher quita su brazos de los hombros de Lía y la toma por la cintura.

-¿Te acuerdas lo que te dije en la piscina el día que nos conocimos?

-Que soy bonita.- Susurra Lía un poco sonrojada.

-Ahora me arrepiento.- Dice Christopher y hace una pausa. Lía siente una punzada en su pecho pero decide esperar a que continúe.- Creo que eres hermosa.

-Gracias.- Susurra Lía completamente sonrojada y Christopher se acerca a sus labios poco a poco.

-He tenido ganas de hacer esto todo el día.

Antes de que Lía pudiera responder Christopher posa sus labios sobre los de ella uniéndolos en un beso que para ellos fue tan perfecto como el anterior.

En ese momento Christopher pensó que su lugar era donde estaba Lía, a pesar de que él se sentía realmente confundido, no creía que estaba empezando a enamorarse ella pero de todas formas tampoco podía alejarse ni aunque lo intentara. Había algo en ella que le gustaba aunque ni siquiera él mismo sabía que era.

-Buenas noches, princesa.

-Buenas noches, Chris.- Responde Lía un poco sonrojada.

Ya era algo tarde así que Lía decidió dormir ya que al día siguiente tendría que asistir a la universidad.