Capítulo 3.

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Habíamos llegado, espero mi madre no haya visto si no comenzaría a intorregorme.

Me baje y él siquiera se despidió cuando arrancó, no tenía idea de quién era él, pero le agradecía haberme salvado el culo. Entre silenciosa a la casa, no quería despertar a mi madre porque sabía que si despertaba me armaría la tercera guerra mundial.

Me acosté recordando todo el maldito desastre que había pasado hoy hasta que me quedé dormida.

8 de la mañana y ya estaba despierta, ninguno de los tres bestias de mis amigos se habían tomado la molestia de llamarme y eso me molestaba un poco.

Me metí a duchar 15 minutos después estaba abajo tomando el desayuno, la verdad no era que me preocupara tanto por mi aspecto físico, unos jeans, una camisa cualquiera, una chaqueta y mis inseparables botas, la verdad solía vestir simple, con lo que me sintiera comoda.

Sonó mi celular y lo atendí, era Sebastian.

-¿Estas bien? Lamento dejarte ayer bueno no te dejé estuve buscándolas pero jamás las encontré y ninguna de las tres respondía mis llamadas-

-Por unos ligeros minutos te odie ¿Sabes?- intenté sonar molesta y espero se haya escuchado así.

-Lo siento de verdad te busqué-

Lo había logrado el imbécil se la había creído, aunque en realidad decía la verdad.

-Casi me parten el culo Sebastian-

De acuerdo eso jamás debí decirlo en el comedor justo en dónde se encontraba mi madre.

Ella volteó y me observó con una mirada curiosa sabía que después de colgar ella comenzaría con su interrogatorio, aveces me pregunto ¿Por qué debo ser tan idiota?.

-¿Te pasó algo? ¿Estas bien?- habló preocupado.

-Si, si es sólo drama ya sabes...-

No Amelia ni arreglando la puta conversación tu madre te dejaría en paz.

-Oh claro ¿Tu mamá está ahí verdad?- río.

-Exactamente-

-De acuerdo en la tarde iré y tendrás que decirme lo que ocurrió-

Y finalizó la llamada.

***

-¿Vas a pedir algo de tomar?-

-Quiero café-

-Bien, escucho la razón por la cual ayer te iban a partir el culo Amelia Stonem- mi madre sonó enojada y eso no es algo que me tenga tranquila.

-Mamá yo solo quería asustar a Sebas, tranquila-

Si decía lo que casi vivo en la madrugada mi madre estaría enojada con Sebastian y yo estaría castigada lo cual no es una buena idea.

Quise evadir el tema y volteé hacía la ventana de la cafetería en donde estábamos y justo enfrente estaba el chico de la fiesta junto a una tipa e iban entrando a la tienda que estaba frente a la cafetería.

Mi mamá me saco de mis pensamientos diciendo que ahora podíamos ir a la tienda que quería.

-No mamá ¿Quieres ir a alguna tienda tú?-

-En la tienda de enfrente e escuchado que hay hermosas plantas, ¿No crees que hacen falta en casa?-

¡Genial! Justo dónde aquel había entrado.

Lo que me faltaba.

Caminamos hacía la tienda y yo esperé afuera, revise mi celular de arriba abajo esperando a mi madre hasta que alguien chocó conmigo, levante la mirada y era aquella chica que iba con el hombre de la fiesta.

Mierda, igual de bestia que aquél.

-Fijate por dónde andas-

-Lo siento no te vi- contestó ella.

Él volteó siquiera me había mirado.

-Oh mira a quien tenemos por aquí- me miró de arriba abajo.

-Igual que a ti no me agrada verte-

El se rió ante mi comentario, de verdad me había caído mal este.

-Eres muy molesta ¿Te lo han dicho?-

La chica que venía con él tenía uns cara de completa confusión y era lógico.

-Lo eres igual-

-No me interesa-

Se montó en la motocicleta y llamó a la chica para que subiera detrás de él.

***

-Te hablé y jamás contestaste-

-Yo te devolví la llamada e hiciste lo mismo, pude haber muerto idiota-

-Y subirte a la motocicleta de un desconocido y encima una patán tampoco era buena idea Amelia-

-Ya lo sé pero el tipo no me dio desconfianza ¿Sabes?, Igual es extraño-

Había hablado toda la tarde entera con Sebastian sobré lo ocurrido y él parecía bastante tensó respecto a la situación de ayer, como si eso le preocupará bastante.

-¿Y tú? Pareces tensó con lo de ayer-

-Meli estas loca, sólo estaba preocupado por ti, es decir por las tres- sonó nervioso como si quisiera ocultar algo.

Y sabía que lo hacía, conozco a Sebastian incluso más de lo que me puedo conocer yo y sabía que en él algo andaba mal e igual no quise ser molesta y atosigarlo con mis preguntas cuando él quisiera decírmelo estaría ahí escuchándolo.

-Bien dime quien era el tipo que te salvo el culo-

-Era uno de los que armaron el desastre en la fiesta-

-¿¡Qué!? no quiero saber que te has vuelto a acercar a ese o viceversa, te quiero lo más lejos posible de él Amelia- gritó.

Pero que carajos, este si que andaba mal.

-¿Te sucede algo con aquél?-

-¡Alejate eh dicho!-

Y salió de mi casa azotando la puerta, estaba mal y en problemas lo sé por la manera en la que se puso y tendría que averiguarlo a como diera lugar.

¿Cómo están? Espero que se encuentren de maravilla, ¿Cómo va todo con sus preparativos para navidad? Cuentenme 7uu7, disculpenme por no actualizar creo que definitivamente subiré capítulo cada dos días, espero les guste el capítulo y lo disfruten, linda noche.

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