XVIII

23.7K 1.5K 274
                                    

Capítulo 18: Empecemos de nuevo.

[POV Camila]

Desperté sobresaltada, una pesadilla horrible había irrumpido en mi sueño. Un accidente de coche. Respiré profundo, controlando mi respiración acelerada y observé mi alrededor. La habitación del pequeño Charlie. Todo parecía estar tal y como lo dejó el niño, algunos juguetes aún ocupaban el suelo, y unos pequeños vaqueros estaba sobre el escritorio. Como si dentro de unos minutos el niño llegaría de nuevo a su cuarto. Unas lágrimas asomaron por mis ojos, pensando en lo difícil que tuvo que ser para Lauren perder uno de sus hermanos. Jamás podría imaginar perder mi hermana, Sofia. Claro que todo era muy distinto.

Miré el rostro de mi hijo aún dormido sobre la cama, la mitad de su cuerpo sobre el mío a pesar del espacio que había. Sonreí antes de deslizarme fuera de la cama sin moverlo demasiado. La noche anterior me había dormido con la misma ropa, así  que tan solo me acerqué al espejo para retocar un poco mi pelo. Salí de la habitación y bajé las escaleras en silencio. Sonreí en silencio al encontrarme Lauren en la cocina, estaba vestida con una camiseta muy ancha para ella, y estaba agachada para coger algo de la nevera, lo cuál me dejaba admirar su trasero. Tosi despacio y ella se volteó.

—Oh, hola Camila. —Dijo tragando saliva, antes de toquetear su camiseta para intentar bajarla y esconder lo que ya había podido admirar segundos antes.

—Hola. —Sonreí.

—¿Quieres comer algo? —Preguntó y asentí. Empezó a sacar dos bol y un paquete de cereales, antes de raspar su garganta y evitar mi contacto visual a toda costa. —Sobre ayer mh..

—No se lo contaré a nadie, no te preocupes. —Dije cortándola y por fin levantó el rostro para mirarme con una fina sonrisa.

—Gracias.

—Y si necesitas lo que sea, que alguien te escuche.. Estoy aqui, ¿bien?

—Bien. —Contestó sonriendo antes de sentarse y darme uno de los bols.

Comimos unos minutos en silencio antes de que ella rompiera el incómodo silencio de nuevo.

—Tu hijo no se perdió en el hotel.

—¿Como?

—Él me busco. —Dijo y fruncí el ceño. —Quiere conocer sus abuelos, y ahm.. Decirles que no es un niño malo.

—¿Un niño malo?

—Si, él piensa que tus padres te echaron cuando se enteraron de tu embarazo y que no lo quieren.

—No fue así.. —Suspiré bajando la mirada hacía mi cuchara. —No exactamente.

—¿Cómo fue? —Preguntó. —Perdona no quería..

—No, está bien. —Contesté sonriendo. —Tenía dieciocho años cuando mi novio abusó sexualmente de mí. No se lo conté a nadie, ni si quiera a mis amigas. Mucho menos a mi familia.
—Dije la voz algo quebrada, las manos temblorosas. Lauren lo notó y posó delicadamente su mano sobre la mía. —No sabía que estaba embarazada hasta unos meses más tarde. No sé si mis padres hubieran aceptado mi embarazo, pero no estaba dispuesta a que el mundo viera mi hijo como el monstruo que era su padre. No quería que mis padres vieran a mi hijo, a su nieto, como el hijo de un violador. Jackson es mío. Es sólo mío. Es mi hijo, y es un ángel. No tiene comparación con su progenitor, por qué eso es lo que es. Su progenitor, nada más. —Dije las lágrimas caminando por mi rostro de la impotencia.

Gonna Get BetterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora