-Entonces en conclusión... ¿Planeas salir con el hijo de uno de tus maestros en tu extraño juego? -Sonreí

-No es extraño, sólo incomprendido. Sabes que me aburro con facilidad, es una buena forma de Pasar el tiempo... Además, ni ellos salen heridos ni yo tampoco- Dije aplicando labial rojo

-Querida... Debes tener cuidado, algún día te vas a enamorar de verdad en uno de tus "JUGUETEOS"-Reí

- Hermanita ¿Quién te entiende? Hace unos años me dijiste "Sé una perra sin sentimientos" Ahora me adviertes de que me podría enamorar... Yo sepulte ese lado hace años... ¿Entiendes nena? Te Amo.. Eres la mejor.. Gracias por preocuparte por mi... - Besé su frente y ella río

- ¿Siempre haces lo que quieres no es cierto? -Reí

-Siempre que me divierta si- Reí y la vi

- ¿Cómo me veo? - Ella lanzó un beso al aire

-Estás "Mi amor hazme tu esclavo"- Sonreí con complicidad- ¡No me digas que ese es tú plan!-Saque la lengua

-Estoy aburrida... No te diré más nada-Salí casi corriendo de mi habitación

-Evangelinne Evans, ven y dime... ¿Te pretendes meter en el bolsillo al Hijo del Gran "Woodcoth"- La mire 

-Darianne, silencio.. Los vecinos...-Ella se cruza de brazos

-Tu vecino más cercano soy yo que vivo en el piso de abajo.. Quise pasar mis cosas al departamento de lado, pero me dijeron que él dueño venía está semana...- Mordí mi labio.. Ciertamente... Ayer, al venir vi otro camión de mudanza desde Manhattan.. Tome aire y baje... Subí a mi a auto.. Algo en mi pecho me agitaba... Tal vez no es mi pecho.. Tal vez son mis piernas... Estaciono en Giacomo's de north end... Entre por la puerta principal

-Señorita Evans- Sonreí

-Francis-Sonreí con mi típico aire de suspenso

-Alguien la espera adentro- Asentí con educación

-Muchas gracias- Me adentre al local en dirección a mi mesa, en el fondo sonaba Love's sorrow, me parece extraño, aunque claro... En esté restaurante se escucha cualquier tipo de música... Comienzo a divisar a lo lejos a Gusttavo sentado en una mesa leyendo algo en su celular..  Camine hasta él, 

Me había quitado la pintura de las uñas, me aburrían ya

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Me había quitado la pintura de las uñas, me aburrían ya... Suspire. 

-Buenas Noches Gusttavo- Él sonrío 

-Hola Evangelinne- Dijo y fruncí el ceño, el amo dentro de mí quiso castigarlo 

-Señorita Evans para ti- Dije pasando lo suficientemente cerca como para enloquecerlo 

-¿Por qué tú puedes llamarme Gusttavo y yo no puedo llamarte Evangelinne? -Me Frene y lo mire

-Pongamoslo con ejemplos- Me senté- Supongamos que soy tu reina ¿Cómo le dice el plebeyo a su reina?-

¡NO TE PERTENEZCO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora