MLP: San Valentin en Canterlot High ♥

Capítulo 30: "Ella"

Narra Pinkie
Miraba con una sonrisa de satisfacción como Dashie se retiraba para tranquilizarse un poco. Sabía que la había ayudado, y eso me hacía sentir feliz. Lo único que necesitaba Rainbow para sacarse todo el estrés de encima era un pequeño paseo para despejar la mente. Y para mi no era nada cubrir por algunos minutos el "puesto de vigilancia" de ambas, con tal de que su Dashie estuviera bien. Mientras tanto, para matar el aburrimiento, rondaba por los alrededores del pasillo, dando pequeños pasitos torpes a propósito solo por diversión, cuando de repente escuché una risa algo ronca y tenebrosa. No me preocupé en pensar de quien era esa carcajada. Aquel sonido en si no me asustó, si no que provocó aquel escalofrío que tanto disfruto. Sonreí al sentir la emoción de mis piernas volviéndose tan temblorosas como gelatina. ¡Adoraba sentirme asustada! ¡Era tan emocionante y divertido! Pero... a pesar de todas esas sensaciones, en realidad no tenía miedo. Pocas cosas me provocan VERDADERO terror. Aunque... prefiero no recordarlas. Sobretodo ESA razón. Simplemente... no me gusta recordarla. Dejé de pensar en eso y comencé a cantar mi canción favorita. Siempre la cantaba cuando me sentía mal y siempre me ayudaba a sentirme mejor.

Pinkie:

When I was a little filly and the sun was going down...

The darkness and the shadows, they would always make me frown...

I'd hide under my pillow
From what I thought I saw

But Granny Pie said that wasn't the way
To deal with fears at

She said, "Pinkie, you gotta stand up tall. Learn to face your fears"

You'll see that they can't hurt you
Just laugh to make them disappear.

So, giggle at the ghostly
Guffaw at the grossly
Crack up at the creepy
Whoop it up with the weepy
Chortle at the kooky
Snortle at the spooky

Poco a poco me sentía atrapada por la canción. Desde pequeña amaba esa canción con todo mi corazón. Cantar esa canción era el equivalente a comer un helado de galleta con mermelada de fresa y chispas de colores (solo en la parte izquierda del helado) en el primer día de verano. Seguí cantando mientras sentía que mi alrededor se convertía en un escenario de tonalidades pastel, decorado con dulces reales y esas pequeñas máquinas que sueltan humo con olor a pastel. Bailaba y daba volteretas mientras seguía cantando la canción en el escenario, cada vez con mas intensidad, pero sin llegar a lo insoportable. Las luces rosas alumbraban directamente a mi, como si yo fuera la estrella del show. Pero de repente, en aquel sueño se volvió oscuro. Miré a mi alrededor. Todo era oscuridad. Caminé por toda aquella zona desconocida, pero no había rastro alguno de vida. O por lo menos algo para entretenerse como una revista o un cubo de rubik.

Pinkie: ¿Hola? - grité, buscando cualquier persona - ¡Estaba teniendo una ilusión muy linda hasta que alguien apagó las luces! ¡Ni siquiera alcanzo a tomar uno de los dulces que estaban pegados en la pared!

¡Pero que tontita soy! ¡Había olvidado que todo esto era una ilusión mía! ¡Duh! ¡Podía salir de ahí cuando yo quisiera! Cerré mis ojos esperando que cuando los volviera a abrir, me encontrara de nuevo en los pasillos de Canterlot High, pero eso no pasó. Abrí de nuevo mis ojos, y ahora me encontraba en un cuarto con un horrible olor a podrido, en el cual solo había una débil luz que me iluminaba.. Intenté moverme, pero me di cuenta de que me encontraba amarrada a una silla. Esta vez de VERDAD estaba asustada. Cerré mis ojos y los volví a abrir, aún con la esperanza de salir de esta pesadilla.

Pinkie: ¿H-hola? Heh... ¡al parecer alguien olvidó desatarme!

Contenía mis lágrimas y sonreía, pero eso me causaba un terrible nudo en la garganta. Nunca me había gustado estar verdaderamente asustada, ni tampoco mostrar mi temor. Siempre encontraba una manera de no temer y seguir sonriendo.

Pinkie: ¿Alguien? ¡D-Dash me está esperando! ¡Se supone que debo de estar vigilando que no venga Discord!

En ese momento, escuché pasos. Poco a poco se escuchaban mas claramente; sabía que alguien se acercaba a mi. Suspire con alivio al saber que alguien por fin vendría a ayudarme.

Pinkie: ¡Yahoo! ¡Al fin! Disculpa, alguien me dejó atada a esta silla y de verdad no es nada cómodo. No me quejo, he dormido con almohadas de roca en mi hogar, una granja de rocas, pero esto es algo diferente. Incluso se podría decir que estaba un poquitín asustada. ¡Pero eso ya no importa! ¡Gracias por venir a ayudarme! Por cierto, ¿quien eres? - dije rápidamente -

Una familiar e infantil risa resonó en la habitación.

???: ¿Que pasa, Pinkie? ¿Ya no me recuerdas? - dijo aquella voz, mientras asomaba su cara a la luz -

Cuando aquella persona salió de las sombras no podía creer lo que estaba viendo. Ya no pude soportarlo, y comencé a llorar. Era... "ella". ¡Era "ella", maldita sea! ¡Había vuelto! ¡Era justo como en aquellas pesadillas! ¡Aquellos mismos ojos azules! ¡Aquel mismo lacio cabello rosa! ¡AQUELLA MISMA MALDITA SONRISA!

Pinkie: ¡No! ¡Tu no eres real! ¡Eres solo una ilusión! - gritaba mientras intentaba desatar las cuerdas que me mantenían atada - ¡El doctor me dijo que no volverías!

???: ¿Pero no me ves frente a ti, Pinkie Winkie? - dijo mientras su sonrisa crecía - ¡He vuelto! ¡Ahora podremos divertirnos las dos juntas! ¡Incluso tus amigas podrán unirse!

Pinkie: ¡NO! ¡NO LAS METAS A ELLAS EN ESTO! ¡POR FAVOR NO!

???: ¿Ah, no? - su sonrisa desapareció - Entonces... ¡podremos divertirnos con ese nuevo chico que conociste! ¡Cheese! - comenzó a reír de manera histérica -

Intenté gritarle que no se acercara a Cheese, pero las palabras no salían de mi boca. Lo único que salía eran jadeos de llanto. Estaba llorando y gritando tan fuerte que el aire comenzaba a faltarme. Quería despertar. Quería pedir ayuda. Quería que todo esto terminara.

???: ¿Que sucede, Pinkie? - Discord apareció por encima de "ella", mientras ambos hablaban al unísono - ¿Que no AMABAS la diversión?

Ambos comenzaron a reír juntos. Yo no podía hacer mas que llorar y seguir pidiendo ayuda.

Pinkie: ¡Alto! ¡Deténganse! ¡Por favor! ¡Basta! ¡Basta! ¡BASTA!

Narrador Omnisciente
La chica permanecía abrazándose a si misma, mientras su cuerpo yacía contra la pared, con la mirada perdida y algunos espasmos involuntarios que reflejaban el tormento que estaba viviendo en su mente. Por mas que lo intentara, Pinkie no podía escapar de su propia mente. Un humo color púrpura con negro salió de su oído, para después materializarse y dar forma a Discord. La chica seguía en aquel solitario pasillo, temblando, gritando y con lágrimas recorriendo su rostro, mientras su cabello se alaciaba. Fue entonces cuando perdió su ponificación, a la vez que su cuerpo se volvía gris.

Discord: ¡Bang! - dijo mientras hacía con las manos una expresión de una pistola disparando a su cabeza - El elemento de la risa perdió la cabeza.