El Diario de Samara, una chica Suicida.

¿De donde proviene aquella aquella voz?

Mientras caminaba por el pasillo hacia mi cuarto me encontre con Sol, ella se preocupo por mi pues me dijo que yo tenia un golpe fuerte en la mejilla derecha que se tornaba de color negro
-¿quien te hizo esto, fué Romina verdad?-dijo Sol
-No, yo me golpee con una silla-dije.

Ella se disculpo conmigo por no acompañarme durante el desayuno, y me explico que estaba ayudando en la cocina porqué necesitaba dinero
-¿Sol te das cuenta de la oportunidad que tienes?-dije
-¿Cuàl oportunidad, cómo así?-dijo Sol
-Sí, cuando Leoncio deje el mercado en la cocina puedes hablarle-dije
-No hare eso, sabes lo que siento por Mily-dijo Sol
-No te preocupes, solo dile que una amiga esta interesada en él, también dile que me llame mañana a la 4:30 pm y, dale el número fijo de nuestro curso (El día Domingo tenemos permitido recibir llamadas al número fijo de cada curso, las llamadas deben ser de nuestras familias en horario de 3 pm a 5 pm) -dije.

Sol se mostro de acuerdo y, se dirigio hacia la cocina, fuí a mi cuarto observe mi reflejo en el espejo y vi que Sol tenia razón pues yo tenia un gran golpe en mi cara, tome mi shampoo para ir a bañarme, sali de la ducha y fuí a mi cuarto nuevamente mientras me peinaba vi en el espejo el reflejo de una niña ella tenia cabello rubio corto, ojos color gris y rondaba los 13 años, rapidamente me di la vuelta y no había nadie, ¿qué es esto, acaso otra de las bromas de Romina?, ingnore aquel suceso y continue peinando mis largos rizos, al cabo de unos minutos el reflejo de la niña aparecio nuevamente, me senti asustada
-¿Quien eres, que quieres?-dije
-Soy Nara ya te lo había dicho y, solo quiero ayudarte-dijo ella
Me senti totalmente aterrorizada, abri la puerta de mi cuarto y corri lo màs rapido que pude, en el camino me encontre con Sol quien me dijo que Leoncio se mostro interesado por saber de mí, pero eso era lo que menos me importaba en ese momento, yo solo podia pensar en aquella niña del espejo, Sol se disculpo y se dirigio nuevamente a la cocina.

No me senti tan valiente como para regresar a mi cuarto, así que me quede en las canchas esperando a que el tiempo transcurriera, no se por cuantas horas o minutos estube allí hasta que llego Mily, ella se mostro preocupada por mi pues yo estaba muy palida, le menti y le dije que solo me sentia un poco mal, ella insistio en llevarme a la enfermeria pero yo le dije que solo debia tomar un poco de aire, y le pedi que se quedara conmigo, Mily se sento a mi lado y comenzamos a hablar ella me estaba contando un poco sobre su vida al punto que me conto sobre su amor hacia Sol, ellas llevaban un año juntas pero como el internado tenia una inclinación religiosa nunca les permitirian su relación, así que siempre la guardarón en secreto, Sol era la única razón por la cual Mily soportaba cada día estar en ese lugar tan horrible, yo solo escuchaba atentamente mientras ella hablaba y observaba ese brillo en sus ojos que quizas yo nunca podría tener, pues es muy dificil que a mi vida llege una persona que me quiera conociendome totalmente.

Valla ya era el momento de almorzar y, nos dirigimos a la cafeteria, al entrar estaba allí Zulma quien se rio de mi por el golpe que yo tenia en mi cara, Zulma dijo en un tono burlón:
-No te preocupes querida, yo te ayudo a arreglar eso- y, me dio un gran puñetazo, Mily intento defenderme pero le dije que no se preocupara, de repente escuche aquella voz diciendome: -Defiendete, ve y golpeala ó mejor enseñale quien manda, toma aquel cuchillo y hazlo-, me senti tan encegecida que hice lo que aquella voz me dijo, tome el cuchillo disimuladamente y camine hacia Zulma, cuando estaba apunto de hacerlo recorde las enseñanzas de mi Madre , guarde el cuchillo y, solo le di una cachetada, valla por un momento casi dejo que aquella voz guie mis acciones.