Entre la Vida y la Muerte

La noche en la cual muero

La noche se tornaba un tanto fría, una cierta inmundicia se sentía en el aire. Una noche como cualquiera, Daniel un chico de 20 años estaba mirando el cielo todo parecía normal. Pero no esa noche, no sería normal más bien sería una noche un tanto mágica por así decirlo. Me dispuse a entrar a mi casa por una copa de vino, bebí casi toda la botella, sentía una agonía un deseo de morir insaciable yo quería anhelaba estar muerto, pero no podía hacerlo, de hecho si podía tenía  todo s mi disposición para cometer el acto. cuando m disponía a hacerlo me percaté de que el cuchillo no cortaba mi pálida piel, tomé mi arma y la dispare en mi cabeza, y vaya sorpresa la bala rebotó como una bolita de papel. yo sorprendido me dirigí al baño, no podía créer lo que me había pasado.  Por la barba de Merlín exclamé, alcé mi vista hacia el espejo, mi rostro estaba  partido, literalmente lo estaba yo no podía créer no podía asimilar yo Daniel estaba muerto yo quien tanto anhelaba la muerte ya estaba muerto. mi piel estaba muy pálida más de lo usual.
Mi cuerpo parecía tener ya varios días de putrefacción y lo más asqueroso era que en mi interior ya hacían  gusanos comiendo mis órganos yo en serio que no podía asimilar tantas cosas que Han pasado me pregunté ¿mi famila no se a percatado de mi fallecimiento? ¿no me Han visitado? ¿por qué?  Pero lo más extraño de todo fue cuando desperté en la calle de una ciudad muy transitada, todo lo había creado mi subconsciente. Me habían arrollado sufrí un fuerte golpe en la cabeza. Una adorable señorita inmediatamente se acercó cuando intentaba levantarme (ella me había arrollado)  le pregunté ¿sera que eres un ángel? A lo que ella contestó: no claro que no. Solo soy yo, quien por poco te asesina.