Vivir en Rusia no era tan complicado, de hecho Yuri no tuvo que preocuparse por donde vivir pues Viktor le ofreció su departamento, literalmente vivían juntos.
Tampoco el idioma le costó ese entre lo que aprendía en libros y lo que Viktor le enseño... a su manera, pero al menos lo aprendió. Aún no tenía muy buen control cuando se trataba de pláticas largas y con personas que no lo conocían. Aunque no acostumbraba hablar con personas desconocidas sino era necesario.
Lo único en lo que no quedaba muy bien parado era en el frio que llegaba a hacer, las temperaturas llegaban a ser mucho más bajas que en Japón, lo bueno es que los abrigos lo cubrían muy bien del frio.
Y casi nunca tenía problemas en nada, hasta que llego diciembre, el primer cumpleaños que estaría con Viktor en Rusia...aun recordaba bien cuando le había preguntado al ruso que quería de cumpleaños.
...
-Viktor ¿Qué quieres para tu cumpleaños?- pregunto Yuri sentándose en el extremo contrario al que estaba su entrenador, quien estaba acariciando a Makkachin.
-¿Lo que quiero para mi cumpleaños?- Viktor se quedó en silencio. –Lo que Yuri decida regalarme me gustara.
-¡Viktor! Debes desear algo para tu cumpleaños.
La habitación se quedó en silencio.
-No se me ocurre algo que deseé así que tendrás que sorprenderme Yuri- después de decir esto Viktor le sonrió.
...
Yuri se había quebrado la cabeza toda la semana pensando en que debería regalarle por su cumpleaños, ahora que lo pensaba había sido algo tonto preguntarle si no había algo que deseara... pues prácticamente no había algo que no pudiera pagar.
Lo bueno es que solo tenía que preocuparse del regalo de cumpleaños y no el de navidad, ya que esta se festejaba hasta enero.
Al final solo se le ocurrió una cosa que a Viktor le gustaba, aunque también a él, y hacía tiempo que no comían...
Katsudon.
Era claro que no era un presente pero el mismo lo prepararía, así que esperaba que por eso contara como uno. Ahora solo le quedaba una cosa por pensar...
¿Cómo haría el Katsudon sin que Viktor lo descubriera?, necesitaba pensar en algo rápido.
(...)
-¡Yuri!- Viktor entro al cuarto del joven. -¿Aun no te levantas?
-No me siento bien- tenía la voz algo áspera.
-¿Qué tienes?- pregunto poniendo su mano en la frente de Yuri. –Tienes algo de temperatura, será mejor que no salgas con este clima. Yo me quedare a cuidarte.
-¡No! Digo no es necesario, tu ve Yurio te ha de estar esperando- paro un momento para toser. –Además es tu cumpleaños seguro te prepararon algo, yo me puedo cuidar y tengo a Makkachin de compañía.
-Yuri yo preferiría...
El timbre empezó a sonar.
-Ya regreso.
En cuanto Viktor salió de la habitación Yuri saco un vaso de agua caliente debajo de la cama y con los dedos se salpico un poco en la cara.
Se sentía mal al mentirle pero si simplemente le salía con que no quería correr ni practicar ese día se daría cuenta.
Oyó unos pasos regresando a la habitación, volvió a acostarse tal y como estaba.
-¿Cómo que el tazón de cerdo está enfermo?- la voz de Yurio resonó por las paredes. Entro junto con Viktor a la habitación. –Se ve mal.
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Katsudon para Viktor | Yuri On Ice | [Vikturi]
Fiksi PenggemarYuri se había quebrado la cabeza toda la semana pensando en que debería regalarle a Viktor por su cumpleaños... hasta que se le ocurrió algo.