El Dragón tiene una personalidad firme y heroica, siendo como un puente entre la Verdad y la Luz.
Nacidos en el 1961, 1928, 1940, 1952, 1964, 1976, 1988, 2000, 2012.
El dragón pertenece al tipo Yang y al equinoccio de primavera.
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Su elemento fijo es la madera
Sus colores, el amarillo y el negro.
Sus plantas, la mandrágora y la salvia.
Sus flores, la flor de loto.
El dragón posee una personalidad magnánima y llena de vitalidad y fuerza. No es un ser excesivamente diplomático; más bien se le puede tachar de todo lo contrario. Pero esta falta de táctica se debe precisamente a su mayor virtud: la franqueza.
El individuo Dragón no es un ser que se ande por las ramas. Le gusta la sinceridad y escogerá siempre a sus amigos entre personas que amen la verdad por encima de todo.
La actividad es su mejor arma para no aburrirse. Es un ser vital por naturaleza.
Uno de sus peores defectos es el orgullo, pero se ve fácilmente compensado por los buenos sentimientos que esconde en su interior, que salen rápidamente a flote en cuanto la ocasión lo requiere. Siempre está dispuesto a ayudar.
Al dragón le encanta vivir como un rey. Si tiene dinero, no le importa gastarlo a manos llenas con sus camaradas.
Puede llegar a ser un individuo áspero, desconsiderado e incluso rudo cuando se le provoca. Y si encuentra a un contrincante que le responda con sus mismas armas, puede empezar una batalla campal.
Posee talento para todo, siendo inteligente, tenaz y voluntarioso. Le gusta ser escuchado y pocas veces se equivoca.
Es un ser independiente, al que no le gusta ligarse prontamente con lazos matrimoniales.
Ama la soledad, aunque a veces ésta se torna en su contra y le convierte en un ser sumamente depresivo.
Cuando el infortunio se cruza en su vida, puede encerrarse en sí mismo, aunque mantendrá una fachada exterior completamente distinta de lo que en realidad sienta dentro de sí. Entoces será difícil profundizar en su interior. Pero no amargará a los demás en sus preocupaciones; al contrario, será un gran camarada para la diversión.
El Dragón puede unirse con la Rata, ya que ésta, cuando se enamora, es capaz de aguantarlo todo. Y le proporcionará al Dragón su espíritu crítico y compartirá con él la afición por el dinero.
Con el Gato se encontrará en la gloria. Las cualidades mundanas y la diplomacia del gato servirán a la perfección a la desmesurada ambición del Dragón.
En cambio, no se llevará nada bien con otro Dragón, ya que competirán siempre para ganar en autoritarismo.
Con la Serpiente se complementará perfectamente. El Dragón gustará de la belleza de la Serpiente y se sentirá orgulloso de estar a su lado.
Una unión con el Perro no sería aconsejable, ya que éste es demasiado realista y ve al Dragón tal cual es.
Con el Mono se suele entender a las mil maravillas, pues éste le aporta su astucia y a cambio recibe la energía del Dragón.
