13: Días inolvidables

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Narras tú

Ya habían pasado 3 semanas desde que Jared y yo éramos novios, me sentía tan feliz a su lado… Nos veíamos casi todos los días… a veces salíamos solos a pasear o a comer, y en otras ocasiones íbamos los 6 :D … eran días inolvidables… De vez en cuando yo me sentía un poco deprimida… estaba más que claro que lo de Ian no lo superaría fácilmente, pero ahí estaba él… Jared, quién cuando me notaba cabizbaja no hacía preguntas ni me presionaba, al contrario… habían días en que él incluso se quedaba en la cama a hacerme compañía porque yo no sentía deseos de levantarme… Jared era un consentidor y el hombre más comprensivo y tierno y sexi y adorable que jamás había conocido… Un día en que no me encontraba muy animada, se recostó a mi lado en la cama, me abrazo… yo apoye mi cabeza en mi pecho, mientras contemplaba su perfecta barbilla…

Jar:         amor… cuándo me dirás amor?- pregunto mientras jugueteaba con mi mano-
Tú:         mmmm no lo sé :D –sonreí y le di un pequeño beso en su cuello
Jar:         mi monstruito… cómo no vas a saber?, o ya no me quieres?
Tú:         Jar!, cómo no te voy a querer tontito!- y le di otro besito en el cuello-
Jar:         es que… yo te digo amor, monstruito, pequeña, mi niña…te quiero, te amo, te quiero re-dar all night long [nota de la autora: el romanticismo se fue a la mierd*a con eso xD, me encanta que sea así el Gordo!] y tú solo me dices, Jar, tontito, te quiero… no crees que es injusto?-dijo dejando de abrazarme y cruzándose de brazos-
Tú:         :O pero Jar… jajajja, no seas inmaduro y dame un beso- dije intentando besarle-
Jar:         -esquivándome-  no ¬¬-dijo haciéndose el enojado
Tú:         ok no –dije cruzándome de brazos también e imitando su cara de enojo, a lo que él no pudo evitar reír-
Jar:         jajaja, ven acá mi angelito-dijo mientras me abrazaba-
Tú:         no, no quiero ¬¬-le dije jugueteando xD-
Jar:         no seas maliiiiita!!!- dijo sin dejar de abrazarme y dándome besitos en el cuello, el muy hdp me estaba poniendo a mil-
Tú:         no, para…-dije intentando contenerme y sonar convincente-
Jar:         jajajja, no no no…-dijo sin dejar de besar mi cuello y mis hombros, yo intentaba mantenerme firme hasta que el muy p*uto metió sus manos frías bajo mi polera y comenzó a acariciar mi vientre, lo que me calentó más que nunca-
Tú:         a la mierd*a Jared Joseph Leto te jodist*e- dije volteándome, lo abracé y le di un beso tan apasionado que Jar me dijo-
Jar:         wow!, te exijo que hagas eso más seguido- sonrió con una cara de caliente, se posicionó sobre mí y comezó a subir mi polera…besaba mi cuello y luego acariciaba mis piernas, cuando llegaba a los muslos los apretaba tan fuerte que me hacía gemir-
Tú:         Jar…ahh!
Jar:         qué…mmm-decía gimiendo también y sin parar de hacer lo que estaba haciendo-
Tú:         no…..nada…no pares-dije
Jar:         te amo monstruito- y me beso, me quitó la polera y ayudé a deshacernos de la suya…no pude evitar perderme al ver tan perfectos abdominales… el sonrió al ver mi reacción…luego siguió besando cada parte de mi cuello, hombros, pechos y vientre…en ocasiones casi llegaba hasta mi entrepierna…haciendo que arqueara mi espalda y apretara las sabanas con fuerza entre mis manos… Volvió a subir…me quito el brasier y comenzó a masajear mis pechos, luego los besaba y me daba pequeños mordiscos que me hacías saltar…
Volví a besar mi boca…introduciendo su lengua, haciendo movimientos incomparables…era un placer único el estar así con Jar…

Narra Jared

No podía parar de besarla…el contacto con su suave piel era el cielo…poco a poco comencé a hacer movimientos con mis caderas empujándola, mientras tomaba sus caderas con ambas manos atrayéndola hacia mí…Ella gemía y enterraba sus uñas en mi espalda, pero no me dolía, me excitaba tenerla así… deseándome tanto como yo a ella…nuestras respiraciones estaban agitadas…ella llevó sus manos a mi pantalón…se dio vuelta y quedó ella sobre mí… sentada sobre el gran bulto que parecía iba a reventar… comenzó a moverse hacia a delante y hacia atrás…rozando su femineidad con mi miembro…, no podía más…quería hacerla mía ahora!.


Ella puso sus manos en el cierre de mi pantalón… y lo empezó a desabrochar lentamente… yo apretaba sus muslos contra mí, deseando que me quitará el pantalón con rapidez… y lo hizo…, luego miró sorprendida la erección que traía y sonrió juguetona…, se inclinó hacia mi… besándome e introduciendo su lengua en mi boca, mientras que con una de sus manos masajeaba mi miembro…No aguante más… me puse sobre ella otra vez y le quité el pantaloncito de pijama que llevaba puesto, dejándola sólo con una sexy pantaleta… empecé a juguetear con mis dedos en su clítoris… ella me pedía que no me detuviera…y no lo haría…, arranque su ropa interior de un solo movimiento…rocé su entrepierna con mi miembro delicadamente, haciendo que ella enarcara su espalda y me exigiera que la penetrara ya…acerque la punta de mi virilidad a su entrada, que estaba mojadisima…
El dolor no es en vanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora