Mi nombre es Alexandra Leung, tengo 17 años y vivo en el norte de España, aunque no se por cuánto tiempo.
Mi padre es americano y mi madre española. Hasta los 9 años viví en Los Angeles pero mi vida torno un giro completo cuando mi madre decidi...
Llevo aproximadamente seis cubatas, aunque en verdad perdí la cuenta hace media hora. Estoy sentada en uno de los sofas del reservado de la discoteca, no preguntéis como he llegado aqui si no lo he pagado, porque ni yo lo se. Noto como alguien me agarra del brazo e intento ver con nitidez a la persona. Después de varios intentos me desespero.
- Mmira... no te veo una mierda, ¿quiien eres?-digo a duras penas.
-Alex, creo que es mejor que te acompañe al apartamento -dice una voz que me suena- soy christian, por cierto- asiento basicamente porque no tengo ni fuerzas para discutir.
(...)
Son las 14:00 cuando abro los ojos aunque me gustaría seguir durmiendo. Me levanto con algo de pereza dispuesta a ver que hacen mis amigas, pero antes de salir de la habitación una tarjeta me llama la atención. Tardo unos segundos en darme cuenta de que abajo a la izquierda pone "Christian Ren". Me siento en la cama intentado acordarme de como pudo llegar esto aqui. Comienzan a llegarme recuerdos salteados de anoche. Lo último que recuerdo es despedirme de Christian en mi habitacion bastante cariñosamente. Un momento, ¿que hacia el en mi habitacion? Joder, ya la he vuelto a liar. Soy un desastre cuando bebo, si mis queridas amigas no desaparecieran en los momentos menos oportunos me podrian decir que paso anoche. Pero nada, ellas a saber donde estaban. Empiezo a angustiarme ahora mismo podría estar embarazada de mi vecino potentorro. Joder, Alexandra deja de decir tonterias y piensa que hacer. Lo mejor será que después de comer me pase por su apartamento.
(...)
Llamo insistentemente a la puerta ya que mis vecinos o estan sordos o estan ignorandome.
- Joder, podeis abrir la puta puerta o la tengo que tirar!! -grito cansada de llamar
- Tranquila muchacha- dice un joven que no habia visto nunca.- ¿a quien buscas?
- A Christian -frunce el ceño- tengo prisa, muevete
- Me parece que ta has equivocado de apartamento
- Mira chaval, no estoy para bromas -digo haciendome un hueco para pasar al interior de la casa- ¿Christian?- grito cuando aparece uno de los gemeliers- Hostia, creo que no era aqui.
- Ya te lo estaba diciendo yo -susurra el joven que me ha abierto la puerta mientras paso delante de el para irme
- Espera, ¿no quieres quedarte un rato? -me propone picaramente uno de los twins, me arriesgaria a decir que Daniel
- Em, esto... No - intento no sonar borde ya que me estoy acordando de lo mal que les hable anoche- pero oye, que tengo dos amigas que seguro que estan dispuestas a quedarse eh -sonrio- hasta luego
Salgo rápidamente de esa casa y me dirijo al otro lado de la mía. Esta vez espero acertar. Basta con llamar una vez y rápidamente se abre la puerta dejandome ver a Christian riéndose a carcajadas.
- Ya si eso luego me cuentas el chiste, ahora tengo prisa
- Eres muy tonta -consigue decir entre carcajadas- menudo numerito has montado entre lo acosadora que parecias llamando al timbre, luego gritando y luego liandola dentro
- Joder -sonrió - si me estabas oyendo podias salir a ayudarme a no quedar en ridículo, eh. Pero a ver que yo venia a algo mas serio -digo dejando las tonterias a un lado- ¿Que paso anoche? Lo unico que recuerdo es liarnos en la puerta de mi habitacion y que desaparecieras
-Es una larga historia -le doy pie con la mirada a que empiece- los gemeliers intentaron ligar contigo, la cagaste casi tanto como hoy y me llamaste para desaparecer de ahi. Te perdi un rato de vista y cuando volví estabas demasiado borracha asique te acompañe a casa nos liamos unas cuantas veces y tal y cuando me fui a ir pues nos despedimos
- ¿No paso nada mas, no?- pregunto preocupada
- No, tranquila. No te viole -ríe.
- Perfecto, asi me gusta. -sonrió falsamente- bueno pues olvidalo todo igual que he hecho yo
Me dirijo a mi apartamento, concretamente a mi habitación. Lisa me dice que me preprare para bajar a la playa y eso hago. Busco en el armario algo cómodo y enseguida lo encuentro.
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- ¿Estas ya Alex? -pregunta Lisa intentando sonar alegre
- Si. ¿Me vas a decir ya que te pasa o prefieres esperar a la playa?- me acerco a ella un poco mas - recuerda que a mi no me puedes mentir
- Espera, ahora por el camino te lo cuento -sonríe debilmente
Salimos de casa entre risas. Clau y Nata, como siempre, van hablando de sus idolos. No les he contado nada de lo que me ha pasado con ellos, no quiero que se hagan paranoias. De pronto me doy cuenta que tengo una conversación pendiente asique me acerco a Lisa disimuladamente.
- Va, empieza -susurro
- A ver... -duda- ayer bebí más de lo debido, no recuerdo mucha cosa, bueno que coño, no recuerdo nada -comienzo a ponerme nerviosa ya que Lisa es un terremoto y me espero cualquier cosa.
-Sigue, me estoy estresando
- Pues cuando me he despertado esta mañana he cogido el movil, estaba abierto en galeria -coge aire- y tenia fotos liandome con uno de los gemeliers
- ¿QUE? -grito y ella me agarra del brazo para que me calle- ¿Quien de los dos era?
- Yo que se Alexandra, supongo que Jesus porque hace una hora me ha hablado por whtsapp -me mira antes de que yo diga nada- no preguntes, yo tampoco se porque tiene mi número.
