El es mio. Jamie Dornan

CAPITULO 4

Una señora de aproximadamente unos 30 años nos indico como debíamos de comodarnos el cabello, hay muchas luces y fotógrafos, nos acomodaron de espaldas a una pared, esto me hace sentir como si estuviera detenida ya que nos toman fotos de perfil y de frente, la diferencia es que aquí te las piden serías y divertidas.
Cuando estoy frente a una cámara siempre trato, aparte de lucir bien, sentirme bien, creo ese es el secreto, si te sientes bien luces bien, es simple, yo trato de demostrarle a la cámara que soy natural y que me siento muy bien así.
Llegaron más personas, eran maquillistas, estilistas, encargados de vestuarios, etc., Nos peinaron con una coleta realmente alta y bien hecha, como nuestras mamás cuando íbamos al kinder, nos juntaron a las 3 y juntas hicimos caras serid, sexys y locas, fue algo complicado ya que nunca había visto a esas chavas en mi vida, sólo podía finjir que eran como Valeria y Karla. Después hicimos el mismo procedimiento pero maquilladas.
Ha pasado ya una hora y yo debo estar en la academia a las 12, no hay problema, ella entenderá si llego un poco tarde.
Las siguientes fotos fueron con ropa de deporte, unos mayones y un top de la marca VS, de fondo teníamos un collage en blanco y negro con toques rosados, teníamos el cabello atado en una cola de caballo y maquilladas ligeramente, casi siempre todo era el mismo procedimiento. Ya al final fue con ropa interior, una foto cada una con la pose que quisieran.
-Llegó lo más difícil- mi mente lo pensó por si mismo al ver el pequeño escenario donde debíamos de hacer una mini pasarela. Después de que otras modelaran me tocó subir a mi, el piso era negro y muy brilloso.
Trato de hacerlo lo mejor que puedo, doy todo lo que tengo con unas sacadas largas pero no exageradas, caderas y cintura en movimiento, sutilmente sensual, al llegar al otro extremo moví mi cabello de una forma moderada y al igual sensual como la sonrisa que lance, en ese momento toca un "chic", claro la foto en la pose "perfecta". Di la media vuelta y regrese saludando a un público inexistente y riendo.
Mi trabajo aquí acabo, cuando me permitieron marcharme y avisaron que en aproximadamente tres semanas nos llamaban.
Son las 12:06, ya estoy cambiada solo me queda hablar con Marcus y emprendo mi viaje a la academia de Karla.
-Hermosa, creo que lo has hecho perfecto. Me sorprende diciéndome, Marcus siempre a sido bueno conmigo y siempre se lo agradeceré.
-¿Porqué lo dices?.
-Confio en ti. Pone sus manos en mis hombros y me brinda una sonrisa muy sincera, tan de Marcus.
***
Subo con paso acelerado las pocas escaleras que hay para estar frente a las puertas de la academia, son casi 12:20 así que mejor me apresuro un poco más antes de que Karla se canse de esperarme, entro moviendo exageradamente mis caderas y con la mano en una posición de señor elegante, según.
-Ya llegó tu salvación. Cierro los ojos y alzó la cara con aire de grandeza y escucho la retumbante risa de Karla por lo que también río yo.
-Aleluya. Dice con pequeñas risas interrumpiendo la.
-¿De que te ries?. Hago mi tono serio de bardo.
-No siquiera...notaste la presencia Hazza. Rie y lo señala, ¡harry!, Que pena, ahí estaba sentado el mejor amigo de Karla, el se ruboriza y se contagia de la risa.
-Me tengo que ir.
Después de que Harry se fue Karla estaba aún más nerviosa, caminaba de un lado a otro y eso me llena de curiosidad.
-Bueno. Da un suspiro para después continuar. -Conocí a Michael Jackson y es mi cita. Quiero creerle, en serio que quiero creerle pero no es la emoción que creí que sentiría, ella estaría casi llorando de la emoción.
-¿Te drogaste?. Use mi tono serio pero en realidad era broma, por respuesta tengo una mirada seria y asesina más la seña del dedo grosero.
-Es en serio.
-Pon Earned It ¿si? Estoy esterada. Yo habia, según yo, inventado esa palabra en mi adolescencia, es una combinación de "estresada y alterada", ¿como no estarlo?, Vengo de una audición de Victoria Secret, al ver que me ignora descaradamente yo pongo la canción.
Noto que karla está alegre, aunque trate de reprimirlo por estrés y enojo hacia mi. La escucho reír nerviosa y pedir ayuda en inglés, "Help me please".
-A ver, ya, te creo, conociste a Michael Jackson. Trato de mantener un tono relajado y sereno. -En segunda... Vamos a tu casa. Ella revisa con la mirada el reloj del fondo del salón de baile y se estera aún más.
Como no dejo que casi nadie maneje mi auto yo conduzco hasta la casa de Karla. Al llegar le pedí algo de comer y me dio una manzana, es probable que si digo así llegué a poder volar si me salieran unas pequeñas alas.
Agradezco a los torturantes brackets que lleve en mi adolescencia ya que ahora puedo tener una linda y sana dentadura.
Se le ve muy nerviosa, tiembla más de lo normal y eso es preocupante.
-¿Qué me pongo?. Abre las puertas de su closet.
-Loco... ¿Sabes que?. Me responde con un "que", que en otros casos me hubiera molestado. Le ordenó que se meta a bañar, porque, lo más seguro es que se le esté haciendo tarde, como siempre a la pequeña Karla.
-Pero.. No la deje terminar la oración porque le señale el baño diciéndole "ahora". Quizá se espanto porque salió corriendo al baño como venado.
Busque en el según closet de Karla aunque realmente no había nada lindo para una cita.
Le pregunto tras la puerta del baño a qué hora es la cita y me responde que a las 3.
-En la mare. Susurro. Son las 2 y ella apenas se está bañando.
Por suerte Valeria a llegado y me está ayudando con esta tragedia.
Después de mucho revuelto entre su ropa encontramos algo decente, un pantalón negro ajustado, una camisa blanca muy sencilla y una camisa a cuadros con colores rojos, azules y negros. Yo me encargaba también de acomodar el maquillaje, algunos accesorios y unos zapatos para la ocasión.
Ya que Karla salió del baño le aventamos amigablemente el outfit, demoró mucho realmente en el baño y ahora debe vestirse lo suficientemente rápido.
-Wow, que glúteos. Se dice Karla a ella misma mirándose al espejo, y, para ser sincera, si, el ejercicio le ha dejado más proporciones favorables a su cuerpo.
-Te ves bien. Dice Valeria con ese tono de voz tan dulce, con cierto toque orgulloso, karla asiente, aún que luego lo niega.
-Me veo de la caca. Se avienta a la cama boca arriba y con cara de desesperación.
-¿Te maquillo?. Es lógico que se lo iba a preguntar, yo siempre e pensado que el maquillaje te hace sentir más segura, aún que es lógico que no debe ser así, te hace confiar más en ti para después dar el siguiente paso.
La maquillo lo más natural que se hacerlo y que realmente queda bien, de repente tocan la puerta.
-Susan. Grita de repente Karla de nervios.