Gracias por preocuparte por mi

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CAP. EDITADO

-¿Así que se van a New York y no me lleva?-pregunta Noe fingiendo estar triste.

-Lo lamento...-respondo yo, frunciendo el ceño.

-No importa-responde devolviendo su sonrisa de la mañana a su cara-¿Me traes algo?

-¡Claro!...-respondo sin pensarlo dos veces- Un abrazo.-bromeo.

-De Chris. Poor favoor-canturrea mi amiga.

(...)

-¿Lista?-pregunta Sam, mirándome directamente a los ojos.

-Obveo-respondo acentuando en la "e".

Por el alta voz se escucha la voz de una señorita indicando que los pasajeros del vuelo 14, el nuestro, nos dirijamos a las puertas de ingreso.

Tomo de la mano a mi amiga y juntas nos dirigimos a la entrada.

Un vez en el avión Sam y yo sacamos nuestros auriculares y los conectamos a los celulares.

-¡Rayos!-escucho decir a Samanta.

-¿Que sucede?-pregunto mirándola intrigada.

-Me quede sin pila-me mira y mira mi celular.

Me lo arrebata de las manos y lo guarda en su bolso de mano.

-Hablemos...-dice mirándome satisfecha.

Me resigno ante lo ocurrido y asiento con mi cabeza y una sonrisa en mi rostro.

-¿De que quieres hablar?-pregunto y ella lo piensa o finge pensarlo.

-De Matt...

-¿Por que de Matt?-pregunto.

-No lo se, se me vino a la mente.

Bufo y ella me mira.

-¿Entonces de que?-pregunta.

-Quizás de ...-suspiro al escuchar que el el alta voz del avión comienzan a dar indicaciones de cuidado y salud para los pasajeros. Ya vamos a despegar.-Nunca me he subido a un avión.

Sam me mira como si fuera algo obvio. Al no ver ni una pizca de mentira en mis ojos me dice:

-¿Es en serio?-yo asiento lentamente repetidas veces.-¿Bella Williams nunca se a subido a un avión?

-Acabo de decir que no- respondo- ¿Estas sorda?-bufo y ella ríe.

-¿Y.... estas nerviosa?-me pregunta de repente.

-Un poquito y tu-respondo colocándome el cinturón de seguridad.

-No, es como la...-cuenta en sus dedos-tercera vez que me subo a uno.

-¿Y cual fue la primera?-pregunto, tratando de olvidar mi miedo a las alturas.

-Cuando fui a Miami de vacaciones. ¿Lo recuerdas?

-Si lo recuerdo-respondo recordando aquel día en el que me dio una tremenda gripe-No me llevaste.

-Te hubiera llevado pero te enfermaste-hace una pausa y continua- Le dije a tu madre que yo me quedaría contigo pero ella dijo que no. Que Alexander-mi hermano-y ella te cuidarían.

-Ah pues...-esa parte de la historia no sabia-¿Y la segunda?-pregunto recordando que hay una segunda antes de esta.

-Fue a Miami, otra vez...-deja de mirarme y mira a la ventana-pienso estudiar allá...

¡PERDÓN!¡POR QUE YO NO SABIA ESTO!

-¿Perdón?-¡no señor!, ¡eso no se quedara en mi cabeza!-¿Y por que yo no sabia eso?

Suspira y me mira de vuelta con una sonrisa triste.

-Pensaba contártelo...-comienza pero yo no la dejo seguir.

-¿Cuando?¿Desde cuando lo tenias planeado?¿Por que yo no lo sabia?¿Piensas dejarme abandonada acá? Sola y abandonada como un...-no me deja terminar ya que sus risas invaden mis oídos y quizás los de los que están a nuestro alrededor.-¿Que te pasa?-pregunto sin entender la razón de sus carcajadas.

Sus risas cesan de a poco hasta que me mira con ternura.

-Gracias por preocuparte por mi-dice y recuesta su cabeza sobre mi hombro.

También recuesto mi cabeza sobre la suya por uno segundos. Después me incorporo y la miro de vuelta, haciendo que ella también me mire y entienda que es lo que le quiero decir con mi mirada.

-¿Ahora si puedo contártelo antes de que te alteres de nuevo?-toma mis manos y me mira haciendo puchero.

Asiento.

-De acuerdo.

-Bueno. Lo tenia planeado desde hace dos semanas, mi madre me lo ofreció antes de decirme que ella se iría a Costa Rica a realizar los acabados de su marca-Así es. La madre de Samanta es una de las personas mas reconocidas por su marca de zapatos; los cuales son muy bonitos y cómodos-Supongo que me lo dijo para que no le mencionara nada sobre sus seguidos viajes de trabajo. Bueno el punto es que me dijo esto después de que regresáramos de Miami y le dijera lo mucho que me gustaría vivir allá ya que es hermoso-hace una pausa y continua-Aquí es donde entras tu-¿Perdón?-Pensaba decírtelo a ti la anterior semana pero pasabas ocupada. Y no... no quería dejarte aquí sola y abandonada como un puntitos suspensivos-Reímos ante su comentario-al contrario, hable con mama y ella me comento que con la tuya esta hablando para sacar una linea de zapatos y ropa de la misma marca.

Estaba al tanto de esto por medio de mi mama.

Pero no entiendo, en que entro yo referente al tema del segundo semestre de Sam en la universidad.

-Continua...-le invito a que proceda.

-Y eso significa que tu madre ira con la mía a Costa Rica, si tu madre accede a colaborar con la nueva marca, y así tu también podrás venir conmigo a estudiar a Miami.

La miro con ternura, y puedo escuchar que en alguna parte del avión alguien dice:

-Ow. Yo quiero una amistad así-chilla una voz femenina.

Ambas nos quedamos en silencio y no se vuelve a escuchar nada.

-¿Tu también lo escuchaste?-me pregunta Sam en un susurro, tocando mi antebrazo.

-Si y tu-respondo de la misma manera.

-Pues sino lo hubiera escuchado no te lo estaría preguntando ahora mismo ¿no crees?-pone cara como diciendo "es en serio" volviendo a su tono normal de voz.

-Jijiji-rio nerviosamente-¿te amo?-trato de cambiar su cara de "eres o te haces".

A veces se me sale la estupidez. Pero a ella ¡también!

Al final, sonríe de vuelta y extiende sus brazos uniéndonos en un caluroso y efusivo abrazo.

-Yo también...-susurra en mi oído.

(...)

-¡Llegamos!-canturrea Sam. Eso es tan suyo.

-10 minutos mas ¿si?-digo dándome la vuelta, en mi asiento media dormida.

-Bell yo te dejaría mas de 10 minutitos solamente pero es que estamos en un avión y no hay posibilidad-se encoge de hombros y me guiña un ojo riendo.-Venga ya. Vamos.

Me pongo de pie y comienzo a tomar mis cosas del agujero de la parte superior a los asientos y salgo. Con el brazo de mi amiga entrelazado al mio. Claro.

-Vamos a comer-decimos ambas al mismo tiempo.

Nos quedamos mirando por unos segundos y comenzamos a reír.

-Sito-dice alguien a nuestras espaldas-Quiero una amiga así.

Nos giramos sobre nuestros talones y vemos a una rubia teñida mirándonos con ternura.

-Hola, soy Jess.-extiende su mano. Quien primero la toma soy yo.

-Bella Williams-respondo con una sonrisa sin dientes-Un gusto.

-Ariel Delgado-responde mi amiga-Igual... mucho gusto.

¡A primera vista! [[En Edicion]]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora