Ellos... Mi salvación

Capítulo 10

Sara se asusto un poco al principio pero al oler el perfume no tuvo duda de quien era.

- ¿Álv? Dime que eres tu por favor. - dijo casi llorando de emocion.
Álvaro le hizo un gesto a Marta para que le dijese que no era él pero no le salio.

- ¿Y si te dijese que no soy Álvaro que pasaría? -dijo él.
Sara gl oir su voz no tuvo duda, se dio la vuelta rapidamente y se tiró a sus brazos a abrazarlo.

- ¡¿Qué haces aqui?! -dijo emocionada sin soltarlo.

- Pues de visita - dijo con una sonrisa.

- ¿Y los chicos?

- No han venido, están en sus casas, tenemos 15 días de vacaciones.

- ¿Y tu por qué no has ido a ver a tu familia?

- Estuve ayer, pero como sabia que aqui eran fiestas dije, pues le voy a hacer una visitilla.

- Jo gracias -dijo abrazandolo de nuevo, y al girarse vio a Marta. - A por cierto, esta es Marta.

- Encantado -dijo él dandole dos besos.

- Igualmente -le contestó ella un poco mas recuperada del shock.

- ¿Y si vamos un poco más lejos de este barullo a hablar? -propuso Sara.

- Por mi bien - dijo Marta.

- Pues por mi no - dijo Álvaro serio, ellas se sorprendieron - Creo que de hablar ya habra tiempo, ¡yo quiero ir a las ferias, que las he visto y estoy muriendo de ganas de subir a los autos! -dijo, y echó a correr con ellas detrás. Cuando ellas llegaron él ya habia comprado tres fichas para el conejito loco.

- Lo siento pero yo ahi no me subo - dijo Sara negando con la cabeza.

- Anda, no me seas miedica -le dijo Álvaro.

- Si consigues que se suba te hago un altar -dijo Marta riendo.

- Pues ves preparandolo -contestó él, cogió a Sara en brazos y la llevó hasta la atraccion y la sentó en medio. -Sara en medio, yo abajo y Marta arriba, ale.

- Esta me la vas a pagar Gango -dijo ella seria mientras Marta se reia y el señor les ponia la seguridad pertinente.

- Que no va a pasar nada mujer -dijo Álvaro con una carcajada.

- Más te vale - y nada mas decir eso la atraccion se puso en marcha.
Sara soltó un grito y sin pensarlo ni un segundo se cogió del brazo de Álvaro. Este se rió.
Pasados cinco minutos de dar vueltas la atraccion paró y cuando les dieron la orden de que podian bajar bajaron.

- ¿Te ha gustado o que? -dijo Álvaro mirando a Sara y riendo al ver su cara de susto.

- Claro... Me ha encantado -dijo con sarcasmo.

A continuacion fueron a los autos de choque, primero subieron Álvaro y Sara juntos y Marta sola, luego Marta y Álvaro y Sara sola y por ultimo las chicas juntas y Álvaro solo.
Cuando bajaron fueron al baile ya qie se acercaba la hora del bingo y querian jugar, compraron los cartones y esperaron a que empezase, no tuvieron suerte con el bingo pero no les preocupo porque la fiesga siguió.

A las 8:00h decidieron que era hora de irse a dormir.

- Chicos, creo que va siendo hora de irnos para casa ya. -dijo Sara.

- Si mejor -dijo Marta.

- Pues vamos -contesto Álvaro.

- ¿Donde te quedas tu? -le preguntó Sara.

- Iré ahi al pueblo de al lado que cuando venía vi un hotel.

- Ni de broma, tu no cojes ahora el coche, tu te vienes a mi casa. -dijo Sara y Álvaro como tampoco se veia en condiciones de conducir no insistió y aceptó.
Cuando llegaron los padres de Sara ya se habian levantado, le prepararon la habitación de invitados a Álvaro y se fueron a dormir.