Murasame

Capítulo III: Y Ahora Que Estas Solo ¿Qué Harás?

Ian.- ¡¿Qué dicen?! ¡¿Que Delilah fue a donde?!

Alice.- Oye... tranquilo, fue lo único que nos dijo, hasta donde sabemos desde el Viernes la había estado buscandola por toda la preparatoria, solo nos dijo que la necesitaba para un proyecto especial. ¿Porqué? ¿Sucede algo?.

Ian.- No, no sucede nada, tan solo... necesito hablar con ella, olvidé darle el dinero para su almuerzo.

Alice.- Si gustas puedo ayudarte a buscarla, yo también necesito entregarle unas cosas que dejo aquí el Viernes.

Ian.- De ninguna manera Alice, iré solo, puedes darmelas a mi y yo se las entrego.

Alice.- ¿Que demonios sucede con tu actitud Ian? El Viernes fue lo mismo, entraste al salón y ni siquiera saludaste o te despediste y ahora ni siquiera quieres que te acompañe, que te hayan cambiado de salón no significa que dejamos de ser amigos y me da igual, la buscaré por mi propia cuenta; si, es tu hermana, pero... también es mi amiga.

Ian.- Alice, yo... lo siento, de verdad... han estado sucediendo cosas que ni siquiera yo comprendo y ahora mismo puede que Delilah este en peligro...

Alice.- Después hablaremos de eso, primero debemos de ir por Delilah y luego ya hablaremos...

Fue entonces cuando Ian y Alice se dirigieron al auditorio de la preparatoria, a lo lejos se escuchaba como estaban ensayando, sin embargo, al acercarse a la entrada se percataron de que estaba completamente cerrado, tan solo había una nota en la puerta que decía ''Ensayo privado''. Este hecho enfureció y preocupo mucho a Ian hasta el grado de querer golpear la puerta cosa que evito Alice jalandolo hacia atrás, después de unos cuantos forcejeos...

Ian.- ¡Dejame Alice! ¡Mi hermana esta atrapada ahí adentro! ¡No hay tiempo que perder! ¡Tengo que ayudarla!.

Alice.- No te precipites tanto, no hay que llamar mucho la atención, solo sígueme e intenta hacer el menos ruido posible, te prometo que la sacaremos de ahí, se que muchas de las cosas que haré te parecerán imposibles de creer pero... te pido de favor que te guardes cualquier comentario, ya habrá tiempo de hablar... por ahora confía solo en mi y sacaremos a Delilah.

Ian desconcertado y a la vez aun preocupado solo se quedó callado y tranquilo aceptando lo que decía Alice, sin más palabras comenzaron a caminar sigilosamente hacia la parte trasera del auditorio en donde se encontraban unos grandes contenedores de basura y muy a lo alto unos grandes ventanales, como si ya fuera toda una profesional Alice le dio instrucciones a Ian para que le ayudara a subir hasta esa parte, subiéndose encima de aquellos grandes contenedores y apoyandose de Ian Alice logro alcanzar ese gran ventanal, en cuestión de segundos logró romper el cristal sin haber hecho ningún ruido, sin haber dejado caer ningún trozo de cristal, el corte era tan perfecto que incluso parecía irreal, a los pocos segundos Alice subió y se adentro sin más, en cuestión de segundos y sin ningún esfuerzo logro ayudar a Ian a subir. Para fortuna de Alice e Ian aquel gran ventanal daba directo a las gradas del auditorio asi que no tuvieron ni el mas mínimo problema al bajara, sin embargo al poner un pie dentro se percataron de que no lucia como siempre, faltaban muchos asientos de las gradas, incluso del otro lado de las gradas se alcanzaba a ver que una fila completa estaba completamente derrumbada y que justo en en centro del escenario principal del escenario se encontraba una silla con una especie de sabana cubriendola incluso parecía como si una persona estuviera abajo de aquellas sabanas, cuando de repente todas las luces enfocaron al escenario principal, dejando ver claramente lo que había ahí. Ian reaccionó impulsivamente y comenzó a bajar al escenario rápidamente mientras gritaba el nombre de su hermana, fue entonces cuando agresivamente Alice lo detuvo y lo tiro al suelo.

Ian.- ¡Demonios! ¡¿Porqué me detienes de esa manera?! ¡Qué acaso no vez que Delilah necesita ayuda! ¡Tengo que sacarla de ahí!

Alice.- Ian no grites, guarda silencio, ellos podría escuch...