¡Te Amo! [Kim Taehyung]

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Recordar aquel día donde te conocí, opaca toda la tristeza que puede haber en mi corazón, el simple hecho de recordarte con tu primera sonrisa que me diste, me basta para ser felíz en la vida. Estoy locamente e indiscutiblemente enamorado de ti, mi bella princesa, la chica con la que nunca soñé, pero era mi felicidad. Mi mejor amiga.

- ¿Estas lista? - Me asomé por la gran puerta de aquella habitación del gran salón.

- Un momento - Me respondió ella y ahí apareció frente a mis ojos - ¿Cómo me veo?

- ¡Hermosa! - Respondí anonadado ante tanta belleza que presenciaron mis ojos - Te ves realmente hermosa mi querida.

- ¿En serio? - Ella sonreía como nunca lo había hecho - ¿Realmente me veo bien?

- Si cariño, te ves realmente hermosa en el día de hoy - Estaba contenta con mi respuesta - Pero Vamos, no será lindo si llegas demasiado tarde y que todos se hayan ido - Su rostro fruncido ante mi reclamo, me había encantado. Lástima que esas expresiones ya no las veré más.

- ¡Kim Taehyung! - Me reprochó y me sacó de mis pensamientos - No me estas escuchando - Hizo un leve puchero.

- Vamos, tu futuro esposo te espera - Traté de sonreír, pero ella lo notó, notó mi tristeza en aquellas palabras.

- ¿Qué sucede? ¿No estas feliz por mi? - Sus bellos ojos me miraban con intensidad por su curiosidad.

- Claro que lo estoy - No podía sonreír, pero tampoco iba a llorar - Sólo me da tristeza al saber que te vas y que harás tu vida lejos de mi.

- ¿Sabes que te amo? ¿Cierto? - Se acercó con su bello vestido blanco y me abrazó - Nunca me alejaría de ti, porque eres una parte de mí vida y quiero que sigas en ella hasta llegar a ser viejos.

- Pero no de la misma manera como lo hago yo - Susurro para mí y sólo le devuelvo una sonrisa.

La tomé de su pequeña mano y empecé a caminar con ella por los pasillos que la llevarían con aquel hombre, ambos íbamos en silencio, sin saber de que hablar, sólo faltaba cruzar por aquella puerta donde se encontraba él.

- Antes de que habrás esa puerta - Era el momento, ella debía saber mis sentimientos, los nervios me consumían, pero no podía entregarla ignorando mis sentimientos - Escuchame por un momento. Sé que no es el momento apropiado para decirlo, pero no puedo ignorarlo así como así, ya llevo bastante tiempo guardando esto y necesito desahogarme para poder superar esto u sentir satisfacción de saber que hice algo.

- Tae ¿Qué está pasando? Me estas poniendo nerviosa - La miré y su expresión era de miedo y preocupación.

- Ya han sido 5 años desde que me di cuenta de este sentimiento, pero nunca me armé de valor para decírtelo, sé que ahora ya es demasiado tarde y en verdad lamentó mucho decirlo en el día de tu boda, pero es que la angustia me está matando de a poco, aunque sólo debo recordar para apaciguar el dolor. Perdón mi princesa, capaz que no me vuelvas hablar más. ¡Te amo! Y no como el amigo de siempre, te amo como la mujer que eres, la dueña de mi corazón, hablo de la mujer en el cual mi alma y corazón se enamoró.

- Tae... - Vi el asombro que reflejaba por mis palabras, pero su rostro se volvió duró, mientras reflejaba seriedad - Lo siento - Y abrió las puertas del lugar, dándole comienzo a la balada y los rostros felices de las personas que asistían a presenciar el matrimonio.

Camino sola por el gran pasillo, pero no podía ver más está escena, ver aquellas sonrisas que se daban me están matando.

Di medio giro y salí de ahí, necesitaba respirar y olvidar todo. Hoy sería un buen día para caminar a casa, aunque tomará dos horas en llegar a ella.

Lo único que podría agradecer en este día, es por tener todos estoy bellos y hermosos recuerdos, por la alegría que me dio y por compartir sus mejores momentos conmigo. Pero la vide sigue y ella siempre estará en mi corazón.

- Si tan solo no hubiera sido un cobarde ¿Las cosas hubieran sido distinta? - Me hablaba a mi mismo, mientras miraba el suelo co mis pies andando.

- ¿No podrías haber llegado un poco más temprano? Me estoy muriendo del frío aquí esperando - Escuche su voz, por lo cual mi mirada la busco. Y ahí estaba ella, fuera de mi casa con su vestido y su cara de molestia.

- ¿Qué haces aquí? - Hablé ante mi sorpresa de verla.

- ¡Te Amo! - Grito fuerte.

- ¿Qué? - No podía creer lo que estaba escuchando, toque me frente, tenía que estar alucinando, pero estaba sintiendo otra mano.

- No tienes fiebre - Me sonrió como nunca y me abrazó - Lo siento, pero no me pude casar con él - Me habló al oído - Te amo más que la primera vez que te vi.

- ¿Por qué? ¿Qué? - Aún no podía creer lo que sucedía.

Ella sólo río y tomo mi rostro con sus pequeñas manos.

- Sólo te estoy tratando de decir esto - Y me besó, como lo había hecho en mis sueños - Que estoy locamente perdida y enamorada de ti Kim Taehyung.

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