Nobody Compares

008

- ¿Y puedo preguntar qué fiesta pretendéis montar siendo solamente 6 personas y con un niño acostado? - preguntaste tú. Te empezabas a poner nerviosa. Tu hermano se había ido a dormir y estabas sola con 5 desconocidos en un salón. 2 de ellos te habían tirado la caña, o eso parecía, llamados Liam y Niall. Uno de ellos se quería hacer el gracioso pero no lo era, llamado Louis. Otro tendría que ser tu amigo pero no te fías por su fuerte carácter. Y por último estaba Harry, con el que no veías química posible. Y aún tenías el "no bebas mucho, que eres la única chica entre tanto chico" de Liam. ¿Qué pretendían hacer contigo? Tú no estabas ahí para ligar, sino para trabajar. No venías a tener nada con nadie, y mucho menos con un famoso de una boyband. Al igual te metías en semejante fregado.

- Pues se llama "FIESTA DE BIENVENIDA A JESSIE A REINO UNIDO". - soltó Zayn. - ¿No hacéis fiestas de bienvenida en España? 

- En verdad nos gusta la fiesta sin venir a cuento. Pero sí, esto es una fiesta de bienvenida. - dijo Niall. 

- Pues sí que tenemos. En España se hacen fiestas de bienvenida. Pero no así. Se hacen en un salón con más gente.

- Eh, que podemos ir a una discoteca. - soltó Louis. - Ningún problema.

- Sí claro, y dejo a mi hermano aquí solo. Ni loca. - soltaste automáticamente tú. Preferías estar en esa casa con tu hermano, que en una discoteca. Parecían buenos chicos, pero vete tú a saber como serían borrachos. O podrías evitar que estuvieran borrachos. Sí, sería la única opción. Quizás no pasaría nada, pero basta que pienses que no, para que pase. Parecían estar más salidos que el pico de una mesa. 

- Vale, pues pongo la música. Harry, saca bebida. Niall, procura que toda la casa esté insonorizada. No queremos que Jam se despierte. Louis, baja persianas. Liam, recoge todo. - empezó a mandar Zayn.

- ¿Y por qué debo recoger yo? Que morro le echas a la vida. - dijo Liam. Pero al ver que Zayn pasó de su reproche, se resignó y recogió la mesa. Todos hicieron caso a Zayn. Al final parecía que quien llevaba el mando de todo era él. Y la casa era de Harry. Tú te quedaste quieta en medio del salón mientras los veías moverse, cada uno haciendo lo que se les había pedido. Tenías miedo. Solo tenías 16 años, y estabas con chicos de 20 y pico años. Que son más mayores que tú. Y en España, cuanto más grandes, más salidos son, capaces de pedirte salami antes de pedirte el nombre.

Cuando todos acabaron, el salón se oscureció. Y se dio la luz. Estaban los 5 en pijamas, como habían dicho. Empezó a sonar la música. Era...¿PITBULL? ¿Qué hacía PITBULL sonando?

- Este es español, ¿no? - preguntó Niall.

- No. Es latino. - dijiste tú. Y te empezaste a reír. Pusieron Pitbull porque pensaron que era español. No podías parar de reír, imaginando su conversación de "pongamos a Pitbull, que es de su país". Tu risa cada vez era más sonada. Y acabaste en el suelo dando golpes a la moqueta y con la cara super roja. No podías parar. La imagen de Pitbull siendo español te rondaba por la cabeza, y escucharlo cantar "Don't stop the party" no ayudaba tampoco. Cuando viste que eras el centro de atención y que todos te miraban extrañados, intentaste parar.

- Creo que a ella no le hace falta alcohol. Se ríe sola. Es peor que Niall. Ya tienes alma gemela. - soltó Louis. 

- Es que me supera. ¿Pensabais que era español? ¿Por eso lo pusisteis? - preguntaste como pudiste entre risas incorporándote.

- Pues...sí. - soltó tímidamente Zayn. Parecía un poco molesto con tu risa. No querías molestarlos, pero era inevitable.

- Lo siento. No puedo parar de reír. Es que este estilo de música no es el mío. No soy de discotecas. No soy de fiestas, en verdad. - dijiste entre soplos. Debías parar de reír o te iban a echar de allí.