¿Soy yo tu destino? Hmph... (Sesshomaru y tú)

Capitulo 9

Narra ___:

Nos encontrábamos todos cerca de la fogata en silencio.

-Bueno ¿tú eres ___? ¿Cierto? -escuche una vocecita proveniente de un pequeño ser en el hombro de Inuyasha, yo asentí- sobre todo esto que te ocurre, puede que tú seas la reencarnación de una mujer bestia, por esa razón lograste atravesar el pozo y una de más peso aun, que comenzaron diferentes cambios físicos y mentales en ti ¿no¿ -dijo la pulga y yo asentí- tal vez si vamos al templo de la señora Irazue ella nos aclare con detalles, de quien eres descendiente o de quien pudiste haber reencarnado -todos se miraron con desconfianza.

-¿Donde queda ese templo? -me atreví a preguntar ya que nadie decía una palabra- ¿cuál es la ruta más rápida para llegar allá? -me levante más rápido que una bala.

-No pensara ir sola a ese templo, nosotros podemos acompañarla -acoto el monje con mirada como ida- cuanto tardaríamos -no logro culminar la oración, pues la voz chillona de Inuyasha se hizo escuchar.

-Yo no pienso ir al palacio de la madre de Sesshomaru, esa mujer me detesta -dijo cruzado de brazos- y mucho menos ustedes, son humanos -dijo señalando a Kagome y al monje pervertido.

-Inuyasha abajo -con decir eso Inuyasha se azoto contra el piso- claro que iremos contigo ___ -me abrazo, aquel híbrido solo refunfuñaba.

-Ahora quisiera saber que fue lo que le paso a Sesshomaru, estaba herido y no quiso dirigirme la palabra -dije y todos me miraron confundidos- ¿Qué? Acaso es un secreto -dije con desdén.

-En serio no recuerdas nada ___ -Dijo Kagome asustándome un poco- tú te descontrolaste por lo de tu transformación, mírate el cabello y las mejillas -sostuve mi cabello en mis manos estaba cambiando de color ahora se tornaba grisáceo- lo vez, a lo que iba Sesshomaru arriesgo su vida para tratar de que volvieras en sí, y pues luego de distraerte bastante, tu despertaste repentinamente cuando un árbol se dirigía hacia ti y el te quito del camino recibiendo el fuerte golpe -lo que decía Kagome, de alguna extraña manera me alegraba, de que alguien se preocupara por mí y más alguien como el, sentí como en mi estomago se formaban una bandada de mariposas volando en conjunto haciéndome sentir rara- te dejo inconsciente en el suelo para luego caer de la misma manera a tu lado, ya luego lo trajimos aquí y curamos sus heridas -yo asentí.

-El hizo... eso por... por mi -tartamude, al imaginar todo aquello y sentí mis mejillas arder.

-Tú solo tenias rasguños en las mejillas y en las manos, por destruir tantos arboles y atacar tan ferozmente a Sesshomaru -dijo Inuyasha incorporándose- es muy extraño que el haga esas cosas por una desconocida, a menos que lo haya hecho por forma de agradecerte por salvar a esa niña humana que lo acompaña a todos lados.

-Pudo haber sido por eso, pero ahora soy yo la que estoy en deuda con el por haberse arriesgado de esa forma -dije decidida- vayamos lo mas antes posible a ese templo -finalice, todos asintieron.

Narra Sesshomaru:

Me aleje entre los arboles pero aun podía escuchar a la perfección todo lo que ocurría en aquel lugar, escuche perfectamente cuando aquel monje le hablaba con tono lascivo a ___ a la vez que la tomaba de la mano, osadía la de ese humano, me enfurecía y me voltee para seguir mi camino...

Luego de unos minutoPercibí el olor de Jaken, Ah-un y Rin y continúe mi andar dejándome guiar por mi olfato, llegue y los encontré con una fogata hecha, ambos sin percatarse de mi presencia.

-Espero que el señor Sesshomaru se mejore pronto -dijo Rin suspirando.

-Por supuesto que si niña tonta, subestimas la fuerza de regeneración del Amo Sesshomaru.

-Así es Rin -dije acercándome a ambos, ella me sonreí como siempre, yo solo tenía el mismo gesto frio- Porque tardaste tanto en traer a Ah-un Jaken -me dirigí a él, quien se intimido- Me habría ahorrado todos estos inconvenientes si hubieras sido eficiente.

-¡Perdóneme! Amo bonito por favor no me mate -suplico.

-Ya basta ahora solo quiero descansar -espute con fastidio, como mi herida aun no sanaba decidí quedarme abajo recostado a un árbol, para que no se abriera. Logre quedarme dormido luego de unos minutos.

A la mañana siguiente no pude evitar abrir los ojos, ya que el sol empezó a colarse por entre las ramas de los arboles impactando contra mi rostro. Me incorpore al instante arqueando la espalda, para estirar cada parte de mi anatomía, la herida en mi abdomen aun no sanaba completamente, pero ya casi estaba así que tome cada manga de mi estola y la deslice por mis brazos dejándola tensada sobre mis hombros, mi armadura estaba desecha por tal razón mi pecho quedaba un poco al descubierto. Rin y Jaken no estaban supuse que habían ido por algo de comida, decidí caminar un rato para despejar mi mente, aun no podía borrarme de la cabeza aquel rostro ruborizado, esos ojos dorados que sostenían mi mirada con algo de timidez, esa extraña vestimenta que la recubría poco más abajo del vientre, su cintura bien definida por aquella ajustada prenda, sus desenfrenados intentos por cubrirse lo que le restaba del cuerpo, sus piernas temblorosas ante mi presencia, debía admitir que era magnifica la sensación que producía en ella y la sensación que ella me provocaba, tal vez sin ninguna intensión, en mi se levantaba una especie de placer. Un momento... ¿Qué? ¿Por qué estas recordando cosas insignificantes y patéticas?- sentimientos es lo que hace débiles a los humanos y a algunos demonios -susurre para mí mismo.

-Sin darme cuenta había llegado a la aldea donde estuve siendo atendido el día anterior, no sabía porque lo único es que estaba ahí, sin dudarlo un momento más me acerque a aquella anciana que había vendado mi herida y le pregunte a donde habían ido Inuyasha y toda su prole, pues ya no percibía su esencia ni la de Tn- Oye anciana sabes por dónde se fue Inuyasha -indague con frialdad, me miro confundida- ash no importa lo averiguare yo mismo -me aleje rápidamente devuelta con Ah-un para esperar a Jaken y a Rin, al cabo de uno minutos llegaron.

-Señor Sesshomaru ¿Cómo se siente hoy? ¿Ya no le duele? -dijo Rin con notable preocupación.

-Ya no ahora estoy más que bien -dije con mi acostumbrado tono pasivo y frio- Nos vamos, tenemos un nuevo objetivo -ahora me dirigía a ambos.

-Una nueva aventura, que bien -dijo Rin, Jaken viro los ojos- Hay no sea así señor Jaken.

-Amo bonito lo que usted diga, adonde iremos exactamente -dijo Jaken ignorando lo que decía Rin. No le respondí solo me dispuse a subir en Ah-un ambos me siguieron y nos largamos de ahí.

C O N T I N U A R A . . .